Hola a todos, en mi primer relato les conté lo que paso aquella Navidad con Eli y los 2 chicos, bueno esa fue la primera de muchas otras experiencias que iré contando, así que aquí va la segunda.
Antes de continuar les aclaro que con mi marido hacía bastante tiempo que veníamos hablando de nuestras fantasías sexuales, ambos nos contábamos el uno al otro e imaginábamos a terceros, y a otras parejas compartiendo con nosotros, lo que no había pasado aún era hacer realidad esas fantasías, pero lo estábamos planeando.
Dicha esta aclaración, sigo contando lo que pasó luego de aquella Navidad, el 25 nos levantamos con Eli ya muy tarde así que lo más rápido que pudimos nos subimos al auto y nos fuimos en busca de mi esposo y su familia, en el viaje fuimos comentando lo ocurrido, a decir verdad yo había quedado muy pero muy excitada con ella y estaba ansiosa por saber que le había pasado a ella, si estaba dispuesta a repetirlo, en realidad yo quería pasar una noche entera a solas para hacer realidad mi fantasía de tener sexo con una chica así que quedamos de vernos mas adelante, yo viajaría a Buenos Aires y me quedaría en su casa todo un fin de semana, pero eso va a quedar para otro relato.
El 25 llegamos con Eli y pasamos todo el día en familia, ese y un par de días hasta que ella volvió a Buenos Aires pero mi esposo y yo nos quedamos, pasamos el 31, muchos familiares iban y venían hasta que por fin el 3 de enero quedamos solos mi marido y yo, hacia días que venía pensando en que quería contarle lo que había pasado pero no me animaba y no sabía cómo lo iba a tomar, una noche comencé a hablar de las fantasías como solíamos hacerlo, charla va charla viene beso va beso viene le conté lo sucedido, se puso furioso, peleamos y por los siguientes 2 días no me habló pero de a poco le fui hablando y diciendo que era lo que ambos queríamos y que se dio muy casualmente etc. etc. etc. y comenzó a calmarse y pedirme detalles, cada vez que contaba algún detalle parecía excitarse y preguntaba más y más el morbo era enorme, de lo que sucedió con Eli no mencione nada, ósea le conté pero no todo.
La semana siguiente volvimos, se terminaron las vacaciones, entre un negocio importante que tenía que cerrar y relación medio tirante lo mejor fue volver.
El comenzó a trabajar y yo también comencé con lo mío que lo hago desde mi casa, dos semanas más tarde un martes me dice que mañana debe viajar a Montevideo para reunirse con un inversor muy importante que venían hablando hace tiempo y estaba la posibilidad de cerrar un negocio muy grande, le dije que me gustaría acompañarlo a ver si podía recomponer la relación, estaríamos en un lindo hotel el trabajaría durante el día y luego yo intentaría complacerlo en todo para que las cosas vuelvan a hacer como antes.
El miércoles tempranito salimos en su auto, llegamos al hotel, nos instalamos y en seguida él fue a reunirse con este inversor, a la tardecita vuelve y me dice que va a cenar con él y que quería que lo acompañe así que nos aprontamos y fuimos a un restaurante muy lujoso y famoso a encontrarnos con Ernesto, pasamos un buena noche hablamos de todo un poco, la verdad muy agradable, él era un hombre muy educado y se notaba la clase que tenía, era muy elegante seductor y note un par de veces que me miraba algo de más, terminamos y nos fuimos al hotel.
Al día siguiente pedimos el desayuno en la habitación, desayunamos y mi marido se fue, yo aproveche para ir al spa, luego almorcé, hice cosas relacionadas con mi trabajo, termine unos diseños que debía enviar a Miami y me fui al shopping de compras o más bien a mirar lo que había, a la tardecita vuelvo al hotel y enseguida llega mi marido y me dice que el negocio está a punto de firmarse que solo faltan unos detalles y que íbamos a cenar nuevamente con Ernesto, me cuenta que quedó fascinado conmigo que no paraba de decirle lo hermosa que era y de hablar muy bien de mi y me pidió que me pusiera algo sexy para la noche lo que me dio algo de intriga por saber si me quería usarme a mi para cerrar su negocio así que le pregunte directamente si eso era así y hasta donde estaba dispuesto a llegar a lo que me responde que si era así y que íbamos por todo pues este negocio era el más grande de toda su carrera.
Nos aprontamos para la cena, yo me puse un vestido de Dior ajustado al cuerpo y sin espalda, medias 7/8 bien sexis con la terminación en encaje y unas sandalias Prune muy finas.
Ernesto nos pasa a buscar, llega en una limusina espectacular, enseguida entramos con mi marido y fuimos al restaurante, en el camino abre una botella de champagne que a mi realmente me pone muy cachonda, así que brindamos los 3 y como lo tenía sentado en frente a mi cruzo las piernas intentando que se vea la terminación de encaje de la media, él hablaba con mi marido y conmigo pero por momentos su mirada estaba precisamente allí en mis piernas.
Llegamos al restaurante y antes de pasar a la mesa nos sentamos como en un especie de living a tomar otra copa de champagne que nos dieron de bienvenida, y allí si no me saco la mirada de encima así que entre el champagne y lo que había hablado con mi marido yo ya estaba comenzando a imaginarme como terminaríamos los 3, así que comienzo a provocarlo con la mirada con la copa apoyada en mis labios, y aprovecho cuando sé que me mira para cambiar el cruce de mis piernas dejando ver entre el vestido mi entrepierna ya que no llevaba ropa interior puesta, era solo mi vagina con poco vello púbico cortado a la perfección, la verdad es que no sé si se vio algo o no pero a mi eso me comenzó a excitar y mi marido se dio cuenta, así que puso su mano en mi pierna y me acaricio un par de veces, me abrazó y hasta me besó.
Pasamos a la mesa y la noche estuvo como la anterior, muy agradable, charlamos nos contamos anécdotas, reímos, cenamos y nos quedamos de sobremesa, la verdad la pasamos muy bien, tanto que el tiempo voló así que regresamos al hotel y cuando llegamos mi marido propone un brindis en el bar del hotel para celebrar el acuerdo comercial, así que bajamos los 3 pero el bar ya estaba cerrado a lo que mi marido habla con el recepcionista y arregla que le suban 2 botellas de champagne a la habitación.
Subimos los 3, entramos en la habitación que era como un mini apartamento con un living con 2 sillones, una mesa ratona y un amplio balcón con una vista muy linda a la ciudad, una pequeña cocina con un desayunador y la habitación con el baño en suite.
Nos sentamos en el living y al ratito llega el champagne, más burbujas, más excitada me ponía, y allí si simplemente me abrí las piernas para que el pudiera mirar mi vagina que ya comenzaba a mojarse, seguimos de charla y en un momento salimos los 3 al balcón, nos sentamos y bebimos, en un momento mi marido se va al baño y yo justo me había parado y estaba mirando la ciudad apoyada en la baranda del balcón, ni bien mi marido entra Ernesto se para y va por detrás y me dice al oído que hermosa que estaba, no recuerdo exactamente las palabras pero fue algo así:
Ernesto-“si no estuviese tu esposo las cosas que podríamos hacer…”
Yo-“¿No se?! ¿Que podríamos hacer? ¡¡Además yo no veo a mi marido!!”
Ernesto-“te haría de todo, me calientan las mujeres como tú, tan provocativas que hasta creo que no llevas ropa interior
Todo esto susurrándome al oído, cosa que me excitó muchísimo, tanto que mientras me susurraba yo comencé a menearme y apretar mi cola contra su paquete que noté que estaba durísimo
Yo-“mmm no recuerdo si hoy llevo o no, habría que comprobarlo”
Me toma de la cintura y apoya su paquete más fuerte aun en mis nalgas y me besa en el cuello, luego pasa una de sus manos por mi pecho lo que deja mi pezón durísimo, a esa altura estaba muy excitada, podía sentir la humedad de mi vagina, con la otra mano comienza a recorrer mi pierna subiendo y metiéndola adentro del vestido y me dice “pues entonces comprobemos”, le pongo mi mano encima a la suya acompañando el recorrido y tiro la cabeza para atrás buscando besarlo pero no llego y me doy cuenta que mi marido ya había vuelto y estaba observando, cuando él se da cuenta también se aparta un poco pero mi marido le dice que siga así que aprovecho me dio vuelta y lo beso, vamos que fue un súper beso, y mientras nos besamos estiro mi brazo para que mi marido venga más cerca, terminamos de besarnos y ahora le toca el turno a mi amado así que lo beso y le pregunto al oído si seguimos, el asienta con la cabeza entonces los tomo de la mano a ambos y los dirijo hacia el dormitorio.
Una vez allí los 3 parados al borde de la cama comenzamos a besarnos, primero uno luego otro, sus manos me recorren todo mi cuerpo, siento que en lugar de 4 manos son muchas más, me manosean toda, mis pechos quedan durísimos, y mi vagina empapada, ya estaba al borde del orgasmo pero era demasiado pronto así que me agacho y me siento en el borde de la cama y desabrocho el pantalón de mi marido, le saco su hermoso pene que estaba durísimo y comienzo a jugar con la cabeza en mis labios, lo beso, le paso la lengua y mientras con la otra mano le toco por encima del pantalón la verga a Ernesto que aún no se había desabrochado, en ese momento si se desbrocha y se baja el pantalón, entonces mientras jugaba con la verga de mi marido con la otra mano agarro la de Ernesto, era la primera vez en mi vida que tenía 2 hermosos penes para mi sola, entonces comienzo a jugar con ambos, con uno y con otro, me meto uno en la boca y luego el turno del otro y vuelvo a cambiar y así sucesivamente hasta que mi marido se sienta a mi lado y comienza a besarme apasionadísimamente, y nos tiramos los 2 para atrás recostándonos en la cama, en ese mismo momento Ernesto me abre las piernas, me sube un poco el vestido y comienza a besar mi vagina, mi marido me saca las mangas del vestido dejando mis pechos descubiertos y los comienza a besar y manosear, luego mi marido se detiene un momento para terminar de sacarse toda la ropa y acto seguido se coloca mas arriba dejando su pene a la altura de mi cara, mientras Ernesto me sigue comiendo la vagina, pasa su lengua por mis labios, por el clítoris, baja y mete la puntita, yo agarro la verga de mi marido y me la meto en la boca, ya estaba a punto de llegar al primer orgasmo, mis gemidos eran muy fuertes pero quedaban en la verga de mi marido hasta que llega el orgasmo, wow que placer, que orgasmo más largo, acabé en la boca de Ernesto y ambos se dieron cuenta así que aproveche la pequeña interrupción para terminar de sacar mi vestido y Ernesto también terminó de sacarse la ropa, me doy vuelta y me coloco en 4 al borde de la cama, le agarro la verga a mi marido con la boca y comienzo a chupársela metiéndola lo más adentro posible, sin tocarla con la mano, le dejo toda mi cola a Ernesto a ver que iba a hacer y parado detrás mío comienza a pasar su verga contra mi vagina, va y viene, entre mis labios, llega a tocar el clítoris una y otra vez, hasta que la mete toda y hasta el fondo, uff, que placer, me sentí llena, comienza a cogerme con movimientos suaves pero sacando y metiendo toda su verga, yo lo disfruto muchísimo mientras sigo chupando la verga de mi marido, Ernesto comienza a moverse más y más rápido y yo comienzo a gemir más y más fuerte, mi marido se retira lo que desconcierta a Ernesto que para pero yo ya estaba en medio de un orgasmo y lo termino frotándome el clítoris con mis dedos y moviéndome yo dentro de la verga de Ernesto.
Pregunto a mi esposo “¿que pasa cariño?” Ernesto, se da cuenta que quizás mi marido esté incomodo y para del todo, pero aún tiene su verga dentro mío y dice “¿Qué pasa socio, todo bien? Entonces yo me muevo hacia adelante sacando la verga y abrazo a mi marido, allí recién contesta “todo bien todo bien, solo que estaba a punto de acabar y no quise hacerlo tan pronto”, entonces lo abrazo y beso con mucha ternura y también aprovecho para descansar un poco, ya había tenido 2 orgasmos muy intensos aunque mis 2 hombres aun tenían sus penes durísimos, voy al living así como estaba totalmente desnuda, solo me quedaban puesta las medias y sirvo el champagne que quedaba en la botella, total había otra sin abrir en la hielera, la cuestión es que vuelvo con las 3 copas, brindamos tomamos un poco más así desnudos como estábamos, y digo, bueno chicos a ponerse las pilas, 2 a 0 eh y recordé que en la maleta tenia mi vibrador que siempre lo llevo conmigo y un lubricante, así que la abro y agarro el lubricante, Ernesto aun tomaba champagne sentado en un sillón de la habitación y mi marido estaba arrodillado en la cama, me dirijo hacia a el y lo comienzo a besar, veo que Ernesto no tiene apuro y sigue sentado mirando, tumbo a mi marido en la cama y me pongo encima de él, besándolo mientras agarro su verga y lo masturbo un poco luego comienzo a rozarla contra mi vagina, y termino metiéndola suavemente, comenzamos a movernos suave, sin apuro miro al costado y le hago seña a Ernesto con el dedo de que viniera y le extiendo la mano con el frasco de lubricante, mientras fui a buscar el champagne lo había planeado y era el momento de cumplir con la fantasía de la doble penetración.
Ernesto se da cuenta enseguida, se acerca y toma el lubricante, se coloca detrás nuestro, mi marido tuvo que abrir un poco sus piernas para que el pudiera arrodillarse detrás nuestro y comenzar a colocar lubricante en su dedo que metía en mi culo, entraba y salía, colocaba mas lubricante y repetía el proceso hasta que entró todo el dedo y luego metió 2 dedos a la vez, mientras mi marido me penetraba la vagina suavemente, Ernesto por fin se coloca lubricante en su verga y deja caer un poco en mi agujero trasero e intenta meterla, “despacito” le digo, “poco a poco” pues al principio duele además como tenia la verga de mi marido adentro de mi vagina quedaba todo más apretado pero por fin entra, al fin tenia dos vergas dentro mío, una en cada agujero, me levanto un poco, le pongo los pechos a mi marido en su boca, sigo hacia atrás y rodeo con el brazo a Ernesto, le doy un beso en la boca que queda algo incomodo pero era la manera de ir de a poco pues me seguía doliendo algo aunque cada vez menos, Ernesto comienza a empujar y yo lo detengo con mi mano en su cadera y le comienzo a marcar el ritmo, vamos aumentando la velocidad, ambos la aumentan, me vuelvo a tirar hacia adelante y beso a mi marido, seguimos aumentando el ritmo, ahora si me siento plena, ahora si siento todo el placer de tener dos vergas penetrándome, comienzo a gemir mas y más, nunca había sentido tanto placer, los 3 gemíamos, nuestros cuerpos eran uno solo moviéndose al ritmo de la pasión, se viene otro orgasmo, siento la leche calentita de Ernesto dentro de mi culo y eso termina de hacerme acabar como nunca lo había hecho en mi vida, fue el orgasmo mas intenso y largo que jamás había experimentado, tan largo que hasta mi marido que seguía empujando frenéticamente también acabó y yo seguía y seguía, al final no se si fue uno solo o varios seguidos pero el placer fue enorme!
Terminamos los 3 en bata en el living tomando la otra botella de champagne y brindando por los negocios, el placer y el amor!!
Espero les haya gustado, por favor comenten si es muy largo si prefieren menos detalles etc. etc. así para el próximo que voy a seguir en orden cronológico puedo corregir y adaptar mi manera de escribir.