Era jueves en la tarde y Ericka había regresado de haber hecho compras. Ella, una chica de 20 años con poca experiencia en la vida, en sentido general, nunca había aprovechado los piropos y las miradas de los chicos lindos para su beneficio de querer salir con alguno de ellos. Antes de entrar a la casa ya se habían metido bastante con ella ya que es una chica muy hermosa con unos rasgos como los de un ángel, trigueña, de cabello largo, ojos de color verde, delgada, pero con un cuerpo bien armado.
Al entrar a la casa no se esperaba que iba a recibir la visita de su tía Sofía y su prima Laura, ellas habían ido a visitar a Ericka y a su madre, ya que hace tiempo que no se habían visto por circunstancias laborales y demás.
-Hola ¿cómo están?- dijo muy contenta Ericka para luego darle un beso a cada una.
– Bien mi vida estamos bien, eso como has crecido y te has puesto muy hermosa – dijo su tía con cariño, pero su hija miraba a su prima con otros ojos, y Ericka se dio cuenta.
– Gracias tía- diciendo esto la abrazó y le entregó las bolsas de compras a su madre y luego subió a su cuarto.
Su madre le había dicho a su prima Laura que si quería podía subir a la habitación de Ericka para que conversaran un poco antes de bajar a comer lo que ella iba a prepararles. Laura subió y tocó la puerta y sin esperar a que le respondieran: ¡Pasa!, entró. Se quedó estática y sin decir ninguna palabra, con la mirada fija en el cuerpo desnudo de su prima. La muy descarada había subido rápido a su cuarto y se había desvestido para llamar la atención de Laura y que ella llegara a su cuarto.
– Vaya, vaya así que mi prima es toda una hembra en ruina que no tiene a nadie que la posea- dijo Laura mirando el chochito de Ericka y saboreándose los labios. Entró y cerró la puerta.
– Bueno podría decir que si, pero también podría decir que me estabas observando mucho allá abajo y con una mirada bastante penetrante, ¿no pensaste que me iba a dar cuenta?
– ¿Y te gustó eso? esto?- le preguntó Laura acercándose a sus piernas abiertas.
– Pues si, me sentí atraída y sabía que tú querías verme así, entonces subí para que me callaras atrás.
– Mmm ya, muy astuta la niña. ¿Y jamás te han probado el chocho?
– Una vez que perdí la virginidad con un chico de 25 cuando yo tenía 18 años, y ya más nunca tuve un revolcón, solo me consolaban mis dedos. – dijo Ericka tocándose con lujuria mientras miraba fijamente a los ojos a su prima.
– Ya veo, bueno yo te puedo dar ese placer que tanto te gusta sentir con los dedos, pero te lo daré con la lengua, te voy a mamar el toto hasta que se te salga la leche y luego tu me lo harás a mi ¿quieres?
– Si quiero, pero aún no me he lavado, me levanté en la mañana y salí a hacer compras y regresé ahora.
– No importa, el sabor de un toro así es más rico, no te preocupes.
Laura se quitó también la ropa y comenzó a besarle las tetas a su prima hasta llegar a su vagina ya muy húmeda. La olió y le encantó su olor.
– Tienes un aroma riquísimo, a perra deseosa de que le mamen el chocho.- dicho esto Laura comenzó a mamarle el toto a Ericka, le introducía la lengua y la sacaba, para provocar placer en ella.
– Si si dale mámamelo así, sácame todo la leche que tengo ahí desde hace mucho, dale cómete mi toto rico todo enlechado.- Ericka estaba tan excitada al igual que Laura, que no sintieron cuando la puerta se abrió.
– Pero que rayos hacen- dijo la madre de Laura.
– Mamá es que Ericka estaba muy caliente y pues…- no pudo terminar de hablar porque Sofía cerró la puerta y se desnudó completamente- Ericka tú madre está abajo preparando la comida y le dije que iba a subir a verlas a ustedes, así que ahora me dejarás comerte también el chocho sino quieres que le diga lo que estaban haciendo aquí.- Ericka se ruborizó, pero prefirió eso antes que su madre se enterara de todo. La madre de Laura procedió a mamarle el chocho a la chica y luego se quiso hacer un facesitting con ella (o sea ponerle el chocho en la cara a Ericka para que esta se lo mamara) mientras su hija le chupaba el chocho a Ericka, en fin un trío.
– Dale, así así, cómeme el chocho Ericka y tómate mi leche. Dale hija haz venir a tu prima, abre bien las piernas Ericka para que Laura te meta la lengua y te vengas como toda una perra.- Ericka se comenzó a venir con la rica mamada que le dio su prima y luego se vino en su cara y su boca su tía haciendo que ella se tomara toda la leche que salía de su chocho ya que Sofía le pegó la boca directamente a este para que lo mamara todo y no dejara leche en él. Luego de esto Laura se acostó y le hicieron lo mismo a ella, pero esta vez era Ericka quien le mamaba el toto y su madre se colocó encima de ella para volverse a venir como una perra, se abría bien el toto con sus dedos para que su hija se lo mamara rico y le metiera la lengua.
FIN