Hola amiguis, les cuento mi última aventura, ojalá les guste y se pajeen pensando en una chica trans. ¿Qué creen? Para que el ano se me hiciera de nuevo apretadito ¡dejé de follar un mes!
Así, que al terminar este período estaba muy caliente y deseosa de que un hombre me metiera su virilidad en mi colita, como si fuera de nuevo virgen. Le llamé a un amigo por teléfono, y quedamos de vernos en un hotel. Me arreglé lo más sexy que pude y maquillada como una zorra, sobre todo me gustó mucho una linda peluca rubia hasta los hombros.
Llegué a la hora fijada y pasé a la habitación. De rato llegó él y abriendo la puerta me abalancé sobre su cuerpo, le bajé pantalón y trusa y de inmediato se la empecé a pajear y a besar desde la punta hasta la base del tronco en su pubis.
Se la mamé como una experta durante 10 minutos, luego, me quité la tanga hasta la mitad de las piernas y me le puse en cuatro, le dije que me la metiera sin condón y sin lubricante, sólo escupió en mi colita y me metió toda su polla de 25 cm, de un solo empujón.
Me dolió un poco, que era lo que quería y mis pliegues anales se pegaron como lapa a su pene, yo estaba como loca con ese miembro taladrando mi botoncito de amor y él me decía que estaba bien apretadita y que se vendría pronto.
Yo le pedí que se aguantara y me cogiera por más tiempo, que quería sentir su polla dentro de mí. Me la metió súper rico hasta que me dejó abierto el ano e hinchado, de pronto se chorreó dentro de mí, sentí como que me inundaba el entresijo de semen y dando un último empujón de su pito me lo dejó adentro varios segundos.
Yo estaba delirando de placer, tanto que se me salieron unas lágrimas de felicidad y empujé mi trasero hacia su cuerpo, empecé a gritarle que me destrozara la cola y llegué al orgasmo anal, apretando su polla y exprimiendo hasta la última gota.
Por fin, me la sacó y yo estaba escurriendo de su semen, mis líquidos anales y un poquito de sangre, jijiji.
Nos vestimos y salimos del hotel ambos felices y enfilamos a un restaurant-bar a cenar y festejar ese delicioso reencuentro.
¡Bye, chicos, hasta la próxima follada!