Me dirijo hacia la casa de mi mejor amiga para tomar mates, como siempre, ella me recibe con un enorme abrazo y un beso en la mejilla.
Tenía puesto un vestido blanco que acentuaba todo su cuerpo y me llamaba demasiado la atención.
Subimos por las escaleras, ella iba delante mío unos escalones más arriba, y no pude evitar mirarla desde abajo de su vestido, llevaba puesta ropa interior negra, lo cual resaltaba mucho con sus blancas y hermosas piernas.
Nos sentamos a ver la tele, y mientras charlábamos sobre lo que hicimos en la semana, me pongo a preparar el mate. Ella se inclina para levantar algo que se había caído, y no puedo evitar volver a mirarla, desde sus tobillos hasta su esponjoso culo… al menos en mi mente lo siento muy esponjoso, y quiero tocarlo, apretarlo, morderlo…
Ponemos una serie y comenzamos a verla y a reír, a tomar mates. Ella extiende su brazo izquierdo sobre la mesa y apoya su cabeza, mirando la serie y cada tanto mirándome a mi, a lo cual no puedo evitar verla también.
Sin querer, en un momento pateo su pie por debajo de la mesa, a lo cual ella responde con otra patada, mientras nos hacemos los tontos viendo la serie.
Ella acaricia mi pierna con la suya, respondo de la misma manera, con mi mano izquierda toco su rodilla, a lo que ella responde frotando mi brazo con sus dedos, con las uñas, como arañándome.
Froto su rodilla con mis uñas y empiezo a subir un poco más, ella cierra los ojos y solo se concentra en sentir mis dedos, pero dejo de hacerlo sin decirle nada, quiero jugar con ella, me mira seria, pero continuamos viendo la serie.
Ella juega con sus dedos sobre la mesa, mueve su pelo por encima de su hombro, dejando su cuello descubierto, también estaba jugando conmigo, sentía que era un llamado.
Me levanto de la silla, y poniéndome detrás de la suya comienzo a masajear su cuello, se había puesto una crema cuyo aroma me fascinaba.
Ella se sienta derecha en su silla y comienza a mover su cabeza en señal de placer, le gustaba mucho sentir mis dedos en su cuello, siento una vibración, ella con sus labios hacía un sonido de "mmmm" el cual con el pasar de los segundos iba incrementando su volumen e intensidad.
Su piel se pone roja y cada vez mas tibia. Toma mis manos y las pone sobre sus enormes tetas, eran inmensas, sentía que iban a explotar, me provoca a apretarlas con suavidad, pero después un poco más fuerte, me acerco hasta su oreja y comienzo a suspirarle, darle besitos muy suaves, ella no para de hacer ese sonido que cada vez me ponía más loco, con su mano derecha me toma de la cabeza al mismo tiempo que yo le doy una pequeña mordida.
Ya no aguantaba más, acerqué mi mano hasta debajo de su vestido y empiezo a tocarla, siento con mis dedos el elástico de su ropa interior y no puedo evitar meter la mano para tocarla en profundidad.
Ella suelta un pequeño gemido, al mismo tiempo que curva su espalda, puedo sentir su humedad, tenía un mar entre sus piernas.
Ella se levanta y se coloca mirándome de frente, acerca sus labios a los míos, pero no me besa, mira hacia abajo y nota que yo estaba "emocionado". Coloca su mano en mi bulto y lo sostiene con firmeza, mientras vuelve a mirarme a los ojos.
Yo noto su mirada llena de placer, de gusto, ella nota lo mismo en mi. Se acerca más y muerde mis labios, a lo cual respondo sosteniendo su culo con firmeza, puedo sentirlo tal cual era en mi mente, muy esponjoso y suave.
Ella toma mi mano y me lleva hasta su pieza, me acuesto boca arriba en su cama, mientras comienza a besarme desde mi boca hasta el cierre de mi pantalón, el cual abre y después baja.
Besa la cabeza de mi pene por encima del bóxer, lo cual me hacer hervir, y mientras sigue besándome hacia abajo, me quita el bóxer, su mirada era demasiado intensa, llena de placer, me calentaba demasiado. Comienza a lamer mi pene como si fuese una paleta, de arriba hacia abajo, jugando con la punta de su lengua, metiéndolo hasta el fondo de su garganta, podía sentir su campanilla sobre la cabeza de mi pene.
Sigue bajando y comienza a besar muy suavemente mis testículos, una tortura para mi, sentía una mezcla de cosquillas y placer, imposible de explicar. Aprieto las sábanas en señal de que lo que ella me hacía sentir era muy intenso, no puedo evitar soltar pequeños gemidos. Comienza a pajearme con sus tetas, rebotando sobre mis testículos, fue un placer inexplicable.
Ella termina de hacerlo y se acerca hacia mi, su mirada estaba llena de morbo, su boca llena de saliva, muerde sus labios y luego besa los míos.
Luego ella se acuesta boca arriba, y yo voy bajando, bajo un poco su vestido para descubrir sus enormes y jugosas tetas y comienzo a chupar sus delicados pezones, ella gime, mientras sigo acariciando sus pezones con la punta de mi lengua, sigo bajando hasta llegar hasta su zona íntima, levanto un poco su vestido, ella levanta sus piernas, veo su tanga color negra, comienzo a besarla por encima, ella ya no aguanta las ganas, necesita que se la chupe, me lo pide, lo desea. Pero no se la quito, solo la hago a un lado para ver su vagina, era hermosa, carnosa, ardo en deseos de chupársela, pero tomo mi tiempo para admirarla.
Estaba empapada, se había enrojecido… no aguanté más y comencé a lamer su clítoris, tallarlo con la punta de mi lengua, mientras con mis dedos abría suavemente sus labios, le pasaba la lengua como si fuese el helado más sabroso que probé en mi vida. Ella no daba más, sus gemidos se convirtieron en gritos, apretaba sus pezones con la punta de sus dedos.
Podía sentir como su vagina se empapaba cada vez más, eso me excitaba demasiado.
Lentamente introduje un dedo dentro de su vagina y comenzó a curvar su cuerpo, gemía muy fuerte, mientras seguía lamiendo su clítoris como si estuviese tomando agua, entre más se mojaba se la chupaba con más intensidad.
Ella tomó mi cabeza, controlaba todos mis movimientos, eso me ponía como loco.
De repente paro de hacerlo y ella comienza a sacarse el vestido, yo me saco el pantalón, ella me empuja para tirarme a la cama y se sube arriba mío, coloca mi pene en su muy húmeda vagina y lo introduce suavemente, al mismo tiempo que exclama un gemido muy placentero.
Comienza a moverse de adelante hacia atrás de una manera lenta, mientras muerde sus labios, eso me volvía loco. Después de unos segundos, comienza a moverse un poco más rápido y con intensidad, noto que sus tetas se mueven delante mío, rebotan sin parar, no pude aguantar más y las tomé con mis manos, ella sigue gimiendo, le doy un par de nalgadas, a lo que ella responde gimiendo fuerte, lo hice un par de veces más, ella me provocaba a hacerlo, no muy fuerte, pero sabía que le gustaba mucho.
Ella se sienta de cuclillas encima mío y comienza a saltar sobre mi pene, dándome unas estampidas muy placenteras, se puso como loca, salvaje, verla así me llenaba de placer.
Ella se pone en posición de perrito, quiere que se la meta por atrás, yo introduzco mi pene mientras la tomo de su cintura, ella exclama unos gemidos muy placenteros. Puedo sentir su hermoso y esponjoso culo rebotando enfrente mío, una sensación inexplicable. Se lo aprieto, comienzo a recorrer su espalda con mis manos, acariciándola… sujeto su pelo, comienzo a penetrarla mientras le doy unos tirones, ella no aguantaba más y yo tampoco, necesitaba expulsar todo lo que estaba acumulando.
Le digo que ya no aguanto las ganas de acabar, ella se pone de rodillas enfrente mío, sujetando sus enormes y jugosas tetas con las manos, abre la boca sacando la lengua, esperando que se la riegue toda en la cara y sus pechos. Mientras yo sigo sacudiendo esperando acabar, ella comienza a succionarme los testículos para seguir estimulándome, eso fue el colmo, no aguanté más y exploté en un orgasmo maravilloso, nunca imaginé que alguien me haría acabar de esa manera.
Me quedé sin fuerzas de lo intenso que fue, y mientras yo respiraba fuerte, ella siguió chupándomela.
Nos quedamos acostados haciendo cucharita, acariciándonos, besándonos por un rato, pero ya era hora de irme, su familia estaba a punto de llegar.
Nos vestimos, ella me acompañó hasta el portón. Nos despedimos con un abrazo y un beso en la mejilla como siempre, esperando el día de volver a vernos y repetir lo que había sucedido… O al menos eso imaginaba yo…
Por ahora esto no es más que una fantasía… espero que algún día se convierta en realidad.