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Paseo para tres (Parte 1): Jacuzzi
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Tiempo de lectura: 4 minutos

Para cambiar la monotonía decidimos dar un paseo con mi novia Diana y sus amigas. La amiga de Diana, Elena tenía un novio mientras que Moni iría sola. Sin embargo, a última hora el novio de Elena no pudo ir y de igual manera Moni también se ausentó. Elena dijo que no había salido a pasear y que de todas formas iría, entonces a la final nos embarcamos en el viaje mi novia Diana, su amiga Elena y yo.

Encontramos unas cabañas no muy lejos de la ciudad, y una señora se encargó de mostrarnos el lugar. Dentro de la cabaña había un pequeña sala y dos cuartos; en el primero dormiría Elena y el otro Diana y yo. Decidimos alistarnos para ir a tomar un baño en un jacuzzi que había en el jardín. Me adelanté al jacuzzi mientras Elena y Diana se quedaron conversando. Estaba ya en el jacuzzi cuando Elena y Diana se acercan conversando, no puede evitar mirar el cuerpo de Elena e intenté disimular viendo a otro lado, pero luego Diana se quitó la bata y nuevamente mi vista cambio hacia ella, se veía muy sensual con su hermoso abdomen y grandiosas caderas, ambas llevaban ternos de baño de doble pieza. Diana de repente haló de un lado el sujetador de Elena, dejando expuesto un momento su seno a lo que se cubrió rápidamente y de igual forma Elena hizo lo mismo con Diana pero ella no se avergonzó tanto y Elena entre risas le decía que es una tonta. Ellas se reían y decía que cierre la boca o se va a inundar el jacuzzi, entraron sin más en él y nos quedamos ahí conversando entre nosotros.

Poco a poco la conversación fue subiendo de tono incluyendo cosas más calientes como que pose sexual te gusta, una fantasía que quieras cumplir, quien tenía pechos más grandes o si harías un trio. En un momento Elena se levantó a tomar un coctel y puede observar frente a mí todo su trasero, lo cual me emocionó. Diana se dio cuenta de inmediato y cogiéndome del pene me dijo: te gusta no? Yo no sabía qué hacer, Elena en cualquier momento podría darse la vuelta y ver como Diana me estaba acariciando, luego de un momento de rápida masturbación me soltó velozmente y Elena se dio vuelta, yo estaba rojo y excitado, pero por las burbujas del jacuzzi no se lograba observar mi erección.

Más tarde Elena salió del jacuzzi, regresando con un pequeño tablero en sus manos, en él había una flecha giratoria. La idea era que dependiendo a donde apunte la flecha tendrías que bailar un poco atrevido o sacarte una prenda. La primera en jugar fue Elena y le tocó realizar un baile, ella se movió de arriba abajo de una manera muy sensual, luego me tocó a mí y de igual manera deslicé el culo de manera circular lentamente frente a las chicas, finalmente el turno de Diana quien además de realizar un movimiento muy sensual de caderas, también agitó su culo frente a mi cara; sin embargo, además se sacó la parte superior de su terno de baño, dejando expuestos sus ricos senos que me encantan lamer. Posterior a ello, fue el turno de Elena quien de igual manera para igualar la situación dejó al aire sus senos que de igual manera se veían muy bien. Para mi turno me saqué el terno de baño por debajo del agua e imité tener sexo, moviendo mi cadera de delante hacia atrás a lo que las chicas me apoyaban con gritos.

Diana deseó cambiar el juego y dijo que ahora además de prendas podríamos empezar a jugar con penitencias y dependiendo del color que indique la flecha tendrías que hacer la penitencia a la persona de la izquierda o derecha tuya. Con esta nueva modalidad nadie se opuso. Diana giró la flecha y tuvo que hacer una penitencia. La penitencia la puso Elena, y Diana tuvo que acariciarme abajo, lo cual lo sentí más romántico que lujurioso. Luego me tocó poner una penitencia para Elena y le pedí que le chupe un seno a Diana pero no se atrevió por lo que se tuvo que sacar su última prenda su parte inferior, ahora solo Diana era quien llevaba puesta su terno de baño o por lo menos su tanga. Nuevamente Elena tuvo que poner una penitencia y me dijo que le masturbara a Diana, yo muy encantado lo acepté y por debajo de las burbujas introduje mi mano en dirección al terno de baño de Diana, haciéndolo a un lado lo empecé a acariciar sus labios por un momento a lo que Diana soltó un ahh y Elena se sonrojó. Nuevamente la flecha deseó otra penitencia para mí pero esta vez quien la puso fue Diana y dijo: bien te voy a mostrar como Ricardo sabe masturbar y me retó a que le hiciera lo mismo a Elena. Elena no opuso resistencia y se quedó sentada mientras me acercaba a ella. Empecé tocándole su estómago y fui bajando mi mano, como ya se encontraba desnuda no demoré en tocar sus bellos púbicos, característica de la cual carecía Diana pues nos excitaba más al poder apreciar mejor su sexo. Las burbujas no dejaban ver nada pero lo que sentía hacía pasar por mi mente su monte de venus que pasé solo de visita hasta llegar a sus labios que de igual manera acaricie pero un poco más rápido a lo que Elena soltó un doble gemido y bajó sus manos porque se estaba emocionando, lo que no sabía ella era que mi pene también estaba muy erecto y al momento de que descendió su mano me rozó el pene a lo que levantó rápidamente su mano y dijo alguien ya está emocionado y yo dije que quemas esperaban y les dije además ustedes también tienen los senos excitados, pues se encontraban con sus pezones firmes y puntiagudos a lo que ambas se miraron y rieron.

Entonces el turno fue de Diana y pidió a Elena que me chupe el pene por un momento, a pesar de lo excitados que estábamos todos, Elena dijo que no lo haría Diana acercándose sensualmente hacia mí, y tomándome del pene dijo: muéstrale tu pene amor de seguro le da ganas de chuparlo después de verlo, en ese momento soló deseaba que en lugar de sus manos sea su vagina rica quien este en contacto conmigo, pero sin negarme me apoye de un filo del jacuzzi y teniendo mis piernas aún en el agua, saqué pero no en su totalidad a mi amigo a flote a lo que Elena miró a otro lado y luego de nuevo a mi pene. Diana se acercó donde Elena y le dijo: adelante chúpalo. Elena se quedó viendo mi pene pero nuevamente dijo hazlo tú si tienes tantas ganas, a lo que Diana dijo bueno en lugar de chuparlo que tal si le das un beso y las dos se acercaron a mi pene, el ambiente no podía mejorar dos chicas con sus senos al aire se estaban acercando hacia mi pene, una de ellas también descubierto su sexo semi-peludo; entonces sin más Elena se agachó y le dio un pico a la cabeza de mi pene a lo que se alargó un poco más. Ya no aguanto, no sabes lo que te pierdes dijo Diana, y agachó su cabeza hacía mi pene, el cual no podía estar más caliente. Sentir su saliva y su lengua juguetona en mi miembro nunca fue tan placentero como esta vez, se lo metía y sacaba con una sensualidad y ver como Elena se quedaba mirando calentaba más la situación. Ahora te toca, dijo Diana mirando a Elena. Elena se acercó y esta vez en lugar de un pico le dio un beso de unos 5 segundos, se lo metió y sacó a la boca y luego dijo bueno mucho por hoy ya cumplí con mi penitencia, ahora les dejo a los dos.

Nota: Este es mi segundo relato que publico, les agradecería leer sus opiniones y comentarios al respecto. Estoy trabajando en la continuación de este último, espero les guste.

Un saludo, Rey David.

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