Cae una lluvia invernal suave y poco a poco lo va mojando todo. Puedo escuchar desde mi cama como va aumentando en intensidad, hay olor a tierra húmeda, no quiero levantarme, esta fresco, me hago un bollito en la cama dejando que la suavidad de las mantas me caliente.
Disfruto del sonido del agua cayendo y del placer que me produce estar abrigada entre las sábanas. Me pregunto si puede haber algo más placentero que esto y de inmediato me digo Sí… que estuvieras VOS en la cama conmigo. Así como la tierra seca siente la urgencia de la lluvia, así siente mi cuerpo la necesidad de vos para gozar sin límites.
La lluvia cae con más fuerza y su humedad ha penetrado dentro mío junto con tu recuerdo, se agita mi respiración al imaginar tu mano en mi clítoris tocándolo frenéticamente, puedo sentir el calor de tu cuerpo desnudo, el aumento de la temperatura que provoca tu lengua al recorrer mi cuello, una mano jugando con mi pelo y hasta tu pene contra mis muslos, puedo sentirlo tan real como la lluvia que cae afuera.
Me dejo llevar por la imaginación, mis manos son gotas de lluvia que suavemente corren por mi cuerpo. Voy por el juguete que me regalaste, la boca se me hace agua, saco el pene de silicona y lo chupo con tanto gusto que hierve la saliva en mi boca, y digo en voz alta: Que rica pija que tenés!!
Quiero cabalgarte ahora, me quito la bombacha y juego con tu pene en el agujero de mi culo no lo dejo entrar… pero tengo unas ganas tremendas de que me hagas bien hecho el culo, corre por mi vagina un jugo delicioso que quiero que pruebes.
Me meto entera la pija de silicona gorda y rica, como me vuelve loca, me toco las tetas, me las lleno de saliva, y voy por un dilatador anal, quiero que me penetres toda, soy toda suspiros y movimientos suaves, ahh, es delicioso jugar con la lluvia y con vos en mi cama.
Después de un rato me doy cuenta que ha parado de llover y yo he quedado toda mojada.