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Hotel Spa (parte 1)
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Tiempo de lectura: 6 minutos

Acabo de llegar aún lugar hermoso, de clima cálido rodeada por la naturaleza que tanto me gusta; me registro y me hacen entrega de la tarjeta mi habitación. Un chico muy amablemente me ayuda con mi maleta y me acompaña hasta mi habitación.

Abre la puerta y es hermoso todo lo que veo, es una habitación grande que está ubicada en el primer piso ya que es un hotel pequeño con cabañas que rodean la piscina; las paredes son tipo madera, una cama amplia tiene un balcón en el cual hay una hamaca y el baño tiene una tina pequeña.

Organizo mis cosas y me tomo el tiempo para relajarme en la hamaca escuchando el sonido del agua de la piscina y de las personas que allí se encuentran.

Al caer la noche me dirijo al baño para darme un baño delicioso; la tina la lleno de agua pongo mucho producto para que surja la espuma y me sumerjo en él… ¡Wao! Que experiencia tan deliciosa nunca lo había vivido; tomo mi celular y empiezo a capturar momentos ahí en la tina; me tomo varias fotos posando muy sensual ya que me gusta tomarme fotos desnuda. Adorno mis pechos con la espuma y continúo tomándome varias fotos.

Este momento de intimidad hace que me empiece a excitar así que grabo un video mientras amaso mis tetas con descaro, me gusta ver mi rostro expresando el deseo y placer que vivo en ese momento. Enfrente a la tina hay un espejo así que saco parte de mi cuerpo para que mis nalgas salgan del agua y poso de una forma levantándolas y tomo una foto de mi cuerpo de espaldas con ayuda del reflejo que veo atreves del espejo.

En ese momento empieza a volar mi imaginación deseando que un hombre me coja delicioso por detrás así que dejo a un lado el celular y llevo mi mano a mi coño y me masturbo, gimo en aquel baño mientras empiezo a decirme cosas perversas

–Que rico coño tienes… eso cosita andas ganosita ¿cierto?

Continúo follándome con mi mano…

¡Ah, ah, ah… si… eso que rico se siente!

De un momento se me viene a la cabeza alguien que me atrae mientras hundo más mi mano.

¡Oh… si dame duro por donde quieras… cuanto deseo en este momento tu verga en mi culo dándome con todo!

Llevo un dedo a mi hoyito y me lo hurgo mientras continúo con mi follada.

¡Ah si eso dame duro papi!

De un momento a otro siento espasmos en mi vientre y siento un rico orgasmo… al finalizar sonrió y me sumerjo nuevamente en el agua y disfruto de mi baño.

Al otro día me dirijo al restaurante del hotel para desayunar y veo nuevamente al chico que me ayudo con mis cosas, es alto delgado, guapo, una mirada tierna, su cabello crespo y su color de piel blanca.

–Señora buenos días, ¿le gustaría disfrutar de un masaje de relajación?

–Me llamo Gabriela y si claro que me gustaría.

–Si quiere señora Gabriela hacemos la reserva.

–Si claro y ¿en qué lugar lo hacen?

–Si usted gusta en su habitación, también de hace servicio a la habitación

–Ah si claro mucho mejor. ¿se puede esta noche?

–Si señora Gabriela; ya mismo separó su cupo

–¡Gracias! –le sonrió amablemente y él se retira de la mesa.

Llegando la noche me doy un baño para estar lista para el masaje, tengo un bikini muy pequeño de color negro ya que por mi color de piel blanca me gusta como me veo. Soy delgada de senos medianos cabello largo color borgoña ojos cafés y labios provocadores (si no me hablo bonito quien más lo hace… nadie). Mientras llega la señorita me pongo una bata blanca.

Toc, toc… tocan a mi puerta y me dirijo abrir… cuando abro veo al chico de esta mañana.

–Señora Gabriela buenas noches, soy el encargado de su servicio

Quedo sin palabra porque nunca me imaginé que fuera un hombre que me realizara el masaje.

–¿Puedo pasar?

–Ah si siga

–¿Pasa algo señora Gabriela?

–Ah, pensé que sería una mujer quien hacia el servicio

–Si quiere llamo a una compañera

–No no no… claro que no, perdón si lo incomodé. Solo lo decía por como me miró. Solo me tomo de sorpresa nada más tranquilo. Si quieres puedes ir alistando todo

El chico arma la camilla y todas las cosas que se requieren para el masaje.

–Señora Gabriela, ya puede pasar

No sé qué me pasa, pero este hombre me tiene nerviosa, pero a su vez emocionada porque él me va a realizar el masaje. Así que enfrente de él abro mi bata y lo dejo caer al piso; él sin disimular abre un poco la boca al ver mi cuerpo, paso a seguir me acuesto boca abajo.

–¿Le puedo soltar el brasier?

–Si claro quiero estar cómoda

El chico suelta el brasier y lo retira de mi cuerpo.

Pone música de fondo y enciende una velas aromatizadas así el lugar es agradable y relajante. Luego se va a lavar las manos y posteriormente se aceita las manos; empieza a dejar caer aceite por toda mi espalda haciendo que me estremezca por el frío del líquido.

–Perdón señora Gabriela si la incomode

–Me puedes llamar solo Gabriela

–Está bien, Gabriela

–¿Cómo te llamas?

–Antonio, pero me puedes llamar Anthony

Mientras él inicia con el masaje seguimos hablando.

­–Si en algún momento se siente incómoda me dices por favor –nos empezamos a tutear.

–Si Anthony, solo quiero disfrutar de tus manos acariciando mi cuerpo –le respondo en modo perversa

–Así será… Gabriela

Él pasa sus manos con algo de fuerza por mi espalda haciendo que cierra los ojos y sin querer sale un gemido sutil… sube a mis hombros y amasa ahí varias veces.

–Estas muy tensionada

–Por eso vine a este lugar

–Te ayudare a que te relajes en tu estadía

–Es lo que más deseo

–Verás que será inolvidable

Continúa con el masaje amasando mi espalda bajando a mi cintura y por un momento se queda ahí haciendo círculos con sus nudillos. Deja caer más aceite por mis piernas y pasa sus manos desde abajo subiendo lentamente.

–Gabriela separa un poco la piernas

Así lo hago y él va subiendo a mis muslos rozando por mi entrepierna… ¡Ah! Que delicia sentir sus manos por mi cuerpo y estoy empezando a humedecer mi tanga.

–¿Puedo soltar la tanga?

–Si Anthony no quiero que nada me estorbe

Él suelta los cordones de la tanga y levanto mis nalgas para que la hale y la retire… en estos momentos quede completamente desnuda y confieso que deseosa por este hombre.

–Tienes un cuerpo hermoso Gabriela

–Gracias Anthony y… tú no te quedas atrás

Derrama más aceite por mis nalgas dejando caer no se si apropósito por mi raja… luego pasa sus manos abriendo mis nalgas y las amasa con algo de fuerza… siento como pasa sus dedos por dentro de mi raja llegando poco a poco con cada masaje a mi hoyito… con una mano desliza un dedo en medio haciendo que gime si querer. Abre mis nalgas y derrama más aceite bajando por mis entrepierna.

–¿Te gusta?

–Si, mucho

Será mi imaginación o este hombre me está haciendo un masaje erótico… si es así me entrego totalmente a lo que quiera hacer este hombre.

Baja nuevamente al inicio de mi pierna y va subiendo amasando y llegando a mi entrepierna rozando mi coño con la punta de sus dedos y se queda ahí amasando mi muslo y parte de mi nalga rozando cada vez más mi coño. Así que tomo la iniciativa y cada vez que para por mi coño levanto mis nalgas-

–Gabriela gira por favor

Me giro con ayuda de él quedando a su vista mis tetas y mi coño. Su mirada hace que moje cada vez más. Sin decir nada derrama aceite por mis tetas, bajando el hijo del aceite hasta llegar a mi ombligo.

–¿Me permites acceder a todo tu cuerpo?

–Adelante

Se ubica a la cabecera de la camilla y lleva sus manos a mis tetas mientras cierro los ojos y me dejo llevar por ese momento placentero… hace círculos alrededor de mis pezones y luego pellizca suavemente. No sé si será mi imaginación, pero siento que roza con mi cabeza su verga porque la siento dura; así que arqueo mi espalda llevando mi cabeza para atrás y ayudo a darle placer.

Él se retira de allí y derrama aceite por mi coño hasta llegar al final de mis piernas. Después se ubica al final de le camilla separando un poco más mis piernas y empieza a hacer masajes de arriba hacia abajo… levanta una pierna y hace masajes en mis dedos, planta y tobillo.

–Que vista tan hermosa tengo

–Ah si, ¿Y que más te llama la atención?

–Tu coño depilado

–También quiere recibir un masaje

–Dile que ahora voy

Suelta la pierna y hace lo mismo con la otra, luego se ubica a un costado de la camilla en ambas piernas va haciendo masajes hasta llegar a mis caderas. Se ubica dándome la espalda y empieza a dar masajes en la zona de la ingle llegando a mi entrepierna varias veces… cada vez más abre mi labios con cada masaje.

–Separa más la piernas Gabriela

Separo y empieza a dar masajes sobre mi vulva abriendo los labios y con un dedo hace círculos en mi clítoris.

–¡Ah!

Ahí se queda un buen rato estimulando suavemente luego se gira y con una mano amasa una teta mientras continúa estimulando mi clítoris.

–Dime que sientes

–Cosquillas muy deliciosas

–Dime que deseas

–Una follada con tres dedos

Abre mi coño y desliza un solo dedo.

–Dime, ¿te gusta?

–Dame otro dedo

–¿Así? –Introduce otro dedo

–Dame otro

–¿Así? –ya tiene los tres dedos dentro de mi coño hasta el fondo

–¡Ah, si así!

–Dime como te follo

–Como si quisieras meter toda mano

Empieza a follarme metiendo un cuarto dedo.

–¡Ah, ah, ah si… Uy que rico masaje

–Mojas muy rico Gaby

–¡Dame más!

–Dime que quieres

–Hazme llegar a un delicioso orgasmo

Continúa follándome aumentando la velocidad mientras amasa cada una de mis tetas con fuerza. Flexiono mis piernas y abro completamente mis piernas.

–¡Uf! Que delicia ese coño dan ganas de una chupadita

–¿Y qué esperas?

–Lo quiero hacer después que te haga llegar para lamer tus jugos

Continúa follándome hasta que siento deseos de orinar, nunca había sentido esto y de un momento a otro sale un líquido a chorro mojando a Anthony… él saca su mano y me hala hacia él al final de la camilla y empieza a lamer cada parte de mi coño que palpita, esto hace que sienta otro orgasmo intenso… hunde su lengua y luego juega moviendo rápido con la punta sobre mi clítoris haciendo que grite y sienta otro orgasmo… ¡Wao! Que hombre tres orgasmo seguidos.

–¿Dónde habías estado durante todo este tiempo?

–Ja,ja ja …¿Te gusto?

–Me fascinó

–¿Quieres más?

–Si, quiero más orgasmos esta noche, ¿puedes?

–Si, pero debo entregar mi turno

–Te espero

Me da un beso muy apasionado y me ayuda a levantarme y a colocarme la bata. Recoge todo y se retira de la habitación.

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Autor
Gaby Borsh
Gaby Borsh
Los invito a dejar volar la imaginación por un momento y se hagan el amor con la mente. La literatura erótica nos seduce y nos permite tener sexo mental. No soy escritora, solo quiero plasmar lo que tengo en mi mente y corazón. #erotismo

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Comentarios

2 COMENTARIOS

  1. Hola Ana
    Gracias de verdad me llenas de alegría saber que te gusta leer mi contenido y que además cumplo con el objetivo y tus orgasmos son el pago..
    Ya esta la segunda parte espero que sea excitante para ti…pronto subiré una conversación candente entre amigas 😉.
    Besos 💋

  2. Desde hace un tiempo vengo leyendote y debo decir que cada una de tus palabras escritas es un orgasmo para mí, en verdad son muy buenos, cumplen su cometido, hacer volar la imaginación y excitarme al punto de usarlos para darme placer, te seguiré leyendo hermosa.
    Besos ana

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