Poco a poco fui despertándome, abriendo los ojos e intentando ubicarme tanto mental como físicamente. Miré a todos lados y me percaté de una cosa muy importante, que no estaba en mi habitación y por ende no estaba en mi casa.
Me di la vuelta y vi a un chico durmiendo a mi lado, intenté hacer memoria y me acordé de la fiesta de ayer, del chico que conocí, el cual estaba dormido junto a mí, y de que bebí mucho alcohol. Me fui quitando las sábanas y vi que estaba totalmente desnuda, con toda la información en mi cabeza supuse lo que pasó: fiesta, lío y sexo estando borracha. No era la primera vez que me pasaba por lo que no me preocupaba mucho.
Aun estando desnuda me levanté de la cama, noté una puerta semiabierta que llevaba a un pequeño baño, entré, me lavé la cara y miré mi cuerpo por si encontraba alguna marca, solo vi mis rodillas y glúteos rojizos, sospeché que fue una noche intensa.
Volví a la habitación, vi toda mi ropa de ayer tirada por el suelo. Una a una fui recogiendo las prendas y las coloqué a un lado de la cama, encontré el móvil y me puse a responder mensajes para al menos dar señales de vida y quitar preocupación a mis amigas, mientras estaba en ello escuché ruidos detrás de mí y noté una mano rodeándome la cadera.
-¿Ya te vas?
Me aparté de la cama de un salto, me di la vuelta y suspiré por el susto que había recibido.
-Perdón, no quería asustarte -Me dijo el chico-.
-No pasa nada… si yo ya me voy.
-¿Y nada de repetirlo?
-No la verdad es que quiero irme.
-Venga, si te gustó lo de anoche, incluso dijiste que querías repetirlo.
-No me acuerdo de nada de anoche.
-Estábamos muy borrachos, bueno, tú más que yo, pero recuerdo que nos lo pasamos muy bien.
-Vale bueno me alegro de que nos lo pasásemos bien, pero yo quiero volver ya a casa.
El chico se levantó desnudo, me fijé en su miembro el cual estaba erecto, buscó sus pantalones y al encontrarlos sacó su cartera, buscó dinero y me ofreció 20€.
-20€ y follamos.
-¿Tú te crees que soy una puta?
-¿Quieres más?
-No, quiero irme.
Sacó otros 20€, los rechacé. El chico se rio, se acercó a la mesilla de noche que tenía al lado, rebuscó entre algunas cosas, sacó una pequeña bolsa de la cual me reveló dos billetes de 50€
-140€ y una follada rápida.
Me lo estuve pensando mucho y al final acepté. Tras decir que sí se acercó a mí, rodeó mi cuerpo con sus brazos y empezó a besarme, yo me dejé llevar, puse mis antebrazos sobre sus hombros y seguí sus besos como si nada. También pasó sus besos de mis labios a mi cuello, y de mi cuello a mis tetas. Me lamía y mordía los pezones, estrujándomelos tanto con sus dientes como con sus dedos. "Que tetas tan grandes" me dijo. Luego subió de nuevo a besarme.
Tras un buen rato besándonos me dijo de arrodillarme, yo le hice caso y me puse al nivel de su miembro.
-Cómetelo.
Agarré su polla con una de mis manos, la empecé a manosear mirándola fijamente y me la metí en la boca. Gemí cuando tuve su miembro dentro de mí, comencé a mamarla lentamente aumentando el ritmo cada cierto tiempo. Él me agarró de la cabeza y comenzó a follarme la boca muy intensamente, yo me quedé quieta para recibir sus pollazos en mi boca los cuales llegaban al fondo de mi garganta, su glande se metía y salía rozando mi lengua y chocando contra mi campanilla. Después empujó mi cabeza contra su miembro el cual quedó entero dentro de mi ahogándome, aguanté la garganta profunda, y cuando me la sacó vi su miembro totalmente mojado por mis babas.
Me tumbé boca arriba al borde de la cama, abrí mis piernas y le dije que me penetrase, y eso hizo. Se acercó a mi vulva, me la lamió y escupió, y me fue metiendo la polla lentamente dentro de mí, al llegar al final me comenzó a follar el coño violentamente, propinando unas fuertes embestidas que empujaban todo mi delicado cuerpo, mis tetas rebotaban exageradamente, el chico se acercó y a la vez que me estaba taladrando el coño comenzó a azotarme una de las tetas.
Yo sentí una gran sensación de satisfacción, quise sumar la sensación comenzando a masturbarme el clítoris con mis dedos ya mojados por mi boca. No pude retener mis gemidos, grité de placer a la vez que el chocar de nuestros cuerpos se escuchaba por toda la habitación. Tras jadear, ser embestida intensamente y follada, una sensación de excitación recorrió todo mi cuerpo y mi vagina soltó un gran chorro que mojó parte de la cama, el suelo de la habitación y las piernas del chico además de su polla.
-Me había olvidado de que tú hacías squirting.
Me metió de nuevo la polla y comenzó de nuevo a follarme, y como antes mi coño hizo squirt de nuevo a la vez que yo solté un pequeño grito de placer.
-Joder que rico.
Acercó su cabeza a mi coño y comenzó a lamerme toda la vulva mojada saboreándola. Sus lamidas me excitaron, volví a masturbarme con mis dedos, él apartó su cara y me metí los dedos. El chico se puso a mi lado, puso su polla en mi boca, a la vez que yo me metía los dedos comencé a lamerle la polla muy torpemente, y empezó de nuevo a follarme la cara. La sensación de tener su polla en mi boca mientras me hacía dedos era fantástica, mezclando eso a la excitación que estaba sintiendo por masturbarme, la cual hizo que gimiese de nuevo, solté otro chorro a presión el cual mojó las mismas zonas de antes.
Tras ello, me hizo ponerme en cuatro, acercó su miembro a mi coño y me folló con la misma intensidad de antes y con las mismas embestidas violentas, pero esta vez propinándome duros azotes y tratándome como si fuese una puta (que lo era). Me tiró del cabello y me empezó a insultar diciéndome cosas como "que bien follas puta de mierda" o "seguro que esos 140€ te los gastas en otro vestidito de zorra" etc. A mí me daba igual, yo solo disfrutaba del sexo y gemía gritando y jadeando, recibiendo sus choques y azotes, siendo follada fuertemente.
Tras un buen rato así él se cansó, se tumbó y me dijo de montarle, yo hice caso y me puse encima de él dándole la espalda, agarré su duro miembro y bajé metiéndome su polla en mi coño, ya al tenerlo dentro comencé a cabalgarlo con movimientos de cadera. Podía notar su gran pene dentro de mi, mis glúteos chocando contra su cadera y mis tetas rebotando sin parar, yo gritaba del placer, él me azotaba tan duro como antes y me soltaba los mismos insultos. Todo ello me llevó al orgasmo y a que me corriese sobre su polla, dejando mojada sus piernas, las mías y gran parte de la cama.
-Si te pago más ¿Me dejas follarte el culo?
-Si.
-Te pagaré 50€ más.
-Me parece bien.
Me ordenó tumbarme boca abajo en la cama con las piernas cerradas, abrió mis nalgas dejando a la vista mi delicado ano, me escupió y procedió a meterme lentamente su lubricada polla, su glande era grueso y sentirlo perforar mi ano me excitó muchísimo. Queda aclarar que cuando todo esto sucedió yo no tenía tanta práctica en el sexo anal que tengo hoy en día, por lo que la penetración y el resto del sexo se me hizo muy duro. Ya al tenerlo entero dentro de mi, empecé a suspirar fuertemente por el dolor y la sensación de tener su miembro ocupando mi recto.
Él sin perdón alguno empezó a follarme duramente el culo, yo en respuesta empecé a gritar por dolor más que por excitación, sin embargo la sensación me gustaba y me daba igual lo duro que lo sentía, yo quería que me siguiese perforando el culo hasta rompérmelo.
-Aaayyy diosss córrete dentro de mi, correte dentro de mi aaaah.
-Eso haré puta.
No paré de gritar y de chillar del dolor durante todo el proceso, sentí mi ano apretarse y ser frotado por el tronco de su polla, el fondo de mi recto era embestido por su glande. Mi culo estaba muy tenso y apretado. Todo ello llevó a que por fin mi "cliente" se corriera dentro de mi sacando su polla de una. Me sentía torturada y a la vez aliviada, noté como su semen salía de perforado y abierto ano, estuve un buen rato tumbada en esa posición intentando recuperarme de la follada que había recibido.
-¿He sido muy duro?
-Has estado bien, podríamos repetir algún día y gratis…
-Eso me encantaría.
Nos empezamos a besar tumbados en la cama, luego usé su ducha para lavarme completa, me puse de nuevo la ropa, me guardé de los 190€ y me fui con el cuerpo reventada pero bien follada y pagada.
Espero que os haya gustado esta pequeña y dura experiencia, muchos besos y amor y recordad cuidar vuestro culito.