Todo gran viaje tiene su gran final y, aunque nos divertimos y nos excitamos mucho con Dayana y compañía, ha llegado la hora de darle un cierre a su historia. Y que mejor forma existe de finalizar una historia que habla acerca de una madre cachonda que rindiéndole un tributo en su día especial: ¡el día de la madre!
Nuestro último relato empieza en un café, 24 horas antes del ya mencionado día festivo. En dicho café, se encontraban reunidos Ale, Daniel, y Valen, quienes estaban debatiendo el cómo iban llevar a cabo la celebración del Día de la Madre, ya que la idea era que ambas familias lo hicieran juntas.
“bien, entonces quedamos así” dice Valen “después del desayuno, llevaremos a nuestras madres a la cabaña que rentamos y, una vez allí, les daremos el regalo”
“¿y cómo hicieron para rentar una cabaña?” pregunto Daniel
“papá nos dio el dinero” dice Ale “¿y ustedes creen que ellas realmente aprecien el regalo que le vamos a dar?”
“¡les va a encantar de sobremanera!” exclamo Valen “créeme, hermano, les va a fascinar”
Mientras tanto, en casa de Dayana, Nacho se encontraba empacando sus cosas para irse a casa de Gladis, pues él quería pasar el día de la madre al lado de su progenitora.
“¡mándale un gran saludo a mi suegra de mi parte cuando la veas!” exclamo Dayana “y dile que espero que pase un excelente día”
“¡gracias, querida!” exclamo Nacho, contento “¿sabes?… pese a que nuestra relación sea medio extraña, quiero que sepas que realmente te amo, amo la familia que formamos juntos, y espero que pases un excelente día junto a nuestros hijos, porque te lo mereces”
“¡ay, mi amor!” exclamo la milf, emocionada, y besa a su esposo “¡yo también te amo y, aunque pudiera regresar el tiempo atrás, igual me volvería a casar contigo, porque eres el único que me ama y que me acepta tal como soy!”
“¡lo mismo digo!” dice Nacho, y luego agarra sus valijas y se va de la casa
A la mañana siguiente, en casa de Susan, la milf rubia se acababa de despertar, y lo primero que vio al salir de su cuarto fue un espectacular desayuno servido sobre la mesa y a Daniel vistiendo únicamente con un delantal que decía “¡Amo a mi madre!”.
“¡feliz día, mamá!” exclamo Daniel, con gran alegría
“¡hijo mío, que gran regalo!” exclamo Susan, quien le dio un gran abrazo a su hijo y luego lo beso apasionadamente
“En realidad… este no es tu regalo de cumpleaños. El verdadero regalo te lo daré esta tarde”
“¿y qué es?” pregunto ella, con curiosidad
“lo sabrás cuando llegue el momento pero, por ahora, solo siéntate y como”
“¡pero no hay sillas!”
“eso es porque prepare tu asiento favorito” dice Daniel, mientras se arrodilla detrás de su madre
“¡eres el mejor hijo que una madre pueda pedir!” exclamo Susan, mientras se quita la ropa interior de abajo, y se sienta sobre Daniel, usándolo como un banquito y a la cara de este como un almohadón
Mientras Susan disfrutaba de un estupendo desayuno y de un intenso beso negro, Ale y Valen se encontraban en la cocina de su casa, preparando todo para darle una gran sorpresa a Dayana.
Ambos jóvenes ingresaron al cuarto de Dayana, cargando entre los dos la bandeja con el desayuno, y vistiendo atuendos provocativos.
“¡feliz día, mama!” exclamo Valen, quien vestía con un diminuto bikini color violeta (el color favorito de Dayana)
“¡esperemos que lo disfrutes mucho!” exclamo Ale, quien estaba usando una zunga ajustada del mismo color que su hermana
“¡pero que hermosos se ven mis niños!” exclamo Dayana, con gran alegría, y luego le dio a cada uno de sus hijos un apasionado y baboso beso en la boca “¡estoy orgullosa de ser su madre!”
“¡y nosotros estamos orgullosos de ser tus hijos!” exclamo Ale
“ahora como bien, porque necesitaras energía para la tarde” dice Valen
“¡ya me imagino lo que se viene!” exclamo Dayana, quien comenzó a comer su desayuno, mientras su hijo le lamia el coño, y su hija bailaba sensualmente para ella como si fuese una estríper
Por la tarde, las dos madre y sus hijos se reunieron en una cabaña apartada, la cual quedaba a las orillas del rio. Dicha cabaña, en su interior, contaba con una cama matrimonial enorme con forma de corazón, un tuvo para hacer bailes eróticos, muchos disfraces, y una cámara para grabar videos porno.
“¡que genial es este lugar!” exclamo Susan
“lo descubrimos Daniel y yo cuando fuimos a pescar con papa” dice Ale “resulta ser que el dueño transformo esta vieja cabaña en una casa para lunas de miel, pero nosotros la usaremos para darles a nuestras madres todo el amor que se merecen en su día”
“pero, antes de eso, les daremos su regalo” dice Daniel
“¿otro regalo?” pregunto Dayana, sorprendida
Las dos milf se sentaron en el borde de la cama y sus hijos se paraparo en frente de ellas para darles la sorpresa.
“bien, nuestro regalo es un anuncio que les encantara” dice Valen, con gran alegría “verán: los chicos y yo hemos estado hablando entre nosotros durante un tiempo, y hemos tomado una decisión… ¡queremos ser actores porno!”
“¿cómo?” pregunto Susan, sorprendida
“¡no jueguen con eso, jovencitos!” grito Dayana
“¡no estamos jugando, realmente queremos trabajar en la industria para adultos!” exclamo Ale “ustedes, con su constante amor materno, nos han inspirado a seguir esa profesión”
“y sería un honor para nosotros continuar con su legado” dice Daniel
“además, nos han cogido tanto que ya estamos acostumbrados a largas jornadas de sexo” dice Valen, en tono sarcástico “sería un desperdicio no sacarle provecho a la técnica y a la resistencia sexual que hemos adquirido al ser hijos de ustedes”
Tras escuchar las palabras de sus hijos, ambas milf no pudieron contener la emoción, y se pusieron a llorar.
“¡es el mejor regalo que una madre podría pedir!” exclamo Susan, mientras abrazaba a Daniel
“¡atesorare este regalo por siempre!” exclamo Dayana, mientras abrazaba a Valen y a Ale
“¡Los amamos!” gritaron ambas milf al unísono
“¡y nosotros a ustedes!” exclamaron los jóvenes, al unísono
“pero bueno… ¡fue la noticia que nos han dado fue un regalo inolvidable!” dice Susan, mientras se quita la remera “pero creo que ya es hora de dejar de llorar y empezar a gemir”
“¡tienes razón, amiga!” exclamo Dayana, mientras se bajaba el pantalón “este regalo no solo hizo que se me mojaran los ojos, también me humedeció el coño”
“¡yo ya lo sabía!” pensó Valen, mientras su madre la besaba apasionadamente
Rápidamente, todos los presentes se desnudaron, y Daniel y Susan comenzaron a hacer el 69, mientras que Ale y Valen chupaban el coño y el culo de Dayana respectivamente. Unos minutos después, ambas milf se pusieron en cuatro para ser penetradas vaginalmente por sus respectivos hijos, mientras que ellas masturbaban con sus dedos los agujeros de Valen
“¡¡mierda!!” grito Valen, mientras disfrutaba tener los dedos de Susan dentro de su coño, y los de Dayana en el culo
“¿Quién dice que celebrar el día de la madre es aburrido?” pensó Susan, mientras besaba a Dayana
“¡vamos, cuñado!” exclamo Daniel, mientras cogía el coño de su madre con todas sus fuerzas “no podemos decepcionar a nuestras madres en su día especial ¡debemos dar nuestro mejor esfuerzo!”
“¡Desde luego que sí, cuñado!” exclamo Ale, mientras le daba aún más duro a Dayana
Luego, las milf organizaron un “tren de besos negros”, en donde Ale le lamia el culo a Susan, Susan a Daniel, Daniel a Valen, y Valen a Dayana.
“¡el expreso Beso Negro acaba de salir de la estación!” exclamo Dayana, mientras gemía y agitaba las nalgas “¡próxima parada: un buen orgasmo!”
Luego de mucho sexo oral, Daniel le metió la verga a Susan dentro del culo, Ale se la metió en el coño, y ambos se empezaron a coger al unísono a la milf rubia, mientras que Dayana y su hija hacían el 69.
“¡si esto es un sueño, no quiero despertar nunca!” pensó Susan, mientras disfrutaba de la doble penetración
Al rato, se intercambiaron las poses, y Ale comenzó a cogerse el culo de Dayana, mientras que el coño de esta era penetrado por Daniel, al mismo tiempo que Susan y Valen tenían sexo lésbico frotando sus coños la una contra la otra.
“¡cuñado, démosle a mi madre el trato que se merece!” exclamo Ale, mientras penetraba salvajemente el culo de su madre
“¡pero por supuesto que sí, cuñado!” exclamo Daniel, mientras su verga entraba y salía del coño de su suegra “¡una mujer tan especial como tu madre se merece que la traten como un reina!”
“¡como una puta queras decir!” exclamo Dayana, entre risas, mientras los dos varones la penetraban al unísono
“¡no podría pedir una mejor nuera!” exclamo Susan, entre gemidos, mientras frotaba su coño contra el de Valen
“¡ni yo a una mejor suegra!” exclamo Valen, y beso a la milf rubia
Tras mucho sexo, los hijos acabaron, y se arrodillaron ante sus madres para recibir su “besito nocturno”.
“¡presta mucha atención, Susan!” exclamo Dayana, mientras sus hijos se acercaban con la boca abierta a su coño “¡te enseñare una receta secreta para que se la des todas las noches a tu hijo!”
Luego, Dayana lleno las bocas de sus hijos con sus jugos vaginales, escupió dentro de cada una de sus bocas, e hizo que se tragaran la mezcla. Al ver dicha “receta secreta”, Susan la ejecuto de la misma forma con Daniel, y este también se la termino tragando.
“¡esta súper acida!” exclamo el joven
“lo es pero, luego de beberla todos los días, te terminas acostumbrando” dice Valen, y besa a su novio “¡te amo, Daniel!”
“¡y yo también, Valen!”
“disculpen, no quiero arruinar el momento, pero les recuerdo que es el Día de la Madre” dice Susan “¡todo ese amor deberían dárnoslo a nosotras!”
“¡tienen razón!” exclamo Ale, con firmeza “¡vamos, chicos, que nuestras madres aún no se convencen de cuanto las amamos!”
Los hijos siguieron cogiéndose a sus madres durante toda la tarde hasta que, finalmente, todos cayeron agotados en la cama.
“¡el mejor Dia de la Madre de toda la puta historia!” exclamo Susan, satisfecha
“¿y sabes por qué fue tan bueno?” pregunto Dayana, quien estaba igual que su amiga “¡porque nuestros hijos son los mejores!”
“pero eso fue porque fuimos criados por excelentes mujeres” dice Valen
“mujeres que, a pesar de nuestra forma de ser, no nos dejaron de dar su “amor materno” ni un solo día” dice Ale
“y, gracias a esa forma de crianza, nosotros somos lo que somos, y les estamos eternamente agradecidos por ello” dice Daniel
“¡y nosotras estamos agradecidas de que ustedes nos amen tanto!” exclamo Susan, mientras su hijo se acurrucaba debajo de una de sus tetas
“yo lo dije una vez y lo diré mil veces más, porque es lo que realmente siento” dice Dayana, mientras sus hijos usaban sus enormes nalgas como almudadas “¡adoro ser madre!”
Finalmente, los cinco se quedaron profundamente dormidos.
¿Qué es lo que pasara a futuro? ¿Podrán Vale, Ale, y Daniel ser grandes actores porno? Yo no lo sé pero, si de algo puedo estar seguro es que, mientras ellos tengan su buena dosis de “amor materno”, estarán felices y contentos.
Muchas gracias por el apoyo
Lo del interracial me acaba de dar una idea para una futura serie ¡Estén atentos!
Serie entretenida y con un buen final. Tus relatos siempre tienen gran calidad. Me encantó que tuvieran sexo grupal y las madres tuvieran contacto con los hijos de la otra, lo único que extrañé de otras entregas fue los músculos femeninos.
En próximas entregas podrías meter temas de celos/voyerismo, en que los hijos se den cuenta que la madre está con alguien más y las celen, o talvez un poquito de interracial.