Habían pasado tres días de mi encuentro lésbico con Cora y aquella noche cenamos los tres y yo me quede a recoger la cocina y note como las manos de Cora me abrazaron por la cintura y me giro y me beso en los labios.
– Estás loca – le susurre – esta mi hijo
– Eso es lo que me pone – me contesto ella – llevarte a la cama con tu hijo en casa y comerte toda putita
Las manos de Cora se metieron por debajo de mi jersey y me masajearon las tetas y mis pezones se pusieron duros y ella me beso en el cuello.
– Por favor – le suplique – mi hijo puede vernos
– Está bien – me dijo Cora – te voy a dejar y te iré a visitar a tu habitación, espérame desnuda putita
Yo le asentí con la cabeza, estaba excitada y mi coño se humedeció, me recogí el jersey y le di un beso en los labios y acabe de recoger la cocina, me fume un cigarro y fui al comedor. Cora estaba en el sofá viendo un programa de televisión y mi hijo estaba en su cuarto con el ordenador, le dije que me iba a acostar y me fui a mi habitación y me acosté en la cama y espere que pasara el tiempo, mi coño estaba húmedo y me pase los dedos por la raja, pensar que Cora me iba a venir a hacer una visita con mi hijo en casa me puso cachonda al máximo.
Escuché como se abría la puerta de mi habitación y Cora entro sigilosamente a oscuras y se metió en la cama conmigo y nos besamos y me quito las bragas y me las puso en la boca y yo flexione mis rodillas y le abrí las piernas sin que ella me lo pidiese.
– Tienes el chochete muy mojado – me dijo Cora mientras me pasaba el dedo – eres muy putita.
Yo solté un sollozo seco y mi excitación iba en aumento.
– Quieres que te coma el chochito putita – me dijo Cora mientras me miraba morbosamente y yo le hice un gesto con la cabeza – y sus dedos me abrieron el coño y empezó a lamerlo con sabiduría, yo cerré los ojos y me deje llevar, mis manos se agarraron a la cabeza de Cora y empecé a respirar fuertemente y a soplar con fuerza, mis gemidos quedaban mitigados al llevar y morder las bragas en la boca
– Como me gusta comerte el chochito – me susurraba Cora – hueles a perra en celo
Yo me retorcía en la cama, la lengua de Cora me provocaba un placer inmenso y no tarde en tener un orgasmo y me quede temblando en la cama y Cora se puso a mi lado y me beso en los labios y me hizo un gesto para que estuviera en silencio y salió de la habitación.
Escuche los pasos de Cora al volver y abrió la puerta de la habitación y le dio al interruptor de la luz, venía con mi hijo, yo me tape y me quede sentada en la cama avergonzada al ver a mi hijo. Cora se sentó a mi lado y retiro las sabanas y yo solté un grito de exclamación, Cora me abrió las piernas y se puso entre ellas y me abrió el coño.
– Mira que chochito que tiene mama – le dijo a mi hijo y cada vez me abría más el coño – ¿la habías visto así?… tienes una mama muy mala
Yo tuve un gesto de pundonor e intente cerrar las piernas y taparme con las sabanas pero Cora me lo impidió.
– Por favor – le suplique – que me estás haciendo… no quiero… déjame
– Ahora no me vengas de mujer decente – le dijo Cora y le metió dos dedos en el coño – vamos a enseñarle a tu hijo lo putita que eres
Yo solté un grito pero los dedos de Cora entrando y saliendo de mi empezaron a provocarme placer y intente evitar que Cora me siguiese penetrando pero note como dos manos me agarraban fuertemente y vi cómo mi hijo me sujetaba por los brazos y me miraba de una manera muy especial.
– Mira como me deja que la folle la muy marrana – le dijo ella a mi hijo – tiene el chocho muy mojado… está muy caliente
Mi hijo se acerco y me puso la mano en el cuello y me atrajo hacia él y me puso la polla a la altura de mi boca.
– quiero metértela en la boca mama – me dijo mi hijo
Yo intente apartarlo pero él era muy fuerte y me puso su glande en la comisura de los labios y poco a poco me metió el glande en la boca.
– que boca más caliente que tienes mama – me dijo él – chúpamela un poquito
Yo le puse las manos en sus caderas y le hice un gesto de negación con la cabeza, pero él empezó a meter y sacar de su boca el glande que cada vez lo tenía más erecto y duro.
– Mira cómo me pones mama – le exclamo – me la estas poniendo dura, así me gusta
Yo hice un gesto para sacarla de la boca y él me penetró hasta la garganta y me dejó sin respiración y lo mire con los ojos bien abiertos como suplicándole que no lo volviera a hacer y el empezó a penetrarme la boca suavemente y yo le puse la mano en el tronco para que no volviese a penetrarme hasta el fondo de mi boca. Cora sacó sus dedos y me acariciaba el coño y con sus dedos me acariciaba el clítoris y eso me produjo algún espasmo de placer.
Así mama házmelo así – sin darme cuenta se la estaba chupando a mi propio hijo – y el sacaba la polla y me daba golpes en la cara con ella – te voy a follar mama, he soñado mucho con esto.
– Te la voy a poner bien caliente – dijo Cora y empezó a comerle el coño – para que te la folles
Sentía como la lengua de Cora me fundía el coño y yo agarraba el tronco de la polla de mi hijo y le pasaba la lengua por el glande y se la chupaba y empecé a sentir como me llegaba otro orgasmo.
– Córrete putita – me dijo Cora al notar que me iba a correr
Mis piernas empezaron a temblar, me corrí mi coño lanzo fluidos en exceso, Cora me giro y mi hijo apunto con la polla a la entrada mi coño.
– Te voy a follar mama
– Por favor hijo no me la metas – le suplique – soy tu madre
Mateo me penetro con el glande y yo lance un grito y lo saco y paso su glande por toda la raja de mi coño provocándome un placer indescriptible y que hizo que mi cuerpo sufriese un espasmo.
– Que coñito mas mojado que tienes mama – Me dijo mientras me volvió a penetrar con el glande
– fóllala bien follada – le dijo Cora
Mateo me penetró con su enorme polla en dos golpes, yo solté unos gritos de dolor y me la metió hasta el fondo de mi coño y yo solté un bufido enorme al sentirme empalada e incluso me falto el aire y Mateo empezó a moverse dentro de mi coño entrando y saliendo lentamente, yo le puse las manos en el pecho.
– Despacio por favor házmelo despacio – esas palabras salieron de mi boca inexplicablemente
La polla de mi hijo se deslizaba fluidamente entrando y saliendo de mi coño y yo gemía placenteramente.
– Como me gusta tu coño mama – me decía mi hijo mientras me follaba y Cora se puso de rodillas detrás de mí y me sujetaba la cabeza y sus dedos me pellizcaban los pezones – tienes el coño muy apretado te lo voy a abrir
Yo sentía un placer enorme, me retorcía en la cama y mi hijo empezó a follarme con intensidad y profundidad y empecé a gritar de placer.
– Fóllala así – le dijo Cora a mi hijo mientras me miraba morbosamente – como chilla la muy guarra
Mi hijo me levanto por las caderas y me follo profundamente, yo mordía los brazos de Cora y gritaba con fuerza.
– ¿te gusta que te folle así? – me preguntó
– Fóllame así – le grite – sígueme follando – le suplique
Mi cuerpo empezó a temblar y convulsionar y me llegó un orgasmo salvaje y estuve un buen rato temblando mientras de mi coño manaban una gran cantidad de flujos vaginales y Cora y mi hijo se besaban y ella le hacía una paja con la mano.
Mi hijo se sentó en la cama y Cora me puso encima suyo, yo sabía lo que quería y me deje caer encima de la polla de mi hijo y me la clave en mi coño y lo abrace por el cuello y empecé a montarlo.
– me gusta que seas tan guarra mama – me dijo mi hijo mientras me miraba fijamente – me encanta tu coño y como chillas y te corres
Las palabras de mi hijo me estaban poniendo muy cachonda y empecé a montarlo con fuerza y notaba como mi coño engullía toda su polla.
– ¿te gusta lo que te hace mama? – le pregunte – quieres que sea así de puta
Mi hijo me cogió fuerte por la cintura y ayudó a cabalgarlo con fuerza, Cora me acariciaba las nalgas y su dedo se abría paso hacía mi preciado culito y me penetró con su dedo y yo solté un grito de exclamación la sentirme penetrada por mis dos cavidades a la vez, mientras mi hijo me mordía los pezones.
– me vas a volver loca – le exclame
Mi hijo me giró y me puso mis pies en mis hombros y empezó a follarme con fuerza mientras Cora me besaba y me daba la lengua.
– Dame así – le grite – como te siento… ¡fóllate a mama!
– Tienes un coño muy calentito y mojado – me decía – voy a follarte cada día
Yo no pude contenerme y me volví a correr salvajemente, mi hijo me puso de rodillas y me metió la polla en la boca.
– quiero correrme – me pidió – quiero correrme en tu boca
Yo me negué y le hice un gesto negativo, pero Cora me agarraba las manos y mi hijo por el cuello y se corrió dentro de mi boca, su semen me bajaba por la comisura de los labios y Cora me beso y se trago el semen que no cabía en la boca mientras sus dedos me recorrían la raja de mi coño y me estiro en la cama, me abrió las piernas y empezó a comerme el coño y meterme un dedo por el culo.
– te gusta que te coma el chocho delante de tu hijo guarra – me humillaba Cora
– me vuelves loca con tu lengua – le conteste
– ven y cómele el chocho – le pidió Cora a mi hijo – que se puso entre Cora y yo y empezó a pasarme su áspera lengua por mi coño arrancándome gemidos de placer
– te das cuenta como le huele el chocho – le preguntó Cora a mi hijo – él le hizo un gesto afirmativo – ésta muy caliente la guarra quiere seguir follando
Cora me metió un dedo por el culo y lo sacaba y lo volvía a meter y eso me provoco una calentura que nunca antes había sentido y me paso la lengua por mi ano, Cora me puso de rodillas y mi hijo me volvió a poner delante su polla y yo la agarre sin que nadie me dijese nada y me la lleve a la boca y empecé a chupársela, sentí como Cora se había ido un momento y que volvía ( había ido a buscar un preservativo y el bote de lubricante ) y sentí un frio en mi ano cuando ella me metía el dedo y me untaba el lubricante y le dio el preservativo a mi hijo que se lo puso, yo al adivinar sus intenciones me negué e intenté levantarme pero entre los dos me sujetaron y me abrieron bien las piernas y me pusieron el culo en pompa.
– no me hagáis eso – les suplique – no quiero – les grite
Cora me sujeto la cabeza contra las sabanas y mi hijo me penetró con el glande y yo solté un grito de dolor desgarrador al sentir como mi propio hijo me estaba violando y rompiendo el culo.
– Te va a doler pero ya te acostumbraras – me decía Cora – te va gustar que te follen por ahí
Mi hijo me siguió penetrando con fuerza y yo podía notar como mi esfínter se doblegaba ante su majestuosa polla y seguía chillando y gritando de dolor.
– te voy a romper el culo mama – me humillaba él – a partir de ahora vas a ser mi putita
– ya esta putita ahora va a dejar de dolerte – me animaba Cora mientras me daba la lengua y mi hijo empezó a follarme el culo lentamente
– como me aprieta tu culito mama – me susurraba mi hijo – mientras a mi me caían las lágrimas por las mejillas, lloraba de dolor y por el hecho que mi propio hijo me estuviese sodomizando, pero a medida que me follaba empecé a sentir que el dolor se volvía más soportable e incluso placentero, Cora que era una experta lo notó y se lo hizo saber a mi hijo
– Ya ésta disfrutando – le dijo ella – y mi hijo aumento el ritmo de las penetraciones y yo empecé a gemir suavemente
– Te gusta que te folle por el culo mama – me susurraba él – que guarra que eres
– Tiene el chocho muy mojado – dijo Cora al meterme un dedo en el coño – y yo volví a sentir un placer enorme al sentirme otra vez penetrada por mis cavidades y empecé a temblar y me corrí salvajemente y me quede tirada en la cama temblando, Cora le quito el preservativo a mi hijo y le hizo una mamada y dejo que se corriera en su boca.
A partir de aquel día yo me convertí en la puta de mi hijo y su amante.
hacer un un berrinche la chiquitica … Así que se prepare que voy por ella ….. Con todo mi amor… Love you mom….. Te mereces todo lo mejor… Dame esa totonita para llevarte al placer del que nunca me vas a olvidar.