Parte I
Desde siempre he sido muy arrecha y me encanta el sexo en todas sus formas, bueno eso ya ustedes lo saben, pero cuando uno está sola sin pareja se vuelve un poco difícil, esto no quiere decir que no puedas disfrutar y darte mucho placer.
En esos días en los que estoy muy caliente, que es casi siempre, me encanta tocarme y pajearme mientras veo un buen vídeo porno de la web. Lo rico que se siente imaginar que eres tú la del vídeo uffff, eso me excita muchísimo haciéndome explotar de placer; siempre había usado únicamente mis dedos para acariciar mi clítoris e incluso meterlos dentro de mi estrecha vagina, eso me hacía mojarme muchísimo y alcanzar orgasmos impresionantes como si de verdad me estuvieran cogiendo con una gran verga grande y dura, pero el destino me llevó más allá cuando en una de esas App en las que suelo hablar con muchos hombres calenturientos y pervertidos, encontré a uno igual de pervertido que yo, compartíamos los mismos gustos sexuales, fantasías y wow igual de arrecho a mí; el único problema bueno aunque en realidad nunca ha sido un problema es que está en otro país, sin embargo buscamos la manera de siempre satisfacer nuestras calenturas y arrecharnos juntos… cualquier momento en cualquier hora del día una video llamada para masturbarnos juntos, chat hot y ufff que decir de los videos y fotos eróticas… puedo decir que me encontraba en el paraíso al encontrar alguien tan caliente como yo dispuesto a disfrutar del placer del sexo… con todo y lo arrecha que soy jamás había sido penetrada por algo distinto a una verga dura y erecta, sin embargo ya los dedos no eran suficiente, cada vez que nos veíamos en una video llamada para masturbarnos, ese chico es más osado que yo, y me dijo que quería que usara una zanahoria o un pepino, al principio me reí mucho bueno la idea de meterme algo no me emocionaba mucho porque bueno los que me conocen saben lo asquienta que soy y el pensar en algo sucio dentro de mí ya hasta me enfría, sin embargo mis ganas por probar y lo arrecha que ese chico lograba ponerme detrás de esa pantalla de teléfono me hicieron ceder ante sus peticiones; así que decidimos intentarlo con un pepino ya que bueno es mucho más grueso y grande que una zanahoria… esperamos su día libre para hacerlo los dos desde casa, ya que en el baño del trabajo es un poco incómodo aunque no deja de ser excitante, pero aja, esta era una ocasión especial.
Parte II
El gran día nuestra video llamada empezó yo totalmente desnuda en mi cama con mis enormes tetas al descubierto y mi coñito esperando que empezara la faena para disfrutar, y que decir de él, allí también en su cama con su gran verga grande, gruesa y rosada, wow aún me mojo de solo imaginarla allí mirándome queriendo ser comida, ufff ese chico tiene la facultad de arrecharme de solo ver su verga y esa lengua que me enloquece… Estaba muy ansiosa por experimentar con ese pepino, así que iniciamos como de costumbre, mis dedos acariciando mi clítoris, primero muy suave y luego un poco más rápido y profundo, mientras veía como él se pajeaba y su verga crecía más y más para mi… ufff mi coño empezó a mojarse rápidamente y el deseo que sentía era cada vez mayor, estaba tan arrecha que mi cuerpo se estremecía cuando mis delgados dedos tocaban mi clítoris, tomé mis tetas en mi mano y la lleve a mi boca ummm sentía que era él pasando su lengua por mis pezones con la lengua húmeda un par de lamidas sentía que querían explotar de lo duro que estaban, luego lo metí a mi boca y empecé a chuparlos, bueno en realidad era él quien succionaba y chupaba mis tetas desde la distancia a través del teléfono, mi coño muy mojado, a él le excita mucho ver como se moja y mis gemidos cada vez más fuertes, sentía que estaba allí conmigo acariciándome y mamando mis tetas.
De pronto pregunta ¿trajiste el pepino? Por supuesto, respondí, imagina que es mi verga que tanto te gusta me dijo; de inmediato lo lleve a mi boca y empecé a lamerlo con unas ganas que me arrechaban más y más, del otro lado del teléfono sus gemidos me ponían más caliente tan arrecha que pedía verga a gritos… En ese momento me dijo quiero meterla entre tus tetas, y wow fue una rusa muy excitante al momento que pasaba el pepino entre mis tetas lo esperaba en mi boca y lo chupaba, mi coño palpitaba más rápido y me calentaba mucho, así que lo introduce suavemente en mi coño y wow… wow un gran gemido se me escapó al sentirlo dentro de mi…
Parte III
Al sentirlo dentro imaginaba su verga dentro de mi empecé a meter y sacarlo así como me gusta fuerte y rápido, estaba tan arrecha que mis gemidos seguramente fueron escuchados por mis vecinos, pero no me importó en ese momento solo quería sentir ese placer que me enloquecía… esa es mi verga siéntela, te estoy cogiendo rico me decía, cada palabra me hacía arrecharme más, con una mano metía el pepino en mi coño y la otra en mi boca chupando desesperadamente mi dedo… ufff mi cuerpo se retorcía como serpiente y se movía cada vez más rápido, más arrecha que nunca, te gusta mi verga? Preguntaba, sii mas fuerte más fuerte quiero más respondía yo… mi coño muy mojado que empezaba a correr los líquidos por mis muslos… ufff sentía que me venía y le dije me vengo y dijo también yo… nos vamos a venir juntos… esas palabras me arrecharon más solo imaginar su lechita ufff me pone a mil… seguí penetrando mi coño con ese pepino más fuerte como mi cuerpo me pedía… ummm ufff un gran gemido, me vine… el pepino todo mojado todo baboso ufff lo lleve a mi boca y lo lamí hasta dejarlo limpio, él aun no terminaba y seguía caliente así que le pedí me la acercara para lamerla y desde mi pantalla pasaba mi lengua como si de verdad estuviera lamiendo, eso lo prendió mucho y allí seguimos otra vez… acaricie un poco mi mojado coño e introduje dos dedos… ummm que rico se sienten los dedos dentro de mi coñito deseoso de verga, metí nuevamente el pepino y viendo como él se pajeaba para mi volví a emocionarme tanto que otro orgasmo me estremeció mi cuerpo… ufff la tengo en la puntica me vengo me dijo el muy arrecho… vente para mi quiero ver tu lechita respondí… acelere un poco el ritmo un gran gemido el al mismo tiempo dejó escapar un gemido que me hizo hacer un squir… ufff se vino cuando me vio hacerlo, su lechita blanca tal vez muy calientita… la recogí con mi lengua desde la distancia y quedé totalmente satisfecha… desde ese momento “pepinin” se convirtió en nuestro juguete de placer…
Deseo 21.