Hola a todos. Soy Alonso. Vivo en el norte de Chile, trabajo en la minería, soy homosexual, lo que me costó distanciarme de mi familia, que de hecho viven en otra ciudad.
Vivo con Jordan, mi pareja; que también por su orientación sexual, vive alejado de su familia, en resumidas cuentas, estamos los dos con amigos con los que compartimos ya nuestra vida. Vivimos más de 4 años juntos, incluso trabajamos juntos en la minería y por obvias razones, nadie conoce o sabe que somos ya pareja homosexual.
En nuestro trabajo, empezamos un nuevo contrato y tuvimos que traspasar algunos trabajadores de un área al área que empezamos a trabajar ahora. Y está Samuel amigo de ambos que vive en otra ciudad, pero, que quiere quedarse en la ciudad para poder trabajar sin tener que trabajar.
Samuel, es muy atractivo, aunque siempre lo hemos visto con ropa de trabajo, aun así se nota que tiene buenas piernas, y un buen culo. Es simpático y nos llevamos muy bien.
En el trabajo, pasamos harto tiempo juntos, mas los fines de semana, en que la rama administrativa o está en obra, y solo estamos nosotros en las oficinas y el resto de la gente que está en la obra en terreno; lo que significa que las instalaciones quedan a disposición de nosotros.
Donde está ubicada la obra, hace mucho calor, de echo está enclavada en la cordillera en el desierto mismo. Por lo que yo opto con cambiarme de ropa, no si antes darme una ducha. Así que entrada la tarde, tomo mi mochila y voy al pabellón donde están las casas de cambio y me ducho.
Eso lo hago todos los días de los fines de semana, y solo porque no hay nadie mas que en la faena; nadie mas aparte de Samuel. Él ya sabía que lo hacía y que resultaba más cómodo, y que en algún momento lo haría, que igual resultaba cómodo, terminar el turno algo mas cómodo, y con ropa también más cómoda. Y un fue justo este fin de semana, que le dejo un mensaje en su celular avisando que me iba a perder un rato, y que el quedaba a cargo, por cualquier cosa, pero, no me respondió, me dejó el visto en el WhatsApp. Como no me demoro mucho solo me fui.
Estaba en la ducha, me estaba sacando la ropa para dejarla ya ordenada, me estoy metiendo en la ducha, cuando siento veo que Samuel, que viene a hacer lo mismo, y me dice que iba a aprovechar de ducharse en ese momento, ya que estaba toda la faena en el comedor almorzando, y que nadie iba a ir a las oficinas.
Ya no había nada que hacer, yo desnudo en la sala de cambio listo para entrar a la ducha y el quitándose la ropa para los mismo. Cuando de repente siento un grito estremecedor desde el cubículo donde se duchaba Samuel, el agua en esa ducha salía congelada, ni mas ni menos, simplemente congelada y mas fría, caso distinto era la ducha donde yo estaba, porque después de revisar las demás duchas, la que yo tenía era la única que tenía agua tibia, para ducharse. Este loco no midió nada y no hayo nada mejor que meterse en mi ducha conmigo aun duchándome; solo se metió y empezó a ducharse.
No sé si por el agua fría, no se dio cuenta o no se quiso dar cuenta, pero, la cosa es que terminamos los dos desnudos duchándonos en un espacio de nos más de un metro cuadrado, con roces y más roces, que analizado la situación no nos molestó en lo más mínimo; considerando también que yo hago lo mismo muchas veces con mi pololo. Pero, en un momento se dio cuenta y se dio cuenta justo cuando estábamos de frente, mirándonos, y nuestros penes también mirándose de frente y apuntándose.
Su cara era un tomate, mi cara por otro lado también, porque entre todo nos miramos no solo a la cara, sino que también nos miramos la entrepierna y de parte de los dos, con gusto y fomentando una erección.
Yo abrí la ducha, y salí, el quedó ahí un rato y ninguno dijo algo, solo él se secó se vistió y salió después de mí. Esa tarde, no hablamos del tema, solo nos avocamos al trabajo, pero, ya terminando el día, lo invito a un café en la oficina, ya que no habíamos almorzado, y nos tomamos un café y obviamente el recordó lo de la ducha y lo puso en conversación. Yo le dije que no se preocupara, que no había sido nada, que, siendo hombres ya adultos, podíamos tomarlo con más ligereza, como lago fortuito, pero, no fue para mas que sacar el tema todo el resto de la tarde incluso de regreso a la ciudad, porque, bajamos los dos en camioneta. Pero ya era con menos incomodidad incluso con bastante más gracia. Esto fue solo el primer día en que estábamos solo nosotros, nos quedaban aún los días sábado y domingo. Días en que yo por lo menos hago lo mismo e imagino que Samuel iba a hacer lo mismo de aquí en más.
Al día siguiente, molestamos toda la mañana con lo que había pasado en la ducha, incluso Samuel señaló que no le había parecido tan mal estar en la misma ducha y que si la ese día había nuevamente una solo ducha con agua con temperatura para una ducha, no iba a dudar en entrar, aunque yo estuviera dentro, después de eso nos reímos, y le dije que entonces nos duchábamos juntos, y que fregaba la espalda.
En la tarde, los móviles salían con la gente hacia el comedor, yo pedí algo para servirme en la oficina ya que tenía mucho trabajo, y Samuel que tenía tanto trabajo como yo, hizo lo mismo; mientras llegaba la comida, me fui a duchar para cambiarme de ropa, ya estaba en la ducha y Samuel no hizo ni el intento de revisar las demás duchas si no que se quitó la ropa y se metió en el cubículo en el que estaba yo. Entro se mojó y se duchó y entre eso se esmeró en que su cuerpo se rosara con el mío, en que nos tocáramos los dos, en eso de que la ducha era rápida, el espacio de mero cuadrado se nos hizo chico, los dos somos de contextura grande. Por lo que en varias ocasiones mi pene quedó sobre sus nalgas o su pene sobre las mías o, mi pene se cruzó con el suyo, y eso son mas que otra cosa solo nos excitó y mucho. Resultado de eso, tuvo una erección, una exquisita erección, y yo no me quedé atrás y también dejé que mi pene se parara hacia él. Nos miramos y por primera vez en días tuvimos miradas entre nosotros derechamente de dos hombres con ganas de sumirse en sexo gay.
El agua nos caía encima, estábamos los dos sin nada de ropa, y evidentemente calientes y yo no quería desaprovechar esa oportunidad, era hacer algo para que eso pudiese continuar el curso que veíamos ahí o, iba a ser un quiebre o en el mejor de ese caso, seguir siendo amigos. Nos acercamos más, ya nuestros penes se besaban abajo, duros como roca. Y nosotros no acercamos mas hasta que sin decirle nada, lo tomé por la cintura y le di un beso, beso que el correspondió apegándose a mi y tomándome el por la cintura, y besándome mas rico aún. La ducha siguió un rato más, tallamos nuestros cuerpos en la ducha nos tocábamos todo y por todas partes, me tomaba y le tomaba el pene, igual que su trasero, y el, él mío. Tuvimos nuestro primer encuentro lo mas cercano al sexo, pero no pasó de ahí, terminamos con un rico beso, bien apegados para salir de la ducha y arreglarnos para volver al trabajo.
En lo que quedó de la tarde solo nos dedicamos a trabajar, y solo nos hacíamos uno que otro cometario hasta que llegó el momento de irnos cada uno a su casa, pero, teníamos que irnos los dos en la camioneta de la empresa. Cuando íbamos de camino a la ciudad, no emitimos palabra, solo, el conducía y yo iba en el asiento del lado. El se quedaba con la camioneta, por lo que tenía que ir a dejarme a mi casa, así que, de camino, lo único que dijo fue: “me encantó lo que pasó y lo que hicimos hoy en la ducha. Espero que podamos repetirlo nuevamente”. Durante la tarde, fue hablarnos por WhatsApp, y escribirnos de lo que hicimos y cuanto nos había gustado y que más daba, aún nos quedaba un día, nos quedaba aún el día domingo antes en que podríamos hacerlo nuevamente, antes de terminar el turno y despedirnos por 14 días.
Como saben y entendieron, yo tengo pareja y vivo con Jordan hace más de 4 años, y hacemos vida “marital” los dos y lo llevamos muy bien, aunque nadie fuera de nosotros, mucho menos en el trabajo y resulta que Samuel, es amigo de Jordan hace algún tiempo, y aun así él no sabe de nuestra orientación, solo que somos amigos Jordan y yo hace mas tiempo que ellos dos.
Obviamente en la intimidad con Jordan, somos dos hombres teniendo sexo o haciendo el amor, sin una posición sexual fija, ese sería que tanto él me hace el amor, como yo se lo hago a él, a mi me gusta estar detrás de él como que él esté detrás de mí, nos hacemos sexo oral ambos, en cualquier parte de la casa y eso nos parece bien y normal. Y con eso me preguntaba, que pasaría con Samuel, si llegase a pasar algo más eso si llegaba a pasar. Él me había dicho que estaba en pareja, no se si hombre o mujer, pero que tenía pareja, y de ser así estábamos los dos engañando a nuestras parejas, pero, eso lo tendría que averiguar me imagino.
Pasamos al día domingo, llegamos, hicimos la visita a terreno de rutina, llegamos a la oficina, y empezamos a trabajar la diferencia es que, estando solos, la forma de saludarme de Samuel fue totalmente diferente y me pilló desprevenido. Cuando quedamos solos se levantó se acercó a mi escritorio y parade detrás me tomó los hombros y llamándome me dio un beso y me dio los buenos días y a mí no me quedó mas que corresponder gratamente a ese beso. Se sentó y mientras trabajamos llegaba el tiempo de aclarar las cosas (pero, eso va a ser parte de un relato aparte, porque es una historia aparte) quiero contarles lo que fue el domingo.
Trabajamos toda la mañana y entrada recién la tarde, la gente partía a almorzar, a mi me daba cosas, decir que iba a cambiarme ropa previa ducha, por lo que podría ser con Samuel, y cuando me dice que aprovechemos que todos están en el comedor, vamos a la ducha y nos cambiemos de ropa, pero, ante de eso, que por cierto quería ir y mas con él, había cosas que tenía que conversar.
Entre todo el me dice que hasta ese finde semana, no había tenido tendencias homosexuales, que siempre tuvo parejas mujeres, pero, su última relación termino de mala forma, y abusando de la confianza que había entre nosotros, dejó fluir un sentimiento distinto que no paso de molestarle y que si, le incomodaba que sabiendo que yo tenía pareja (por el anillo en mi mano, el mismo por cierto que tiene Jordan en su mano) pudiese hacernos algún problema, yo le dije que efectivamente tenía pareja y no sabía si era mejor que dejáramos esto hasta ahí y que siguiéramos siendo tan amigos. Quedamos en eso y yo “mas tranquilo” me fui a duchar para almorzar después.
Me fui a la ducha, estoy preparándome para entrar y Samuel entra se saca la ropa entra a la ducha y me invita su pene estaba durísimo y el mío no tardó en ponerse igual. Caliente entré a la ducha, lo tomé y le di un beso, lo apoyé en la pared, y le pregunté qué a que íbamos, que íbamos a hacer, y me dijo, que no importaba que quería que fuese eso mismo cada vez que pudiera ser y conocernos más. Cuando le pregunté por hacer el amor o tener sexo, me dijo que no sabía, pero que gustoso lo iba a averiguar. Que bien quería saber lo que es ser gay y con eso ser activo o pasivo, pero conmigo, que si iba a entregar su culo lo entregaría a mí, y que el único culo que quería es el mío y tomando mi pene, no hizo más, se arrodilló y con dificultad me chupó el pene, lo chupó tan rico que recibió mi leche en su boca, haciendo arcadas se levantó y sin querer botar mi semen de la boca, lo tragó y yo solo lo besé para quitar lo que le quedaba en la cara. Le pregunté si le había gustado, y me dijo que “le había encantado”, pero, su pene aún estaba ahí, duro, apuntándome directamente e imaginé que deseosa de que la chupara y le dije que ahora quería yo chuparle el pene y tomare su leche.
Su pene se puso mas dura, y me agaché para chupar semejante verga, fue meterme y sacarme ese pedazo de carne de la boca, mientras sujetaba sus nalgas y hurgueteaba en su ano. Mientras caía el agua sobre nosotros siento como descarga su pene en mi boca, se lo seguí chupando hasta que se relajó me levanté y me dio un beso y me dijo que, teniendo mis dedos en su culo, quería saber como era ser penetrado, que quería que yo lo penetrara, despacio pero que lo penetrara, pero yo también quería que me penetrara, pero no en ese momento porque ya se nos había hecho nada el tiempo y la gente empezaba a volver.
Ese día fue increíble, amo a Jordan me gusta mi pareja, pero, Samuel de una manera muy distinta se equipara a él, Jordan es más bajo de estatura que yo, me hace rico el amor, pero, le gusta más que se lo haga yo, es más pasivo que versátil incluso, pero me gusta. Y Samuel es mas fornido, es de mi estatura, definitivamente los dos son exquisitos. Y en el sexo estoy por contarles como es.
Samuel está recién incursionando como homosexual, y se nota que le gusta, ahora quiere ser penetrado y obvio que le daré en el gusto, tiene un culo exquisito, y quiero ver que tanto le gusta penetrar porque obviamente quiero que me penetre, lógicamente después de mamárselo bien rico y el a mi si quiere. Pero, no teníamos lugar, ya la semana se terminaba y solo nos quedaba el día lunes en que terminaba el turno, que por cierto salíamos mas temprano, ya que todos se van a otra ciudad incluso Samuel, que mientras está en Calama, la empresa les arrienda un hotel campamento para después dejarlo para irse a su ciudad.
El día lunes, la gente empieza a dejar las casas de cambio, a eso de las 11 para después empezar a trasladarse al campamento para irse al aeropuerto y viajar a casa. Si que no nos íbamos a poder ver para despedirnos o dejar algo mas en claro. Así es una de las revisiones a terreno, conversamos, me dice que tiene vuelo recién hasta las 20 horas y que tenía que dejar el campamento a las 12 y que iba a tener que ver que hacía hasta esa hora antes de viajar y que iba a tener que dar vueltas. Yo bajaba con el a la ciudad, el me tenía que dejar en mi casa y dejar la camioneta en la oficina central de la empresa. Y después iba a tener que divagar por la ciudad, pero, le comento que yo tengo un departamento desocupado, que puede ocupar antes de que tenga que irse y accede, pero, no solo. Así que acompañé y nos quedamos en el departamento.
Fue solo entrar al departamento dejar lo que llevábamos en las manos en el suelo, y abalanzarnos uno al otro, nos besamos, nos besamos, nos tocamos, de a poco nos quitábamos la ropa, quedamos solo en bóxer, con una evidente erección de ambos, con la calentura caímos al sofá en la entrada del departamento, estaba el sobre mí, y lo aparto solo para decirle que, de cualquier cosa, no podíamos meter mucha bulla, dicho eso seguimos besándonos, muy rico. Yo solo quería sacarle el bóxer, verlo desnudo. Me levanto y me quito mi bóxer y él me toma el pene y me masturba. Me sienta en el sofá y me masturba, para meterse el pene en la boca y chuparlo bien rico. Lo chupaba, lo mamaba de forma espectacular, pero, no quería acabar aún, así que le pedí su pene para masturbarlo y chupárselo, terminé de quitarle el bóxer yo ya a esa altura acostado y él se puso a mi lado y metía su pene en mi boca, se veía exquisito. Se sentía exquisito era exquisito.
Le chupaba el pene, y el se acomodó y en un 69 me chupaba el pene también, tenía su pene a la profundidad de mi tráquea, si es que no mas profundo y Samuel buscaba tener mi pene mas profundo en su garganta, y de tanto meter y sacar el pene los dos casi al mismo tiempo acabamos. Hacíamos arcadas, pero no nos quitábamos el pene de la boca, solo lo seguíamos chupando. Hasta que cansados, se acomodó a mi lado nos besamos mezclando el semen que teníamos en la boca.
Descansamos un rato, y me dice después que quiere que lo penetre, quiere irse a su ciudad, sintiéndome en el culo, los 14 días que no va a estar aquí. Me levanté, lo tomé y lo llevé darnos una ducha, entramos a la ducha, y el dándome la espalda me presenta sus nalgas, pero, yo no quería penetrarlo ahí solo quería refrescarme un rato, pero si quería contemplar su culo, ver su ano y meter mi lengua y escucharlo gemir, eso antes de meter lentamente mi pene.
Salimos de la ducha (rápida, por cierto) y nos fuimos a la cama, el se puso en el borde de la cama en cuatro esperando que lo desvirgue, con mis manos abro sus nalgas y nuevamente paso y meto mi lengua, escucharlo gemir fue delicioso, y verlo así, en cuatro con las nalgas en alto esperando a ser penetrado es magistral. Tenía el culo tan dilatado que mi lengua entraba sin problemas le paso un preservativo, el mismo me lo pone, y acomodándose en cuatro en la cama, me pide que se lo meta, y mientras entraba, le digo al oído que no haga ruido, así que le ahogué el grito con un beso metiéndole la lengua hasta la garganta.
Mi pene, fue despacio abriéndose camino a través de ese culo exquisito, y por cada milímetro que entraba, gemía y para no escuchar su grito de placer metía la cara en la almohada y me pedía que siguiera, más y más, llegado un momento en que me pene entraba y ya no dolía solo lo disfrutaba y vaya que lo disfrutaba. Hicimos durar ese momento harto rato, entre besos, mamadas, penetraciones, hasta que no fue mas y el preservativo quedó lleno de mi semen, y su ano muy abierto, estaba dilatado y abierto, y mojado, el me saco el preservativo y dejó caer el semen en mi pene para chuparlo, me limpió el pene para acostarse al lado y besarme nuevamente.
Se da vuelta y apoya el culo en mi, y yo busco su pene, que está duro todavía, enorme y duro y le abro las piernas, y me pongo en cuatro para chupárselo, para lubricárselo, y mientras se lo chupo, lo miro hacia arriba y le paso un preservativo, y le pregunto: “te lo pones tu o te lo pongo yo” y me responde “tu pónmelo” plastifico esa verga, y me pongo en 4, el deja caer saliva e el ano, y dilata con su dedo, lo único que quería era que me ensartara con su verga y fue exquisito cuando por fin sentí ese pedazo de carne entrar en mi culo, entrar y salir su verga de mi culo, una y otra vez, me dio vuelta y con mi piernas en sus hombros, me partía el culo, hasta que acabó sentía el semen caliente que pasaba el condón, puso su pene en mis manos para que le sacara el condón.
Lo saqué, le quité el preservativo, le pedí que se pusiera boca abajo en la cama y levantara el culo, vacié el preservativo en su culo aun dilatado, y con su semen metí mi lengua para saborearlo entero y me dejé caer sobre el con su sabor en mi boca.
Ya llegaba la hora de salir al aeropuerto, no lo iba a ver por 14 días, nos -volvimos a duchar- os vestimos y lo fui a dejar al aeropuerto, lo pasé a dejar al Hall y antes de despedirnos fui al baño, y el me siguió, entramos a unos de los habitáculos y volvimos a besarnos. Para despedirnos mientras tocaba volver nuevamente. Después del beso en el baño, el tomó el avión y, nos volvimos a ver después cuando tenía que empezar un nuevo turno y si que llegó el turno y volvió Samuel y esperábamos los fines de semana y poder ducharnos para cambiarnos ropa, entre otra cosa.
Pero eso es otro turno para la otra parte de la historia.
Voy a subir luego la otra parte del relato. Nos leemos en el próximo relato a continuación de este.