Mi nombre es Alejandra, tengo 30 años de edad y soy casada, en este relato me gustaría contarles cómo fue que mi peor enemiga se cogió a mi esposo y a mi papá frente a mis ojos, y no una sola vez, si no varias veces, tal vez lo más extraño de esto es que yo se lo permitía, obviamente al principio sí que me molestaba bastante, pero no podía impedir que lo hiciera por razones que les voy a contar más adelante. No sé ni cómo pasó, pero en algún momento me empezó a gustar que lo hiciera, y me volví prácticamente sumisa y dejaba que ella se los cogiera cuando quisiera. Más que nada quiero contarles esto para desahogarme, porque obviamente como ya se imaginaran, esto no puedo contárselo a nadie relativamente cercano a mí, así que por lo tanto, decidí contar esto por aquí. Sin más que decir, les cuento:
Primero que nada, la chica de la cual les voy hablar durante todo el relato, que es la que se cogió a mi marido y a mi papa, se llama "Valeria". Mi historia con Valeria es bastante larga, la conozco desde que íbamos en la secundaria, ella era de las chicas que me molestaban, de hecho, ella era la que más lo hacía, (a pesar de que ella era tres años menor que yo), de hecho a todos mis compañeros les ganaba con tres años de diferencia porque me metí a la escuela tres años más tarde de lo normal.
Normalmente me molestaban porque soy indígena, (para los que no sean de México, los indígenas son una etnia que habita aquí en México). Bueno como les decía, ella me molestaba bastante por eso, ya que yo era la única niña indígena de mi salón de clases, ya que estudiaba en una escuela normal y no en una para niños indígenas, así que por lo tanto yo era la única, ninguno de mis otros compañeros era indígena, así que Valeria seguidamente me molestaba, la verdad yo no le tomaba tanta importancia, y simplemente la ignoraba.
Después de que salimos de la secundaria, jamás la volví a ver, hasta que me metí a trabajar hace como dos años a una oficina como recepcionista, y adivinen quien era mi jefa, así es, era Valeria. La verdad si me sorprendí mucho al verla, porque se había desarrollado bastante, (Valeria es de piel blanca y pelo negro, desde que éramos niñas siempre ha sido bonita de la cara, pero ahora de grande también se hizo bonita del cuerpo, tiene unas nalgas enormes y tetas grandes lo cual me impactó mucho cuando la vi, en general todo su cuerpo lo tiene bonito) jamás pensé que se pondría así, ni mucho menos que algún día ella sería mi jefa, pero así fue, y aparte se hizo de mucho dinero, seguramente por andarse acostando con sus jefes y hombres de dinero. En cuanto la vi, sentí una combinación muy rara entre enojo, sorpresa y miedo, ella también me reconoció, y en cuanto me vio me dijo:
-Hola Alejandra como haz estado!!
Yo notaba la hipocresía de sus palabras a kilómetros, realmente ella no estaba alegrada de verme, o tal vez sí, porque sabía que ahora yo sería su empleada y tendría que hacer lo que ella me dijera, pero bueno, ella me saludo así seguramente porque había más empleados al lado mío y no quería dar una mala impresión. Yo le salude tímidamente, porque por alguna razón le tenía todavía algo de miedo a Valeria y no sabía porque. Desde que vi que Valeria iba a ser mi jefa, inmediatamente me dieron ganas de dejar ese trabajo y buscar en otro lugar, pero no me podía dar ese lujo, ya que llevaba casi cuatro meses buscando trabajo y en ningún lugar me ofrecían, así que tuve que aguantarme.
La única razón por la que quería el trabajo era porque pagaban bien, y yo quería comprarle una casa a mis padres (que también son indígenas, ambos tienen 65 años y ya no trabajan), así que mi plan era: trabajar ahí solamente hasta que consiguiera el dinero para comprarles la casa. Valeria como yo ya lo suponía, era una jefa terrible, y se pasaba todos los días regañándome sin razón.
En una ocasión me escucho decirle a otra compañera de trabajo sobre la casa que tenía planeada comprar, y entonces Valeria me dijo que ella podía rentarme una casa suya muy bonita, en lo que yo juntaba el dinero para comprar la mía. Al principio le dije que no estaba interesada, porque no me quería involucrar en nada con ella, pero luego me llevo a ver la casa y pues si estaba muy bonita, así que acepte su propuesta. Entonces después de eso, me lleve a mis papas a vivir ahí. Yo seguía viviendo con mi esposo en nuestra casa, mientras le pagaba la renta a Valeria para que mis papas se pudieran quedar a vivir ahí.
Así que pasaron dos años, y yo seguía pagándole la renta a Valeria, mientras ella me trataba pésimo en el trabajo a mí y a los demás empleados. Pero hace tres meses decidí agarrar valor y renunciar, porque ya no la aguantaba más como jefa. Así que fui a su oficina, y empezamos a discutir, y le empecé a gritar todo lo que no me gustaba de ella, incluso la empecé a insultar, estaba tan enojada que le avente el café que llevaba en la mano y salí de la oficina. Ese día llegue a mi casa en la noche y le platique a mi esposo todo lo que sucedió, la verdad me sentía muy bien por haber hecho eso, así que después de platicarle, me fui a dormir.
Al día siguiente me llego una llamada de mi mamá diciéndome que la dueña (o sea Valeria) los quería correr de la casa, de pronto se me puso la sangre fría, me había olvidado por completo de tanto enojo que tuve el día anterior, del acuerdo que tenía con Valeria, así que inmediatamente fui a la casa de mis padres. Cuando llegue ahí, mi papa no estaba, pero mi mama estaba platicando con Valeria diciéndole que no los corriera de la casa, así que llegue yo también y le dije preocupada:
(Yo): Valeria perdón por lo que te hice ayer, pero por favor no los corras, No tienen otro lugar donde quedarse, y yo no tengo trabajo ahorita. De verdad te pido disculpas.
(Valeria): Es en serio Alejandra?? Después de lanzarme café en la cara vienes a pedirme favores?? Jajaja. Pues lo siento, pero no te voy a ayudar, hubieras pensado en eso antes de lanzarme el café.
(Yo): Por favor no los corras, si quieres pedirme algo, lo que sea, tu dime, si es dinero te prometo que en cuanto consiga trabajo te lo pagare.
(Valeria): Mmm está bien, los dejare vivir aquí más tiempo, pero con una condición.
(Yo): Cual??
(Valeria dijo en tono retador): Que me tendrás que dejar cogerme a tu papá.
Cuando Valeria dijo eso, yo y mi mama volteamos a vernos sorprendidas, porque no podíamos creer la locura que estaba diciendo Valeria. Obviamente yo le contesté molesta:
(Yo): ¿¿Quee?? pero que estás diciendo, que acaso estás loca o algo??!! Que te pasa?? Bromeas??
(Valeria): NO, no estoy bromeando, se los estoy diciendo enserio, si no quieres que corra a tus papas a la calle, eso es lo que tienes que hacer.
(Yo) Pero que cosas dices!! Estas pendeja si piensas que de verdad te voy a dejar hacer eso!!
(Valeria): Bueno, pues tú sabrás, a fin y al cabo la que va a sufrir las consecuencias no soy yo.
(Yo): Pero es que como es posible que me estés pidiendo esas barbaridades??!! Pídeme otra cosa, ni loca voy hacer eso que dices!!
(Valeria): No, no hay otra opción, es eso, o se van a la calle.
De verdad no me podía creer lo que Valeria me estaba diciendo, empecé a pensar en alguna otra manera de solucionar esto, porque ni siquiera veía eso como una opción. No podía traer a mis papas a mi casa porque era muy pequeña y no había espacio para ellos, además de que en ese momento no tenía trabajo y no podría mantenerlos a todos. En lo que yo pensaba en una solución, mi mama dijo:
(Mama): Está bien
Voltee a verla aún más sorprendida y le dije:
(Yo): Queee?? Pero que estás diciendo mama?
(Mama): Esta bien hija, deja que lo haga, no pasa nada, me parece justo.
(Valeria): Ya ves, a tu mama le parece bien, no sé porque haces tanto alboroto.
(Yo): Pero que cosas dices mama!!? Que en serio vas a dejar que esta puta se coja a tu esposo?? Es tu esposo y es mi papa!! Como dices eso!!?
(Mama): Ya se Alejandra, ya sé, pero es que no tenemos más opciones, prefiero mil veces que Valeria se coja a tu papa, a tener que estar mendigando en la calle.
Yo estaba enojada, pero mi mama tenía razón, no teníamos más opciones. Le dije a Valeria enojada:
(Yo): Está bien maldita, te dejaré hacerlo, pero te juro que esto no se va quedar así.
(Valeria): Si, si pues, no me importa lo que digas.
(Yo): Maldita puta!!
(Valeria): A por cierto les voy a pedir otra cosa.
(Yo): Y ahora con que me vas a salir?
(Valeria): Quiero que tú y tu mamá estén presentes cuando me coja a tu papá, y estén todo el rato viendo.
(Yo): A no eso sí que no!! No voy hacer eso.
(Valeria): Pues entonces se van ir a la calle tus papas.
(Mama): Alejandra por favor, ya no pelees con ella, está bien hay que hacerlo y ya.
No tienen idea de lo impotente y molesta que me sentía al saber que esta puta se iba a coger a mi papa frente a mi y yo no podía hacer nada para evitarlo.
(Yo): Ya pues, está bien, lo haremos. (dije molesta)
(Valeria): Ok, mañana vendré a las once de la mañana puntual para cogérmelo (Nos dijo a mi y a mi mama en un tono burlón) y quiero que las dos estén ahí, entendido.
(Mama): Si está bien.
Yo no le conteste y solo me le quede mirando. Tal vez les parezca raro pero en ese momento a pesar de estar algo molesta, me excitaba bastante pensar en que Valeria con su hermoso cuerpo se iba coger a mi papá, como seguramente mi Mamá jamás pudo. Yo sé que suena raro, pero eso es lo que sentí, hasta yo me extrañe de sentir eso, podría jurar que incluso estaba hasta algo emocionada. Mi mama estaba muy tranquila, ni siquiera estaba molesta, parecía no importarle que una mujer mucho más joven que ella, y de cuerpo tentador se cogiera a su esposo. Mi mama decidió no decirle nada a mi papá de lo sucedido, y prefirió que fuera más bien una sorpresa o algo así. Yo a mi esposo obviamente tampoco le comente nada porque me daba vergüenza decirle lo que iba hacer, así que sólo le dije que el día de mañana iba estar en casa de mis padres, sin entrar en más detalles.
Al día siguiente en la mañana yo y mi mama estábamos esperando a Valeria en la sala, mi papa también estaba ahí viendo televisión en el sofá sin saber lo que le esperaba. Estábamos esperando, cuando se oyó que timbraron, entonces mi Mama fue a abrir la puerta, y ambas quedamos impactadas al ver a Valeria. Venia vestida con una lencería negra con rojo que le resaltaba muy bien sus grandes tetas y sus enormes nalgas blancas, el pelo lo tenía muy bien arreglado y un poco más negro de lo normal, también tenía puestos unos tacones altos transparentes que hacían que sus pies y sus piernas se vieran todavía mejor, se veía como toda una puta. Al verla así me excitó aún más la idea de que se cogiera a mi papa. Me sentía rara, porque a pesar de que si me molestaba algo que se cogiera a mi papa también me excitaba. Mi mama al ver a Valeria, se quedó con la boca abierta, y le dijo casi tartamudeando:
(Mama): Ad… Ad… Adelante Valeria pasa.
(Valeria): Donde está tu esposo, que me lo voy a coger muy rico por ti (le dijo Valeria a mi mama)
Me enojaba, pero a la vez me excitaba que Valeria le hablará así a mi madre.
(Mama): Esta en el sofá viendo la televisión.
Valeria saco una cámara de su bolsa y le dijo a mi mama:
(Valeria): Ok, quiero que me grabes mientras me cojo a tu esposo, ok?
(Mama): Si está bien.
Yo solo estaba ahí callada sin decir nada. Entonces Valeria, yo y mi mama fuimos hacia la sala donde estaba mi papa. Cuando Valeria vio a mi papa le dijo en tono coqueto "Hola mi amor”. Cuando mi papa vio a Valeria se quedó babeando, y a la vez sorprendido porque no sabía lo que estaba pasando. Pero no dijo nada y simplemente se quedó ahí contemplando el cuerpo de Valeria, ignorando por completo a mi mamá y a mí. Valeria nos acomodó dos sillas y nos ordenó "Siéntense", yo y mama hicimos casó y nos sentamos.
(Valeria): Prende ya la cámara puta, que vas a grabar como le sacó la lechita a tu esposo como tú jamás pudiste. (Le dijo Valeria a mi mama)
(Mama): Si ya voy.
(Valeria): Y tu Alejandra no quiero que hagas ningún comentario, ni que te muevas de ahí, te vas a quedar ahí todo el tiempo hasta que termine de cogerme a tu papa, entendido?
(Yo): Si está bien.
Mi papa literalmente estaba babeando por el cuerpo de Valeria, sin quitarle ni un segundo la vista de sus nalgas, era tanta la excitación que tenía, que le empezó a decir piropos a Valeria aunque yo y mi mama estuviéramos ahí.
(Papa): Que rica te ves Valeria, que nalgas tan ricas tienes etc…
(Valeria en tono coqueto): Gracias mi amor, estoy mejor que tu puta esposa verdad?
(Papa): Si, sí, mucho mejor
Entonces Valeria le acerco las nalgas a mi papa, y mi papa comenzó a besarlas y a lamerle todas las nalgas a Valeria.
(Valeria): Espero que estés grabando esto puta, tu esposo lamiéndome rico mis nalgas (le dijo a mi mama)
(Mama): Si, sí, estoy grabando.
(Valeria): Mas te vale
Yo estaba en shock y no me podía creer lo que estaba viendo, mi papa lamiéndole las nalgas a la chica que me molestaba cuando era niña, y que de grande me humillaba en el trabajo, frente a mí y frente a mi madre. Después Valeria paro a mi papa del sofá, y mientras ella se agachaba y a la vez le quitaba el pantalón a mi papá le preguntó:
(Valeria): Alguna vez la zorra de tu esposa te dio una mamada amor?
(Papa): No jamás, le daba asco hacer ese tipo de cosas.
(Valeria): Pues estas de suerte porque yo te la voy a mamar como ella jamás pudo.
Valeria saco la verga de mi papa, y se la empezó a mamar como si no hubiera un mañana, se la metía a la boca y la saboreaba. El escenario era completamente pornográfico, y yo estaba bastante excitada de ver a Valeria mamársela a mi papá, mi madre jamás probo la verga de mi papa, y esta puta se la estaba comiendo por ella.
(Valeria): Que rica verga tienes amor, dame más por favor.
(Papa): Si putita cómetela toda entera.
(Valeria le dijo a mi mama burlándose): Que rica verga tiene tu esposo, lástima que nunca la probaste, y ahora estas ahí sentada grabando como yo me la como por ti, ups jajaja.
Valeria se metía toda la verga hasta la garganta mientras miraba a mi madre a los ojos y le soltaba pequeñas risas burlonas. Valeria se metía y se sacaba la verga de mi papa ensalivada frente a mí y a mi madre. Y mi madre simplemente la grababa. En un momento mi mama me susurro al oído que le gustaba ver a Valeria cogiéndose a mi papa, la verdad fue muy extraño que me dijera eso, no conocía ese lado de mi mama, me dijo que ella ya estaba muy vieja para complacer a mi papa, y que él siempre fue muy bueno con ella, y que ella sentía que mi papa necesitaba a una mujer como Valeria para complacerlo, porque eso es lo que se merecía. Yo simplemente me quede asombrada por lo que me dijo, pero no dije nada.
Después de como 10 minutos de estarle mamando la verga a mi papa, Valeria se paró y le dijo a mi mama:
(Valeria): Ahora zorrita, vas a grabar como me cabalgo a tu esposo y le muevo mis nalgas que tanto le gustan entre su verga.
Valeria sin pensarlo volvió a sentar a mi papá en el sillón y se sentó sobre su verga, quedando de espaldas hacia nosotros con sus enormes nalgas blancas, su lencería negra y sus tacones transparentes de puta. Valeria comenzó a saltar sobre la verga de mi papa.
(Valeria): Ahh Ahhh si, si, ahh si que rico, dame mas verga, ahh. Mira puta como me coge rico tu esposo, y tú ahí de pendeja y cornuda solamente grabándome. Mira como me disfruta. Verdad que si mi amor?
(Papa): Si puta, que rico te mueves que rica te ves con esos tacones, mueve las nalgas.
(Valeria): Espero que hayas aprendido la lección Alejandra.
Valeria y mi papa siguieron cogiendo durante casi 40 minutos, en diferentes posiciones, hasta que por fin acabaron.
(Papa)-Ya me voy a venir perrita.
(Valeria): Échamelos en la boca por favor, quiero que la inútil de tu esposa grabe como le saque toda la leche a su esposo. Oíste pendeja, acércate y graba de cerca como tu esposo me da su lechita en mi boca. Mi mama se acercó y grabó como Valeria se comía toda la corrida de mi papa y le llenaba toda la cara de leche. Mi papa en cuanto se corrió se tiro al sillón y se durmió. Yo estaba bastante excitada y pues según lo que me comento mi mama a ella también le había gustado. Valeria se levantó como toda una puta con la corrida de mi papa en la boca y dijo:
(Valeria): Me gustó mucho la verga de tu esposo, A partir de ahora seré la puta de tu marido, y me lo cogeré cuando quiera te guste o no ¿entendido zorra?
(Mama): Si claro no hay ningún problema, de hecho me gusto que te lo cogieras Valeria, yo a mi edad ya no puedo complacerlo.
(Valeria): Que bueno porque ahora así va hacer, tú vas a ser mi sirvienta, y si quieres vivir aquí tendrás que hacer los quehaceres de la casa. Yo vendré de vez en cuando a coger con tu esposo. Y tu Alejandra, note que te gustaba lo que estabas viendo, que te parece si ahora me cojo a tu esposo. También puedes trabajar para mí como sirvienta, no te preocupes te pagare.
Quería decirle que no, pero estaba tan excitada en ese momento que le dije que sí. Tenía ganas de experimentar más de lo que había visto.
Actualmente yo y mi mama trabajamos para Valeria como empleadas domésticas, y ella se coge a nuestros esposos, como les dije al principio, ahora lejos de molestarme me excita que lo haga. Si alguien de los que está leyendo este relato quiere ver fotos de Valeria, mándenme mensaje a mi correo