Continuo con la historia anterior donde mi madre me contaría sus comienzos, luego de que mi Amo le mandara el video donde me lo estaban haciendo y cumpliendo la promesa que le hicieron de abrirme el culo.
Luego de contarle como me habían contactado y que decidí ir me dijo:
Madre: Bueno, tienes derecho a saber más sobre mi y por lo visto (mirando el video) ya no eres una niña -cruzamos nuestras piernas entre nosotras sentándonos abiertas una a la otra y dijo:-Desde que tenía más o menos tu edad, me prostituía, comencé por dinero, pero la verdad es que desde que tengo memoria siempre he sido muy caliente, siempre he querido más, sin ninguna vergüenza, me encanta el sexo así que no dudé en hacerlo, todo era muy normal, pero un día atendí a un cliente, uno que me ofreció mucho dinero por mis servicios, así que fui sin preguntar el por que, me recogió su chófer y me llevó hasta su casa en las afueras, una casa enorme, al llegar me llevaron hasta la sala, donde me encontré con cuatro hombres, al verlos mi corazón dio vuelta y entendí en que me había metido.
-esta es la puta, esta rica
(Nunca me habían hablado así, pero no podía reaccionar)
-bien puta, vamos a usarte duro como la perra que eres para enseñarte tu lugar.
(Una parte de mi quería gritar y correr, la otra ya comenzaba a excitarse)
-desnúdate!
Comencé a quitarme la ropa, mientras ellos comenzaban a masturbarse, luego uno se levantó con una navaja, mis ojos se abrieron de golpe, el me sostuvo y rompió todo mi vestido de un tirón hasta abajo, luego me lo arrancó con fuerza, me tomó del cabello y me arrastró hasta el sofá, de rodillas, sacó su verga dura del pantalón ya lubricada y la metió de golpe hasta mi garganta y la mantuvo unos momentos hasta que me dejo respirar y lo repitió con fuerza, y decía "eso perra, chúpalo" mientras mi boca estaba ocupada, otro de ellos se puso detrás de mi, y me dio con la correa en las nalgas, muy duro, tanto que me sacó la verga de la boca y me hizo gritar, me abrió las piernas y comenzó a masturbarme con fuerza y rudeza, hasta el punto de hacerme mojar, y dijo "jajaja, ya estas lista verdad perra, ya quieres tenerla adentro" me puso en 4 y yo estaba lista para ser penetrada, cuando sentí otra vez la fuerza de la correa, una y otra vez, podía sentir el ardor en mis nalgas, luego paso su correa por mi cuello y la apretó dejándole el control, cuando entonces si sentí la cabeza de su verga en mi raja y de pronto una fuerte penetración, dándome duro una y otra vez.
El tercero se acercó al que estaba sentado, sacó su verga y ya tenía dos para mamar, las dos muy gruesas y el cuarto se acercó a mi oído y se dedicó a insultarme "eso perra, te gusta cómo te usan verdad puta”.
“Respóndeme!!!" me haló del cabello sacándome la verga de su amigo de la boca y le digo “si señor me gusta que me usen, háganme lo que quieran”.
La excitación, el miedo, el dolor, la humillación, todo combinado era una locura, jamás había sentido eso, al punto que todo combinado me hizo correrme hasta estremecerme, entonces sentí un bofetón en la cara "no te hemos dado permiso que corras puta", me pusieron la cara contra el suelo y sentí otras fuertes nalgadas y luego, llevaron mi cara contra el suelo, uno puso su pie sobre mi cara y otro siguió penetrándome hasta correrse, sentí toda su leche caliente quemándome, la sacó y siguió otro y así cada uno, los últimos dos eyacularon sobre mi todo lo que pudieron, duramos varias horas así, mi cuerpo no podía más y ellos tampoco, regresé a casa bañada en semen y dinero, no sin antes, uno de ellos invitarme a su casa para proponerme algo, quien sería mi primer Amo.
Yo estaba impactada por los detalles que me contó, nunca habíamos hablado de esta manera tan explícita y menos sobre nosotras, y no me di cuenta que ya estaba excitándome, crecí soñando y tocándome pensando en mi madre, así que inconscientemente ya estaba tocándome un poco por encima del pantie, ella lo notó y me dijo "me alegra que te gustara mi historia".
Me sorprendió y retiré mi mano de golpe, pero la humedad ya comenzaba a notarse, así que ella metió su mano y comenzó a masturbarme, sentirla masturbarme y sus dedos dentro de mi fue el mayor placer que jamás había sentido, luego me besó tan largo y excitante que no pudimos contenernos y ahí mismo en el sofá tuvimos nuestra primera vez, el sexo más delicioso que jamás he tenido. Desperté como tanto tiempo había soñado, desnuda, cansada, sudada sobre ella.
Muchas gracias a todos por escribirme, lamento a quienes no he podido contestar o me he demorado.
En el próximo contaré mi presentación y exhibición con los Amos, espero sus comentarios y mensajes, bye.