Segunda parte y final de estos mini relatos de experiencias vividas durante una etapa de mi pololeo.
Resumiendo un poco, mi vida sexual se inició a los 18 años, saliendo del liceo, relaciones amorosas hasta el momento de este relato eran 3, dos hombres y una mujer. Este era mi tercer pololeo, llevábamos casi 3 meses, fue todo muy rápido, creo que con la edad, más buscaba experiencias sexuales y alguien con quién llevarlas a cabo, sin desmerecer los sentimientos y amor que sentía en el momento de estar con esa persona.
Bueno, entrando ya la universidad, eran unas semanas intensas en lo académico, lo único que me desestrezaba era estar con él. Podría decir que marzo-abril para mi fueron, estudios y sexo, no tenía otras cosas en mi mente. Al igual que yo, él también había entrado a la universidad pero no era la misma, por lo tanto teníamos que buscar los momentos para vernos en la semana o solo los fines de semana, esto último fue lo que más se dio.
En ese entonces era una chica muy tímida, no me gustaba exponerme a temas sexuales, no estaba tan de moda el enviar fotos, por suerte, y creo, que en ese entonces, whatsapp tampoco tenía la opción de videollamadas y esas cosas. Un día conversando con él, de la vida, comenzamos a hablar como era recurrente, de sexo y me dice que le gustaría tener una foto mía o un video… yo intenté desviar la conversación pero él insistía, le dije que no me nacía hacer eso, me generaba desconfianza, no con él, sino que si alguien le roba el celular, o algún amigo lo ve… Sentí que no le había gustado mi argumento.
A los días, muy ingenua de mi parte, por complacerlo, decidí hacerme una foto, traté que sea un desnudo no tan explícito… lo pensé mucho y le pregunté dónde estaba y con quién estaba… él me dijo solo, iba llegando a su casa… Le respondí que, cuando llegase a su casa, me avisara que le iba a enviar algo. Me dice ya llegué… no le creí, le dije que me mandara una foto… si había llegado, me puse muy roja y nerviosa, le dije ya toma… y le envié la foto… su reacción fue enviarme caras de sorprendido, corazones… igual, aunque en ese momento me había sentido algo presionada, me gustó su reacción… a los minutos le pregunte: ¿y, te gustó el regalo? a lo que me responde enviándome una foto, diciendo mira… era el acostado masturbándose… le dije que forma coqueta, que era un pervertido… conversamos mientras él se masturbaba, le preguntaba que le gustaba de la foto, si se sentía rico, etc… al acabar, sentí algo de satisfacción.
Nos juntamos a los dos días en mi casa, al instante ya estábamos sacándonos la ropa en mi cama, cuando quería chupárselo, me para y me dice, oye… y si nos grabamos…? le respondí que no sabía, me daba vergüenza, insistió y yo con la calentura le respondí que si pero que lo borraría después, al terminar…
Él toma su celular, comienza a grabar mientras se lo chupaba, me daba indicaciones, quería que me metiera todo su pene en la boca, yo obedecía, le lamia sus testículos mientras lo masturbaba, miraba hacia arriba y estaba ahí con el celular, me daba un poco de vergüenza pero seguía haciéndole sexo oral.
Ya era turno que yo lo grabara a él, así que el bajó a chupármela, mientras intentaba grabar, cosa que me costaba mucho porque me estaba gustando mucho como estaba pasando su lengua por mi vagina y como metía sus dedos. Así que, no fue mucho lo que lo grabé.
Rápidamente, él toma el control del celular, yo me subo encima de él, todo mientras grababa, yo ya había obviado la grabación y solo estaba disfrutando, me movía arriba de él y saltaba mientras me afirmaba de su pecho. Ya era momento de girarme, y cabalgar de espaldas a él… fue donde acabé la primera vez. Paramos unos segundos, él quería darme en cuatro, me puse en la posición y sentí como abría mis nalgas y metía su pene y comenzaba a darme, fue muy intenso, mientras lo hacía me pregunta con una voz muy agitada, si me podía grabar recibiendo su leche en mi boca, le digo que sí, me giro y abro la boca y veo como con una mano sostiene el celular y con la otra se masturbaba para acabar, cuando acerca su pene a mi boca yo cierro los ojos y siento su semen caliente cayéndose por mi boca, algo alcancé a tragar, el resto se caía por mi boca a mi cuello y pecho. Le digo aún con la leche en mi boca que ya cortara la grabación, él la detiene y deja su celular y yo me limpio el resto de semen que me quedaba, me acosté, tomé el celular, quería ver cómo había quedado la grabación.
Estuvimos riéndonos, con una mezcla de calentura y vergüenza viendo el video, le dije que lo borrara a lo que él accedió, fue una experiencia muy morbosa y deliciosa la verdad.
Después de unos días que seguían en la tónica de estudio en la universidad y sexo cuando se tenía la oportunidad, pudimos toparnos un día jueves en la tarde, nos fuimos a comer algo, estuvimos bastante rato conversando, ya era muy tarde, el metro ya había cerrado, solo nos quedaba las micros (buses), tomamos una a eso de las 1 am, iba muy poca gente, nos fuimos a sentar en los últimos asientos. En ese lugar del bus, no había gente, y tampoco tenía visión el chofer, mientras yo miraba por la ventana, él, comienza a tocarme las piernas… yo quedé pensando, qué quiere… me besa y trata de tocar mi vagina por encima del jeans que llevaba puesto.
Me pregunta si no me calentaba la situación… yo media nerviosa le dije no sé… un poco…l e digo que si quiere masturbarme, va a ser difícil con el jeans y no me los iba a bajar… a lo que pregunta… y tú me la puedes correr a mi? me reí en un principio, pero accedí… miraba para todos lados mientras él se sacaba su pene por el cierre del pantalón y ponía su mochila en un costado, lo comienzo a masturbar, poco a poco… me dice que no viene nadie y nadie estaba viendo, que se lo chupara.
El morbo que me daba esa situación me tenía caliente así que dude un segundo… miré a los costados y se lo comencé a chupar, trataba de chupársela y masturbarlo al mismo tiempo, el gemía muy despacio mientras me tocaba mis tetas por arriba y luego por debajo de la ropa. Me sentía muy mojada, me estaba gustando el hacerlo en ese bus. Estaba todo dado para que se pudiera hacer, a los minutos me dice que se va a ir, le digo que ponga la mano mientras lo masturbaba hasta que acabó, su semen saltó mucho y gimió, pero con el ruido del bus, no se sintió, limpió sus manos y se metió su pene aún erecto en su pantalón mientras yo miraba por la ventana, aún sin creer lo que había hecho.