Hace un par de años conocí a un trapito en una red social. La verdad es que se portó muy buena onda conmigo y entablamos una bonita relación de amigos. Hasta que un día le pedí que fuera mi novia y ella aceptó.
Ese mismo día le comenté que si podíamos vernos el fin de semana. Cabe mencionar que ella es cosplayer y me pidió de favor que le ayudara a tomarse unas fotos para poder venderlas.
Llegó el día del encuentro, apenas sería la primera vez que nos veríamos en persona y yo estaba nervioso. En las fotos se veía muy preciosa, pero como ella no podía salir vestida de niña me dijo que lo más seguro es que llegara como niño. Le dije que no había problema.
Nos quedamos de ver afuera del metro de la Ciudad de México y efectivamente cuando la vi ella iba como niño. La saludé y nos dirigimos al motel que estaba por ahí cerca. Llegamos y pedí una habitación.
Subimos hasta el segundo piso que era donde se encontraba nuestra habitación. Abrí la puerta y dejé que ella entrará primero. De repente me dieron muchas ganas de besarla, pero me aguanté.
Para no hacerlo tan largo.
Yo estaba acostado en la cama esperando a que ella se pusiera el primer cosplay para tomar las fotos. De repente, escuché el sonido de sus tacones altos pisando el suelo. Cosa que me excitó bastante.
Cuando ella se acercó, tenía puesto el Cosplay de Sailor Mars (Sailor Moon) con unos tacones altos color rojo. Esa faldita dejaba ver sus lindas piernas. Mi pene se empezó a poner duro pero me tuve que aguantar.
Empecé a tomarle las fotos con mi celular poniéndola en posiciones muy sugestivas, sus calzoncitos marcaban su pene erecto por aquel erótico momento. Yo también tenía el pene como piedra.
No aguantamos las ganas así que me puso el condón, se puso de rodillas y me empezó a chupar el pene que se había vuelto duro como una piedra. Grabamos ese momento, ella miraba a la cámara cada vez que mamaba mi pene y se lo metía hasta el fondo de su boquita.
Después ella se levantó y se acostó en la cama alzando aquella faldita roja para poder quitarse el calzoncito. Rápidamente me le fui encima y poco a poco fui metiendo mi rico pene en su anito que estaba muy apretadito. Ella gemía suavemente cada que vez que le dejaba ir mi pene grueso y duro como una roca.
Nos besamos apasionadamente mientras le follaba el culito y ella gemía como toda una putita. Se masturbaba mientras le metía toda mi herramienta sin parar.
Le levanté las piernas para dejarlas en posición recta mientras me la cogía de su culito. Ella gozaba tener mi verga adentro de ese apretado anito qué tanto yo quería follarme.
Cuando nos venimos, descansamos acostados en la cama besándonos muy rico mientras frotábamos nuestros penes con la mano.
Rato después se fue a cambiar nuevamente, dijo que me tenía una sorpresa. Cuando salió del baño ahora estaba vestida de colegiala con una minifalda color gris y unos tacones altos grises. Peinada con dos colitas.
Verla así me puso el pene cómo piedra otra vez. Tomamos varias fotos y me la volví a follar tremendamente por su culito.
Follamos en todas las posiciones posibles, en una de esas se subió encima de mí insertando mi pene en su culito dándose sentones y gimiendo como toda una putita hasta que nos venimos una vez más.
Tengo que admitir qué cogérmela fue de lo más rico y que la hice mía un par de veces más.
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