Cuando me desperté eran casi las doce de la mañana, estaba algo aturdido y cansado, mi culito todavía se resentía de la doble penetración de la noche anterior, pero mi cara era de satisfacción morbosa, me gustó aquella situación, Rubén sabía ponerme a prueba y sabía darme el morbo que yo pedía constantemente, por cierto se había largado sin mi a la ciudad a descargar el camión, había sido considerado y amable conmigo y me había dejado descansar.
Me levanté y tome una ducha caliente que me sentó fenomenal, me vestí y baje al bar y por la hora que era ya casi tome un buen almuerzo con una gran cerveza que me acabo de espabilar y ponerme de nuevo al cien por cien , estaba preparado para todo lo que me pudiera venir encima ese día. Rubén todavía tardaría en llegar, por lo que di un paseo por la zona y volví a echarme un rato a esperar que viniera.
Eran sobre las seis de la tarde cuando una mano enorme y unos labios carnosos me cogieron de los huevos y me besaron respectivamente, me asusté, abrí los ojos era Rubén que había vuelto…
Yo: cabron me has asustado.
Rubén: todavía duermes o qué?
Yo: me había tumbado después de estar un rato esperándote y me he quedado sopa.
Rubén: cómo estás pedro? Ya recuperado?
Yo: si, si, gracias tío lo necesitaba, te lo agradezco.
Rubén: te vi algo cansado y decidí dejarte, total solo era llevar el camión y que lo descargaran. Por cierto he estado con unos viejos amigos españoles que trabajan allí, hemos estado comiendo juntos, me han hablado de un local muy bueno para tomar unas copas, les hable de ti y quieren que vayamos está noche a disfrutar un poco. Qué te parece? Podemos volver luego aquí pasar la noche y ya regresar a España…
Yo: uyyy… Qué tipo de local es ese? Y quiénes son esos amigos? Qué les has contado de mi? Qué te conozco.
Rubén: nada tío ya sabes, es un local ambiente gay, mis amigos son muy cachondos y tú eres un buen putito, no lo puedes negar, solo será tomar unas copas y seguir el rollo.
Yo: madre mía Rubén, te conozco pájaro, pero bueno hablando de morbo y fiesta, porque no ir, siempre tengo la opción de coger un taxi y volverme.
Rubén y yo nos duchamos, nos acicalamos un poco y llamamos a un taxi para que nos acercara a París, eran sobre las doce de la noche, el taxista nos introdujo por un barrio un tanto oscuro, de repente paro delante de un garito con una gran puerta y un gran cartel de neón, bajamos del taxi y en un rincón habían cuatro hombres que enseguida alzaron la mano a Rubén, nos dirigimos hacia ellos y Rubén me los fue presentando uno a uno. Este es Jean, un tipo de unos 60 años, corpulento, calvete y barba, barrigón, este es Luis me presento al segundo, un tipo de unos 50 años normal, con gafas, bigote más bien delgado y alto, este es Fran, bajito, gordete, tripon y este es Pierre un chaval de obre 28 años, fibradete, guapete, barbita y una buena melena, les choque la mano a todos ellos y pasamos dentro del local.
Una vez dentro, enseguida empezamos a tomar cubatas, el ambiente era oscuro, luces tenues, sillones alrededor de unas mesas, nos sentamos y entablamos conversaciones sin sentido, la música de ambiente todavía hacia más difícil escucharnos, los camareros medio en pelotas y un par de gogos bailando en dos atriles eran nuestra distracción. El tiempo iba pasando y los cubatas haciendo efecto, Jean el sesentón estaba a mi lado, me puso el brazo por mi cuello y con la otra mano empezó a acariciar mi paquete, yo no puse resistencia, mi rabo se puso a mil, me daba mucho morbo la situación, Fran que estaba al otro lado sin pestañear se abalanzó sobre mi y empezó a morrearme, estaba siendo sometido a todo tipo de tocamientos por ambos, mientras los demás miraban, incluso Rubén que me sonrió, después de un buen rato manoseándome, me propusieron pasar a la zona de reservados, allí nos llevamos los cubatas, unas cortinas cerraban una serie de cuartos, en donde había espacio para un par de sillones, un colchón redondo en el suelo y varios aparatos como un potro y una rueda con grilletes.
Entramos a uno de esos cuartos, todos menos Rubén, que lo había perdido de vista, nada más entrar mi cuerpo empezó a recibir caricias y manoseos de aquellos cuatro hombres, no tardaron en desnudarme por completo, y en segundos tenía a uno comiéndome el rabo, a otro morreándome, y a otro pasando su polla por mis nalgas, el otro se sentó y observo el espectáculo, parecía Pierre el más joven, enseguida estuvieron todos en pelotas, sus barrigas, sus cuerpos peludos, se restregaban contra mi, podía notar sus pollas rozándome, yo cerré los ojos y me deje llevar, el que tenía puesto por detrás , empezó a meter sus dedos en mi culo, notaba algo fresco, debía ser lubricante, porque entraban y salían sin resistencia seguían comiéndome la boca, los pezones, mi polla seguía siendo mamada por uno de ellos , de repente el que tenía detrás me empujó hacia una zona donde había un potro me recostó sobre él, me engrilleto las muñecas a unos salientes y me abrió las piernas, vi cómo se ponían uno detrás del otro en fila, el primero fue jean, puso su polla en mi culo presionó y empezó a follarme, la notaba gorda, no muy grande pero si muy gorda y dura, mi culo la recibió tranquilo, gozaba de ella, me molaba la situación, las embestidas fueron aumentando, los demás jaleaban, dale fuerte, romperle el culo, Pierre se levantó con su cubata y se puso delante de mí, acariciaba mi pelo y mis mejillas, mientras Jean seguía follándome y gimiendo, ahhh, ummm, cabrón que culito tienes, yo también gemía, porque gozaba como un putón, note como aquel hombre aumentó su ritmo y como sus gemidos fueron a más, sabía que iba a correrse, saco su polla , apartó a Pierre y me la dio a mamar, no hizo falta más que unas cuantas mamadas y lamidas a aquel pene para que jean empezará a descargar en mi boca, trague lo que pude, lo demás cayó al suelo, Luis me desató, el tipo delgado, se sentó en el sofá y me dijo que se la comiera, me arrodille y empecé a comerle la polla bastante larga, pero más delgada que la de Fran, mi boca enseguida empezó a lamer todo su tronco y tragármelo entre jadeos del tipo que suspiraba sin parar, mientras los demás me pegaban palmadas en las nalgas y acariciaban mi ano con sus dedos.
Después de un rato comiéndole la polla me dijo que me sentara sobre ella, se la agarró con una mano y me puse de espaldas a él y fui introduciéndomela, hasta que de un golpe me la metió, con sus manos agarró mis pezones y empezó a pellizcármelos y yo empecé a galopar sobre su polla que entraba y salía de mi culo dándome gran placer, ahhhh, sus pellizcos en mis pezones dolían, pero me excitaban, jean le hizo un gesto a Fran y le dijo follatelo también a este le caben dos pollas , no lo dijo Rubén? Y jean me alzó las piernas tumbando su espalda sobre su pecho mi culo con su polla dentro quedo a la vista de Fran, que se acercó con su polla bien dura y posicionó sobre mi culito, presionando fuertemente, yo grite varias veces, hasta que Fran introdujo su pollón en mi culo que ya estaba lleno con la polla de jean, entonces empezaron a moverse los dos, follandome sin pasión, yo tenía una sensación entre placer y dolor, pero no quería que dejarán de follarme, ummm ahhh, los gemidos se entremezclaban.
Pierre se puso al lado de mi cabeza, dejo caer un escupitajo sobre mi boca y después paso a lamerme los labios y morrearme, aquel muchacho era un tanto rarito pero me gustaba, era un pion, entonces sin bajarse el pantalón se sacó la polla por la bragueta, por cierto gran pollón, lo arrimo a mí boca y empecé a lamerle el capullo, después presionó mi cara, para que abriera mi boca e introdujo toda su polla en mi garganta, casi me ahoga, pero pude recuperar el aliento y seguir mamándosela, la cara de Pierre se transformó, era el placer escenificado, cerró los ojos y temblaba mientras se la comía, mientras tanto mi culo seguía abierto por las pollas de aquellos tipos, el dolor había dejado paso al placer, y ya estaba completamente dejado a dejarme hacer lo que fuera, aquellos hombres, me pusieron de todas las formas posibles, me metieron sus pollas tantas veces como se les puso dura, sus lefadas, cubrían desde mi cabeza hasta mis pies, pero aún les quedaba cuerda y me pusieron de rodillas, agarrando sus pollas entre sus manos y haciéndome tragármelas de una haciendo rueda, Pierre no participo, se hecho a un lado a observar, así estuve chupando sus pollas más de media hora, me dolía las quijadas, hasta que uno a uno se fue corriendo en mi boca o sobre mi.
Estaba un poco ido, pringoso, extasiado, pero con ganas de placer y de satisfacción, me había corrido más de tres veces y sin llegar a tocarme, aquellos hombres me habían hecho sentirme la zorrita más puta del mundo, su esclavo, su objeto sexual y eso me gustaba tanto que mi placer fue inmenso. Se limpiaron poco a poco y se vistieron, uno a uno se fueron marchando de allí yo me quedé tumbado sobre aquel colchón redondo del suelo con los ojos cerrados, casi sin respiración, note que me tocaban, abrí los ojos, era Pierre que pasaba sus manos limpiando mi cuerpo con toallitas, me guiño un ojo, y me deje llevar, Pierre me ayudó a levantarme, salimos de aquel cuarto y ni rastro de sus colegas y tampoco de Rubén, tome un poco de agua, y le dije a Pierre si me podía pedir un taxi, pero él me dijo que si quería pasar la noche con él en su apartamento, yo lo mire y asentí con la cabeza, salimos de allí, me llevo a su coche y de allí a su apartamento.
Y hasta aquí este nuevo episodio con Rubén el amigo camionero de mi padre, espero os haya puesto cachondos y morbosos, de eso se trata, besos y lo dicho por Instagram hablamos, vlcpedro22, contestó a todos.