Todo comenzó cuando hablamos por teléfono y lo invité a casa, cuando llegó pasamos a la sala cada quien en un sillón diferente y platicamos un rato, después me pidió que me acercara junto a él, casi de inmediato acarició mis bubis, las tocaba suavemente.
Me desabotonó la blusa y comenzó a besarlas, yo sentía rico, me recosté un poco en el sillón y él me tocaba la entrepierna y no dejaba de besar y succionar mis bubis, yo lo disfrutaba mucho, paramos y nos pusimos de pie, hacía mucho frio y mientras yo me quitaba la blusa y mi bra, él se desnudaba todo, se sentó y me abrazó para continuar besándome las bubis mientras manoseaba mis nalgas, me desabotonó el pantalón y me lo quitó, me acarició las piernas y con suavidad me quitó las pantaletas, yo sentía rico sólo de pensar lo que continuaría, me senté junto a él y comenzó a besarme con pasión los labios el cuello, yo aproveché y le tomé su enorme verga para acariciarla pensando que la quería toda adentro de mi, él me recostó y como todo un buen amante comenzó a besar mi clítoris, lo acariciaba con su lengua suavemente y en ocasiones un poco fuerte y rápido, quedamos listos…
Le pedí que me la metiera yaaaa, me puso de pie y viendo hacía mi ventana me incliné con el único deseo de sentir su verga toda adentro… La metió lento, suave, asi como preparando terreno, y poco después inició su embate fuerte y rápido, yo lo disfrutaba como nunca, sentía riquísimo y le pedí que lo sacara un poco, me complació y empezó un juego de meter y sacar que me llevo al mismisimo paraiso, me hacía gritar, lo sentía todo, grande y duro penetrando mi vagina.
Debo confesar que aguanta más de lo normal porque no dejo de metermela mucho tiempo, lo hice varias veces. Después simplemente me volteo y me recostó para volver a meterla esta vez más fuerte y mas duro, gritaba, reía, lo disfrutaba, me cogía tan rico que no quería que terminara, me cogío me cogio y me siguió cogiendo… hasta que para su placer lo saco y todo su semen lo vertió en mi cuerpo, caliente y placentero.Nos limpiamos para sentarnos juntos y acariciarnos, yo estaba muy caliente y quería continuar, así que tome su enorme verga y la lleve a mi boca, mmmm, se la chupaba y deseaba ponerla dura otra vez, la metía y sacaba suavemente de mi boca, le recorría toda con mi lengua y a veces intentaba comermela toda sin lograr mi cometido por lo grande que era, así fue un rato más pero él estaba muy cansado por lo que nos detuvimos para platicar mientras se vestía y yo deseando poner una nueva fecha para continuar con esta experiencia erótica sensacional.