Mi nombre es Alex, tengo 28 años y estoy felizmente casado con mi esposa (pongámosle María). Amo mi mujer es mi razón de existir, lo que voy a contar no me hace sentir orgulloso, pero fue algo que me encantó y hay arrepentimiento, pero fue algo que no puedo borrar.
Con mi mujer llevo 3 años de casado es un matrimonio feliz y bastante bien económicamente. Ella es una mujer hermosa rubia con buenos senos y un buen culo. Yo soy un hombre alto con cabello oscuro igual que mis ojos tengo buen cuerpo ya que me encanta el gimnasio igual que a ella. Nuestra relación es perfecta pero el sexo empezó a desvanecerse ya que ambos estábamos ocupados.
Hace unas semanas mi mejor amigo que también es profesor me hablo de cubrirlo en una preparatoria yo no quería ya que soy profesor de universidad pero era un favor que él me estaba pidiendo ya que su mujer iba a dar a luz así que tuve que aceptar.
A mi mujer no le encantaba la idea ya que las niñas de ahora son muy atrevidas ella nunca fue celosa pero entendía el motivo porque no quería que yo entrará a trabajar ahí, aun así la convencí y acepto.
Esa noche antes de entrar a trabajar yo me estaba bañando y la puerta se abrió "¿Te acompaño?" Era mi mujer sin nada de ropa sin pensarlo la atraje hacia mi y la comencé a besar ferozmente. Separe sus piernas y comencé acariciar su clítoris, ella gemía cada vez más por el acto de mis dedos, ella me masturbaba y yo estaba cada vez más excitado, ya no pude aguantar más así que la cargue y la recargue en la pared.
Mi pene entro con fuerza y ella soltaba un gran gemido "Oh mi amor" Sentía como me apretaba con fuerza "Mierda" Me salió decir, era tan rico lo que estaba pasando, ella gemía cada vez más fuerte "Que rico me duele" (No es por fanfarronear pero mi pene es de muy buen tamaño). Escuchar eso comencé a penetrarla con más fuerza hasta acabar dentro de ella (ya que ella se estaba cuidando). Sali y sus piernas estaban temblando "Que rico fue eso" le dije besándola "Me encanto mi amor". Entre besos y caricias nos bañamos juntos y nos fuimos a dormir ya que mañana me tenía que despertar temprano.