Mi abogado un gran amigo y algo más…
Bueno seguimos con el relato que ya los he tenido un poco abandonados.
Nos seguimos hablando por teléfono y por Whatsapp, a fin de cuentas es mi abogado!
Todos los días era un mensajito de:
-Hola guapísima
-Hola guapetón
Cuando hablábamos siempre me decía que cuando nos veíamos de nuevo, total que le acelere una ida a comer, paso por mi a mi oficina, en su flamante Mercedes Maybach clase S blanco con interiores color camello, siempre impecable, traía un traje azul, camisa blanca y corbata roja, olía delicioso, Armani como siempre, yo traía un vestido azul BCBG hasta medio muslo, más corto de los que acostumbro y mi saco blanco a juego, zapatos dorados, mi Rolex y una cadena Cartier que me encanta con ese vestido.
Al parecer desde que nos vimos las pupilas se nos dilataron, y sonreímos como estúpidos!
Me abrió la puerta del auto y me subí con cuidado para no enseñar con el vestido mi ropa interior, en cuanto entro en el auto comenzó a besarme, tiene la boca grande así que siempre siento que me va a devorar media cara, pero besa muy bien, de esos besos apasionados, necesitado, prácticamente estaba la mitad de su cuerpo sobre mi, puso su mano en mi rodilla y empezó a subirla así que se la tomé con la mía y paré su avance.
-Ya vámonos que nos va a ver alguien
-Sí, es que te ves tan sexy que no puedo resistirme
Avanzamos y fuimos platicando de cosas de la vida, chistes, política y las jocosidades de nuestros respectivos y excéntricos clientes.
Comimos y todo fue de lo más normal pero cada que detenía el coche en el trayecto me devoraba a besos, y no paraba de adularme, yo solo podía decirle:
-Agradezco el cumplido Héctor
El solo reía diciendo que soy demasiado educada, que siempre me imaginó algo más alocada.
En la comida de comportó me daba no sé qué encontrarnos con alguien, pero pudimos hablar del caso y de las estrategias.
También se desvió el tema y empezó a preguntarme sobre mis películas favoritas, música, amigos, sobre mis locuras en la universidad, mis novios y soltó la pregunta del millón!
-Como ha sido el sexo más fantástico que has tenido?
Wow sinceramente me imaginé que preguntaría, más que nada para saber que me gusta y lo más probable para complacerme y lograr una segunda cita.
Total que se calentó la plática y hablando
Por mi salí la verdad ya algo húmeda del restaurant, y él estaba con las mejillas rojas!
Desde que nos subimos al coche no paramos de besarnos pensé que íbamos a chocar, el propuso ir a algún hotel más que nada por el tema de no encontrarnos a nadie y que nadie nos vea o escuchen lo que platicamos, besarnos con libertad y lo que sea. Le comenté que no sería una gran idea ya que yo estaba en mis días, pero él dijo que a él no le importaba.
-En serio no te molesta que todo quede como si alguien hubiese sido asesinado?
-A ti te molesta?
-No, en realidad es más placentero durante el periodo, todo está más sensible
Así que nos fuimos a un Hotel Boutique ya saben de esos que están de moda y están decorados increíbles.
Llegamos y pedimos algo de beber nos quitamos los sacos y para mi sorpresa es de los que dobla y cuelga la ropa!
Ay no obsesivo-compulsivo (pensé) ya sabía que aparte de estar casado tenía que tener algo psicológico, que suerte la mía!
Nos sentamos en la cama y seguimos platicando y riendo a carcajadas la verdad que nos llevamos de maravilla, pero la vida no es muy equilibrada, yo con novio viviendo en un departamento que me dio en polanco para vernos más seguido, todo en mi relación súper bien pero el sexo más mediocre e insatisfactorio que he tenido en mi vida, parece que no se puede tener todo y simplemente ser feliz, ahí estaba yo, comprometida en un hotel de lujo con mi sexy abogado pero por perfecto que pareciese a fin de cuentas Héctor es casado y eso me conflictúa mucho; aunque ya no sea feliz en su matrimonio todo marcha bien solo que también el sexo es un asco en su matrimonio, era como ver mi futuro!
Total que de las risas pasamos a besarnos y en un segundo ya le había quitado la corbata, las mancuernas habían volado no sé a dónde, y el cierre de mi vestido estaba ya a media espalda, para mi sorpresa él se levantó, se desvistió y comenzó a colgar su camisa y su pantalón, recogió la corbata y me dijo que si le daba mi vestido lo colgaría para que no se arrugara!
En serio en medio de la calentura está pensando en si se arruga la ropa? Que loco!
En fin me quite el vestido y se lo di, ya que toda la ropa de vestir estaba colgada a la perfección en el closet, regresó a la cama se sentó y dijo:
-En qué estábamos?
Santo cielo tengo tino para los locos! Sexys pero locos!
Me senté sobre él, y comencé a besarlo tenía tanto tiempo de no tener sexo que si cuelga la ropa o no; me valía, me encanta, es sexy, alto, varonil, inteligente, se viste muy bien, siempre huele delicioso, es educado, y un hombre poderoso, tiene todo lo que me gusta, si dobla o cuelga la ropa ya es lo de menos.
Besamos cada parte de nuestros cuerpos, mi ropa interior salió volando en un segundo, y sus bóxers también; admiro la velocidad con la que logró la erección, apenas lo besé y ya estaba listo! Cuando los bóxers cayeron pude ver que todo era proporcional, buen tamaño y buen grosor, lindo, circuncidado, rosa y listo para mi.
Me puso acostada en la cama y empezó a besarme los pechos y sin decir más metió sus dedos en mi, que bueno que tiene manos grandes porque es una gran ventaja llegan Justo al lugar que me hace ver estrellas.
-Estás muy húmeda
-Igual que tú
-Cierto! Es que me encantas desde el primer día que te vi
-a mi también me encantas
Bajó y puso su boca entre mis piernas, Dios! Tenía tanto que no me daban placer con la boca, y lo hacía de maravilla, me besaba y lamina mientras sus dedos iban y venían dentro de mi.
No pude soportar mucho, lo senté en la cama, y me senté en él, no tuve ni que acomodarlo entró de un tirón, pude sentir como me llenaba por completo y al unísono soltamos un gemido de placer, fue genial, mejor de lo que me imaginé; estuve sobre de él un muy buen rato pensé que no aguantaría pero llegue al orgasmo, jadeaba con la boca abierta Justo en su boca no podía besarlo ni pensar en nada más solo sentir sus gemidos y él podía sentir los míos, ambos con los labios juntos pero la boca abierta jadeando sin parar.
Después de que llegué, me abrazo y me beso tiernamente, me puso boca abajo, me levanto de la cadera y empezó a penetrarme, le tocaba a él llegar al orgasmo…
-Me encanta tu trasero es precioso!
Tardo un buen rato tomándome en esa posición hasta que eyaculó fuera jadeaba como perro.
Se acostó junto a mi, y me abrazó llenándome de besos en el cuello y en la espalda.
-Té gustó?
-Bromeas? Estuvo genial no?
-Sí, increíble!
Después lo hicimos de nuevo unas 3 veces más, en las 3 me vine de nuevo, es de esos hombres que están diseñados para llegar al punto dentro de mi que me hace explotar de placer, él también tuvo sus orgasmos nadie le quedó a deber a nadie nada el marcador fue un empate!
-Vaya no estás cansada?
-Nop, pero creo que tú si
-Ahora entiendo eso que decías que te encanta tener sexo como si fuera maratón que energía tienes
-Sí, ya sé pero estoy súper feliz 4 orgasmos vaya que eres bueno!
Nos reímos sin parar, nos besamos, platicamos de mil cosas más, hasta que ya se hizo tarde, nos vestimos y nos fuimos, me paso a dejar a mi oficina ya que mi coche seguía ahí, y tenía que regresar a mi aburrida e insatisfactoria vida, pero eso si; ese día regresaría con una sonrisa de oreja a oreja y lo mejor es que sería la primera vez que llegaría a casa sin ganas de tener sexo con el señor que se medio infarta a medio palo y pierde la erección.
Ya les contaré la tercer parte…