Todos mis relatos son 100% reales a excepción de los nombres.
Cuando yo tenía 20 años laboraba en una tienda departamental donde era jefe de un área de servicios, tenía a mi cargo alrededor de 50 personas aproximadamente. En una ampliación de área contrate 10 personas más de las cuales había una chica llamada Ailyn que tenía 18 años y este era su primer trabajo. Al principio no le tomé mucha importancia ya que no era una chica que no llamaba mucho la atención.
Se las describiré cuando la conocí, era chaparrita de 1.55 m de estatura, morena de cabello largo adornado con una diadema, con ropa muy holgada, zapatos de piso y un poco seria. Lo único que en ese momento me llamo la atención era que no usaba maquillaje y tenía un rostro tierno cuando lo analizabas bien.
En un principio a ella le encargué cubrir las áreas de los empleados en la hora de los alimentos y también como administradora de un juego de llaves para diversa áreas y algunos muebles. En ese momento ambos teníamos pareja, ella con un chico de la tienda que formaba parte de los bodegueros y yo con una chica que era cajera con el paso del tiempo nos volvimos amigos de tanto tiempo que pasábamos juntos en el trabajo y casi al mismo tiempo terminamos con nuestras parejas y ambas fue porque descubrimos que ambas eran casadas.
Un día saliendo del trabajo me la encontré en una plaza cercana y al verla me di cuenta que cambiaba mucho fuera del trabajo ya que el uniforme ocultaba muchas cosas, en esencia un hermoso busto más grande de lo normal sin ser exagerado y unas nalgas bien firmes y de buen tamaño.
Ese día la invite a cenar y mientras esperábamos nuestra comida platicamos de nuestras mentirosas exparejas y de cómo descubrimos sus engaños. Ahí yo le conté que ya lo sospechaba de la mía porque nunca me dejo llevarla a casa y ella me contó que le revisó su celular a su ex y que ahí lo cachó, pero que sin embargo ya lo quería tronar porque el que le gustaba era yo.
Al escucharla no supe que decirle ya que nunca me había imaginado que yo llegara a gustarle y hasta ese momento no la había visto de otra manera. Me decía que le gustaba como era como persona y jefe, siempre apoyando a todos y muy caballeroso y amable con los clientes. En ese momento me di cuenta que la verdad estaba con una chava muy linda y que incluso sabia más de ella que mi anterior novia; ese día empezamos a salir oficialmente como novios.
He de confesar que empezamos a tener relaciones muy rápido y que si la pasábamos genial, pero sentía que algo nos faltaba ya que siempre era la rutina del trabajo a casa y viceversa además de que descansábamos en días diferentes.
Con el paso del tiempo me daba cuenta que siempre contaba con poco dinero para ella misma aunque nunca me pedía nada, incluso llegué a creer que también me engañaba, además de que saliendo del trabajo siempre usaba la misma ropa. Hasta que logré hacer que nuestros descansos fueran el mismo día me pude dar cuenta de la verdad y es que ella mantenía a toda su familia (padres y 3 hermanos).
Cuando ella me presentó a su familia me pude dar cuenta porque siempre tenía poco y es que a pesar de que su papa tenia trabajo como mesero no ganaba lo suficiente para mantenerlos, por lo que gran parte de su salario era para sus papas.
Llegó el día de su cumpleaños en mayo y aprovechando las utilidades y que yo ganaba bien (3 veces más que ella) quise darle lo que ella quisiera, y aunque en un principio se negó acepto aunque no sabía que pedirme así que opte por comprarle ropa. Escogió ropa de los mismos almacenes que ella ya había visto debido a que en parte ella a veces la acomodaba, aparte de que era de buena calidad y precio, eligió un par de blusas bastante coquetas, un pantalón a la cintura y un vestido algo largo pero muy elegante.
Para rematar la llevé a comprar unos zapatos de los cuales eligió unas sandalias de tacón de madera. Como sorpresa la lleve a un salón de belleza donde le cortaron y tiñeron el cabello y maquillaron. Ese mismo día estreno parte de su ropa y cuando la vi salir de su cuarto quede fascinado. Se puso todo lo que habíamos comprado, el pantalón a la cadera, la blusa que hasta ese momento me di cuenta que dejaba al descubierto su espalda además de mostrar su hermoso busto y rematado con las sandalias la hacían lucir genial. En ese mismo momento no me podía creer que la niña tan X que habían contratado para mi área fuera esa hermosura. Ese día casi me le voy encima, aunque desgraciadamente estaba en sus días y no pudimos hacer nada.
No les mentiré que a la semana siguiente para toda la tienda ya no era la misma persona y también en el trabajo empezaron a echarle los perros; ese corte aun con el uniforme no pasaba desapercibida su hermosura. Incluso ese cambio de imagen le ayudó a conseguir un nuevo trabajo ya que para mejorar la situación la ayudé a buscar algo mejor y su nuevo look ayudó mucho.
Ella me contó que desde el primer día en su nuevo trabajo sus compañeros se le acercaban con pretextos para hacerle la plática. Eso nunca me molestó ya que no me considero celoso, aunque ella me decía que no era normal que no me encelara. Paso el tiempo y tuve que salir un mes para capacitar personal de otra tienda, ella me fue a despedir al aeropuerto y ahí conoció a la persona que quedó como reemplazo que era una chava bastante linda a la que Ailyn le tomó coraje desde que la conoció, pero a mí nunca me llamó la atención ya que en verdad estaba enamorado de ella y siempre he sido una persona fiel. A pesar de que le llamaba diario y me celaba de mi compañera, siempre le fui fiel y cuando regresé del viaje no me fue a recibir. Cabe recordar que durante mi viaje pasó mi cumpleaños y lo celebré solo.
Pensé que Ailyn ya no quería andar conmigo, no me contestaba el teléfono y no iba por mí al trabajo. Pasó cerca de dos días sin saber de ella hasta que un día fue por mí a la salida del trabajo y me pidió disculpas por no haberme contestado, pero dijo que tenía una buena excusa para no hacerlo.
Tomamos un taxi y le dijo al taxista que fuéramos a X hotel, de lo cual me sorprendió ya que hasta el chofer se sacó de onda. Al entrar al hotel no pasamos a recepción ya que ella ya tenía llave. Entramos y había una mochila de la cual ella se llevó al baño y me dijo que me pusiera cómodo para mi regalo de cumpleaños. Esperé alrededor de 10 minutos cuando me dijo que ya estaba lista.
Se las describiré tal y como fue. Llevaba un uniforme de colegiala el cual era un blazer color rojo y una minifalda debajo de los glúteos tableada del mismo color, una blusa ombliguera blanca, llevaba medias de red color negro debajo de los muslos y unos zapatos de tacón, también se había maquillado y había puesto unos lentes de contacto color miel. Woooao realmente parecía una actriz a realizar una película porno.
Se acercó a mí y sin dudarlo nos comenzamos a besar, había pasado más de un mes sin haberla visto, incluso no la había besado por qué no lo hizo en todo el trayecto del trabajo al hotel. Yo en verdad estaba muy sorprendido ya que nunca pensé que ella fuera capaz de algo así. Lo habíamos platicado alguna vez pero me dijo que le daba mucha pena.
Mientras nos besábamos me dijo que me había extrañado mucho y no quería que volviéramos a pelear, cuando estaba a punto de quitarle la ropa me dijo que la esperara y sacó una cámara de video de esas handicam y le puso una memoria que había comprado. No lo creía… quería que nos grabáramos, así que la puse en un buen lugar y continuamos con lo que estábamos.
La empecé a desnudar empezando por el saco y la blusa y al llegar a su pecho me di cuenta que llevaba un mini bra de color rojo que solo le cubría los pezones, y con el tamaño de pecho que tenía mi novia se veía genial, después empecé a masajear su pecho y empecé a chupar sus pezones y ella comenzó a gemir como nunca antes lo había hecho, empezó a pedirme más y yo empecé a acariciar sus piernas y subir poco a poco hasta sus nalgas y ahí me lleve dos sorpresas más.
No se los había comentado, pero ella nunca había usado tanga y tampoco se había rasurado su coñito y verlo por primera vez así me puso de a mil en un segundo. No lo dudé y metí mi cabeza bajo su falda y comencé a hacerle sexo oral algo que ella pocas veces me había dejado hacer, pero sentía que esta vez era diferente por ser mi cumpleaños. Le pregunté si le gustaba y me dijo que mucho que siguiera, que le metiera mi lengua en su vagina y se la llenara de saliva, le pregunte si me dejaría hacer lo que quisiera y ella me dijo que ese día no habría un “no” como respuesta y que hiciera con ella lo que quisiera, así que me quite la corbata y le amarre sus manos y la puse en posición de perrito y seguí lamiendo su vagina en esa posición.
Verla así y con esa ropa me tenía con la verga bien parada, por lo que le puse la cara frente a la cámara y me baje el pantalón e hice que por primera vez me chupara la verga, ella no puso objeción y aunque lo hacía un poquito torpe por su inexperiencia la fui guiando hasta que logro mejorar la técnica y casi hacer que me viniera.
La dejé que descansara un poco además de que aún no me quería venir, así que la desamarre y termine de quitarme la ropa, seguimos besándonos hasta que le quite más prendas dejándola solo con las medias y los tacones. Acomodé una silla y la senté frente a mi e hice que se ensartara mi verga en ella. Empezamos a coger súper rico, ella subía y bajaba como nunca, y el ver subir y bajar sus pechos en mi cara me excitaba cada vez más, empezaba a gemir y gritar mi nombre, me decía que le encantaba mi verga y que la quería hasta adentro.
Empezábamos a sudar y nuestra piel comenzaba a resbalar por la posición por lo que la acosté en la cama y me subí arriba de ella con las piernas en mis hombros y comenzamos de nuevo y cuando le decía que me iba a venir se detenía y decía que quería chuparla más. No es que tenga una súper verga pero creo que me defiendo. Después ella se subió arriba de mí y comenzó a ensartarse ella sola de espalda y ver sus nalgas rebotar en mi pelvis hizo que tomara la cámara que tenía casi enfrente y la grabara más de cerca.
Llegó el momento en que ella dejo de sentarse y parecía que se de doblaban las piernas y sudaba como nunca lo había hecho. Yo la puse de perrito y sin decirle nada ella se la metí y seguí con mi cogida a lo que ella me dio que ya no podía que se había venido 2 veces, a lo que yo le dije que ese día no tendría un “no” como respuesta, a lo que ella dijo que tenía razón y se agachó más y me dejo seguir con la faena.
A los pocos minutos de eso ya no aguantaba más y la saque de su vagina y la giré con la intención de bañarla a lo que ella se metió la verga a la boca y comenzó a mamarla de manera magistral hasta que en el momento de venirme la recibió con la lengua recibiendo más de un mes de semen acumulado que escurrió por sus labios. Quedamos súper agotados y descansamos cerca de una hora platicando de que hicimos mientras estaba de viaje.
Ese día me dijo que reservó la habitación para toda la noche y que nos quedaríamos a descansar. Esa noche lo hicimos dos veces más y un mañanero además de que me dejó tomarle algunas fotos con su traje de colegiala y con su diminuta lencería que había comprado.
Ese fue el inicio de muchas experiencias que tuvimos.