Parte 1: Mi ex novia Olga y nuestra fetiche por el sexo interracial.
Hace varios años conocí una mujer mexicana que se llama Olga. Nosotros somos mexicanos y vivimos en Tejas, Estados Unidos. Ella es mayor que yo por 10 años y entonces teníamos 23 y 33 años. Es gordita con piernas gruesas y nalgas duras que parecen durazno. Tiene pelo negro y usa lápiz labial de color oscuro.
Nos conocimos en un gym y salimos por unos meses ya cuando un día que estábamos texteando y ambos estando calientes me dijo que estaba viendo porno. Le dije que me enviara el video que estaba viendo y cuando lo recibí era una escena interracial con un hombre super dotado y dos mujeres blancas. Le dije que "wow" y pregunté si le gustaba por el trío o por el hombre negro y respondió con "el hombre". Era la primera vez que me había mostrado cualquier tipo de porno que veía y realmente me sorprendió.
Me contó que siempre tenía la fantasía de acostarse con un hombre negro americano, pero como no habla mucho inglés nunca podía conocer a uno. Me dio tanto morbo pensar en ella con otro hombre que ese mismo día pedí por internet un dildo auténtico hecho por un actor de porno negro. Mide 10 pulgadas por 2 pulgadas e incluye los testículos.
Recuerdo cuando llevé el dildo a su casa por primera vez se le abrieron los ojos cuando lo vio. Parecía sorprendida sobre todo y dijo que "no puede ser" y que "es más grande que cualquier pene que he visto por mucho". Manoseaba el dildo y me excitaba solo ver como no podía ni cerrar la mano cuando lo agarra.
Esa noche pusimos un video de una mujer latina casada que folla con el jefe de su marido. Le cogí con el dildo hasta que acabó chorreando, algo que no había hecho antes conmigo. Me sorprendió y le pregunté porque no había hecho eso antes y me respondió "no llegas tan profundo". Realmente ya lo sabía, como mi pene solo mide 5 pulgadas y en toda la vida he estado solo con 3 mujeres. Varias veces había intentado coger y estando desnudo fui negado por el tamaño.