Al regresar a su casa tras haber estado varios días afuera del país atendiendo asuntos de negocios y cogiendo con todas la chicas de veinte que encontró en el camino, Nacho se enteró de la relación que su hija tenía con Daniel y, a diferencia de Dayana, este no estaba del todo de acuerdo con aquel noviazgo, y se lo hizo saber a su esposa en privado mientras estaban en el cuarto.
“¡vamos, querido!” exclamo Dayana “¡no seas amargado! Nuestra hija quiere mucho a Daniel, y yo también confió en el muchacho”
“¡pues yo no!” exclamo Nacho, molesto “recuerda que él tuvo una muy mala actitud con Susan, tú misma nos lo contaste. Si se comportó como un cretino con su propia madre ¿Qué nos garantiza que no se comportara de esa manera con nuestra hija?”
“pero eso fue porque Susan cometió el error de no darle su buena dosis de “amor materno”. Daniel ha mejorado su actitud desde que Susan empezó a cogérselo tres veces al día y, desde entonces, trata a todos, especialmente a su madre, con mucho respeto y cariño ¡te garantizo que no existe mejor muchacho para nuestra hija, y no lo digo porque su madre sea mi mejor amiga! A lo mejor, si lo conoces mejor, te terminara agradando”
“¡creo que ya tengo una idea para poder solucionar este problema!”
Al día siguiente, Nacho invito a Daniel a una “salida de hombres”, en donde ellos y Ale irían de pesca al rio para conocerse mejor, y el hijo de Susan acepto alegremente la invitación de su suegro.
Una semana después, los tres hombres se encontraban pescando en el rio a bordo de un bote.
“¡ah, esto es vida! ¿No lo creen, muchachos?” pregunto Nacho, mientras sostenía su caña “¡nada de estrés, ruido, trabajo, o molestas mujeres! Solo tres hombres pescando en las serenas y cristalinas aguas del rio, mientras escuchan los sonidos de la naturaleza y aspiran el aire puro del campo”
“¡tú lo has dicho, papa!” exclamo Ale, mientras disfrutaba la tranquilidad “¡se siente bien poder relajarse sin que mama venga y me haga lamerle el coño!”
“Por cierto, hablando de las chicas ¿Qué creen que estén haciendo?” pregunto Daniel
“Dayana me dijo que, aprovechando que nosotros no estamos, iba a realizar una “salida de chicas” entre ella, Valen, y tu madre” dice Nacho
“conociéndolas, de seguro irán a misa” dice Daniel de forma sarcástica, y su suegro y su cuñado no pudieron evitar reírse de su comentario
Mientras los varones se entretenían pescando, las mujeres se habían ido a pasar la tarde a un spa.
“¡esto es vida!” exclamo Susan, mientras recibía un masaje de un experto
“¡se siente tan bien relajarse un rato!” exclamo Dayana, mientras le hacían una máscara de barro “ser madre es algo muy placentero pero, a la vez, muy agotador”
“¡si, como no!” exclamo Valen, de forma sarcástica, mientras se relajaba en el yacusi “¿sabes lo que es realmente agotador? Ser hija de una ex actriz porno, cuya madre no puede contener su “amor materno””
“¡y me alegra mucho que te sientas agotada, porque eso quiere decir que he hecho un excelente trabajo como madre!” exclamo Dayana, mientras ella y Susan se ríen, y Valen no puede evitar sonreír por dicho comentario.
Luego de un rato disfrutando de todo lo que el spa podía ofrecer, las mujeres se desnudan por completo, se colocan una toalla alrededor del cuerpo, y se van al sauna, el cual era bastante espacioso y que nadie, aparte de ellas tres, estaban usando.
“¡siempre quise utilizar uno de estos!” exclamo Susan, mientras se relajaba
“¡yo también!” exclamo Dayana, mientras se quitaba la toalla, quitándose completamente desnuda
“¡mama, ponte algo, por favor!” exclamo Valen, quien estaba sentada entre las dos milf
“¿Por qué? No hay nadie, y no tengo nada que tu no hayas visto”
“si… pero…” dijo Valen, quien no pudo evitar excitarse al ver el cuerpo todo sudoroso de su madre, y esta se dio cuenta
“¡cómo se nota que el trabajo de una madre no termina nunca!” exclamo Dayana, con una sonrisa lujuriosa, mientras le quitaba la toalla a Valen, quien se había quedado paralizada por el morbo “¡y es genial que así sea!”
“¡tú lo has dicho, amiga!” exclamo Susan, excitada, mientras también se quitaba la toalla
Cada milf puso su boca sobre una de las tetas de Valen, y se las comenzaron a chupar, al mismo tiempo que ambas le acariciaban el coño. Al terminar de chupar, ambas milf se besaron apasionadamente, luego Susan beso a Valen, Dayana beso a su hija, y las tres mujeres se dieron un beso triple, en donde las lenguas de todas ellas se enredaron entre sí.
“tu hermano fue capaz de aguantar un buen rato con nosotras dos” le susurro Dayana al oído a Valen, mientras la acariciaba tiernamente “¡me da curiosidad por saber si tu también estarás igual de bien entrenada o si, por el contrario, deberé cogerte más veces por día!”
Luego, ambas milf se pusieron de pie, y Valen comenzó a chuparle el coño a su madre mientras que masturbaba a Susan. Al cabo de un rato, Valen cambio la posición, y ahora era Susan la que recibía su lengua en el coño, mientras que masturbaba a Dayana. Después, ambas milf le ordenaron a Valen que se pusiera de pie mientras que ellas se arrodillaban ante ella, y las dos maduras comenzaron a hacerle sexo oral a la joven (Dayana le chupaba el culo mientras que Susan le lamia el coño).
“¡mierda puta!” pensó Valen, mientras gemía al recibir sexo oral por parte de las dos madres “ahora entiendo porque mama nos hacer esta posición cuando nos coge a mi hermano y a mí en la cama ¡sentir dos lenguas entrando y saliendo de cada hoyo es fantástico!”
Luego, ambas milf se pararon, hicieron que Valen se arrodillara ante ellas, y atraparon la cabeza de esta entre sus enormes traseros.
“¡ahora es tu turno de hacernos sentir bien, chica!” exclamo Susan, mientras ella y Dayana restregaban sus culos contra la cara de Valen “¡danos un beso negro! Besa nuestros anos con la misma posición con la que besas a mi hijo”
Valen acato la orden de su suegra, y comenzó a chupar los culos de ambas milf, al mismo tiempo que masturbaba los coños de las voluptuosas mujeres.
“bien, creo que llego la hora de pasar al plato fuerte” dice Susan, mientras se alejaba “¡cógete a tu hija mientras yo me masturbo viéndolas, Dayana!”
“mama… si no te molesta… ¿puedes dejar que Susan me coja primero?” pregunta Valen “es que me gustaría conectar mejor con mi suegra”
“¡Por supuesto que sí, cariño!” exclamo Dayana, contenta
“¡ven aquí, mi amada nuera!” exclamo Susan, mientras besaba apasionadamente a Valen
Luego, suegra y nuera entrelazaron sus piernas, y comenzaron a frotar sus coños la una contra la otra, al mismo tiempo que ambas gemían y se daban unos apasionadas besos de lengua.
“¡qué alegría me da ver que ambas se lleven tan bien!” exclamo Dayana, quien se masturbaba mientras miraba el espectáculo
Al rato, Susan cambio de posición con Dayana, y ahora eran madre e hija las que tenían sexo lésbico mientras que la milf rubia se masturbaba viéndolas. Luego, las tres mujeres formaron un triángulo, en donde Dayana le chupaba el coño a Susan, Susan se lo chupaba a Valen, y Valen a Dayana. Las tres mujeres se hicieron sexo oral hasta que alcanzaron el orgasmo, y luego quedaron tendidas en el piso del sauna, bañadas en su sudor y en sus jugos vaginales.
“¡has criado a tus hijos excelentemente, Dayana!” exclamo Susan “¡sin duda alguna, tu hija es una mujer de verdad, y estoy orgullosa que ella sea la novia de mi hijo!”
“¡se lo agradezco mucho, suegra!” exclamo Valen, mientras besaba a Susan “lo único que falta es que papa acepte a Daniel ¡ojala lo haga!”
“no te preocupes por eso” dice Dayana, mientras acaricia la nalga de su hija “tu padre podrá tener muchos defectos, pero sabe reconocer a un buen chico cuando lo conoce. Solo ten fe en él y en tu novio”
Al salir del sauna, las mujeres se bañaron y se fueron de regreso a la casa de Dayana, en donde se quedaron haciendo tiempo hasta que los hombres regresaran. Un rato después, los varones ingresaron a la casa, y Nacho lo hizo cargando un enorme pez.
“¡querida, prepara salsa tártara, porque hoy cenaremos pescado!” exclamo Nacho, con gran alegría
“¡increíble!” exclamo Valen, sorprendida “¡es el pez más grande que he viso!”
“¿lo atrapaste tú, querido?” pregunto Dayana
“en realidad, la captura la hicimos entre los tres porque, de no ser por mi hijo y por mi nuevo yerno, no hubiera podido atrapar a este majestuoso ejemplar” dijo Nacho, mientras abrazaba a Daniel “me arrepiento de todo lo malo que dije sobre ti ¡Bienvenido a mi familia!”
“¡gracias, señor!” exclamo Daniel, contento
“¡qué emoción!” grito Valen quien, emocionada, fue a abrazar a su novio
“¡bien hecho, cuñado!” exclamo Ale, con alegría
“¡somos las consuegras, somos las consuegras!” exclamaron Dayana y Susan al unísono, mientras se abrazaban
Luego, Dayana y Susan cocinaron el pescado, lo sirvieron en la mesa, y todos los presentes se sentaron a cenar como si fueran una gran familia feliz.