Hola queridos lectores aquí les dejo la segunda parte de mi relato, espero la disfruten tanto al leerla como yo al vivirla.
Eran las 12 de la noche cuando se escuchó el coche de mi papá estacionarse frente a la casa, yo ya tenía las luces apagadas para que pensaran que estaba dormida desde temprano, entraron sin hacer mucho ruido según ellos para no despertarme, mi madre le decía a mi papi que se había divertido mucho y él le contestó:
–Todavía te falta lo mejor.
Se metieron a su habitación y cerraron la puerta, yo me levanté como resorte para no perder ningún detalle del mejor espectáculo de toda mi vida. Abrí la puerta, ya saben, como cirujano y cuando me asomé me di cuenta que la rendija que había hecho en la puerta me brindaba una visión plena de la cama de mis padres, aunque estos no estaban sobre ella todavía.
El primero en salir a escena fue mi padre, completamente desnudo y se acostó al centro de la cama, en ese momento descubrí porque mi mami lo quería tanto, je je, tenía el tronco completamente erecto, grande y grueso como un tolete, se le veía como le resaltaban las venas formando un rico relieve en la piel de esa majestuosa verga, en la base dos huevos enormes que se movían arriba y abajo cuando mi papá se estimulaba con su manos con movimientos cadenciosos hacía arriba y abajo.
Después salió mi madre con un una diminuta tanga negra que se le perdía entre sus grandes nalgas y un bra del mismo color, de inmediato se abalanzó sobre la verga de mi padre, primero dando ligeras lengüeteadas en la cabeza y bajando muy sensual hasta los testículos, después de dos o tres movimientos de la misma forma, se metió todo aquel pedazo de carne a la boca, le costaba trabajo, pero mi padre muy atento le ayudaba empujándole la cabeza hacia abajo para que se la comiera toda.
Mi mami se arqueaba del esfuerzo por meterla toda en su boca, incluso le brotaban algunas lágrimas del esfuerzo que estaba haciendo, así permaneció por varios minutos, mientras que mi padre disfrutaba al máximo viéndola detenidamente como se esforzaba por no dejar nada afuera, después sin hablar mi papá se levantó y acomodó a su hembra en cuatro, pensé que ya la iba a penetrar, pero no fue así, con la mano izquierda le levanto el culo en posición de cabrito al borde del precipicio y le empezó a dar una lengüeteada por toda su vagina, le chupaba como desesperado mientras mi madre se retorcía de placer, su lengua subía hasta terminar en su ano en donde mi padre sacaba la lengua e intentaba introducirla en ese agujero como si fuera un pene.
Se notaba que mi mamá le gustaba porque se empujaba con un ritmo muy sensual para que le entrara un poco más la lengua, ya estando bien ensalivada la pucha, llegó el momento más esperado, mi padre le metió poco a poco su gran verga que por lo lubricado que estaba la zona entró como un cuchillo en la mantequilla haciendo que mi madre gimiera de placer.
Así le estuvo bombeando por varios minutos, las nalgas de mi madre le rebotaban muy rico haciendo olas por las embestidas que le daba su macho, por momentos le metía solo la punta del pito y después de un empujón violento trataba de meterlo todo de un solo golpe, lo sacaba y repetía la misma acción, creo que a mami le gustaba porque hasta gritaba de gusto, mi papá la tomaba por las caderas y se apoyaba para que no quedara nada fuera, mamá le decía la siento hasta el ombligo sigue así papi y él más se emocionaba subiendo el ritmo de las metidas hasta que hizo una pausa y después se acostó algo cansado porque jadeaba mucho.
Mi mamá al verlo acostado, le empezó a sobar la verga y después volvió a meterla en su boca, nuevamente le dio una mamada magistral(jamás pensé que mi mamá fuera tan golosa y tan puta) luego besaba apasionadamente a mi papá, volvía a mamar el tronco un rato y volvía a besar a papá creo que quería que probara sus propios jugos, después de un rato se acomodó arriba de papá, pero poco a poco se fue sentando en la verga, él ya solo estaba acostado y la que estaba haciendo toda la chamba era ella, subía y bajaba muy rico, estaba completamente mojada lo que hacía un ruidito muy excitante.
Desde donde yo veía se apreciaba perfectamente como le entraba cada centímetro de carne a mi progenitora, la verdad no sé cómo le cabía todo eso en la cola, pero ella lo disfrutaba bastante y yo también al verla, tanto que ya estaba escurriendo por mis piernas mis propios jugos, tenía ganas de tocarme en ese instante, pero decidí esperar a estar en mi cama.
Hay algo que los excitó mucho y a mí también, fue un diálogo que justo cuando más emocionados estaban inició mi papá, preguntándole a mi mamá que de quién era ese culote, mi mamá respondió “tuyo mi amor” papá respondió “sólo mío”, pero la sorpresa fue cuando mamá dijo:
–Bueno si un día me descuidas tendré que dárselo a otro.
Eso como que prendió más a mi papá porque noté que subió la intensidad y le apretó las nalgas fuerte a mi mamá al mismo tiempo que se las abría, yo alcanzaba a ver el ano de mi mami. Papá le volvió a preguntar.
–A quién se lo darías. Mamá contestó a cualquiera, papá más se calentaba. Seguía el interrogatorio.
–Y se las vas a mamar igual que a mí. Ella contestaba.
–Mejor.
Creo que ese juego excitaba sobremanera a mi papá ya que fue cuando más caliente lo vi, le pidió a mamá que se pusiera nuevamente en cuatro la cual obedeció al instante y vi que la verga de mi papá casi explotaba de tan hinchada, se la metió a mi mami la cual sintió el poder y empezó a gemir muy puta, papá le metió un dedo en la boca mientras le metía la verga en la panocha creo que los disfrutaban mucho eso ya que estaban en el punto máximo del acto, creo que imaginaban que el dedo que le tenía mi papá a mi mamá en la boca era la verga de otro hombre ya que lo mamaba como si lo fuera, en esta posición ya no aguantaron mucho porque después de una cuantas embestidas mi papá explotó lanzándole un chorro de leche en la panocha y el resto en la espalda y nalgas, finalmente se desplomaron los dos sobre la cama y yo aproveché para regresar a mi habitación…
Me gustaría cogerte así como se cogena tu mami