Por fin se vislumbraba Paris muy cerca de nosotros, el viaje había sido cansino, pero a la vez excitante y vicioso, Rubén y yo habíamos follado como locos y hecho cosas insospechables para un tío cómo yo casado y hetero, aquel macho que conducía el camión me ponía muy cerdo y era capaz de hacer por él lo que me pidiera, me follaba genial y me ponía cachondo y morboso con solo olerlo.
Ya se había hecho tarde, Rubén me dijo que no entraríamos a París hasta el amanecer, el lugar de descarga estaría cerrado ya y mejor descansar a las afueras, yo no puse ninguna objeción, y Rubén paró en una especie de hostal restaurante que había a un lado de la carretera, estaba bastante lleno de camiones y supuse que Rubén conocería el lugar. Bajamos del camión ,estiramos las piernas y me preguntó que me parecía si pillábamos una habitación para dormir esa noche, yo le dije que por mí genial, así que entramos al restaurante que estaba lleno de camioneros robustos y fuertes, nos sentamos en la barra, pedimos unas copas ya que no tenía que conducir y pedimos una habitación para dos.
En un momento dado alguien llamo a Raúl desde cierta distancia, nos giramos los dos y este alzó la mano saludando a uno de los camioneros que cenaba en una de las mesas, Rubén me dijo que esperara que iba a saludar a un colega, se levantó y se acercó a aquel hombre, tendría sobre 60 años, grande, fortote con barba cana, medio calvo, pero bastante atractivo, era un buen macho, pensé que podría ser algún conocido de carretera, los vi charlar animadamente, y como Rubén me señalaba en algunas ocasiones y se reían, me hubiera gustado saber de qué hablaban, pero no podía oír nada de nada. La conversación acabó con un apretón de manos y un abrazo, Rubén se volvió a sentar a mi lado y me dijo que era un buen amigo de viajes e historietas varias muy calientes riéndose, después me invitó a que nos sentáramos y comiéramos algo antes de descansar y así hicimos.
Durante la cena encontré a Rubén algo nervioso, quería decirme algo pero me daba la sensación de que no se atrevía a contármelo, empezaba a contarme cosas como que le ponía mucho que los jóvenes se fueran con los camioneros, que yo podría hacer algo así por él, pero no entendía que quería decirme, hasta que por fin lo mire a los ojos y le dije a ver Rubén que quieres decirme?
Rubén: verás recuerdas el hombre con el que me senté a charlar antes?
Yo: si claro…
Rubén: puesss… Le he estado contando lo putita que has estado conmigo en el viaje, y lo bien que te has portado.
Yo: cabronazooo… por eso me mirabas y os reíais.
Rubén: bueno un poco si la verdad, pero de buen rollo.
Yo: si claro de buen rollo.
Rubén: bueno veras, se ha quedado loco por ti, un chaval guapote y bien parecido, como no va a atraer a cualquier camionero salidote de aquí? Cualquier tío de este bar te follaria sin pestañear nada más se lo insinuarse.
Yo: venga no jodas.
Rubén: que si… te lo digo yo… el caso es que Guzmán mi amigote me dijo que te preguntará si te querías pasar por su camión.
Yo: queee???
Rubén: venga tío, no digas que no te da morbo… se te ve en la carita de zorrra, además te aseguro que tiene una buena tranca y es buena gente.
Yo: estás loco… jajaja. Y que más habéis dicho a mis espaldas?
Rubén: le he dicho que 300€ y eres suyo.
Yo: joderrr Rubén, me has vendido cabronnn…
Rubén: venga tío, si estás cachondo y morboso a tope, se te puede ver en la cara de perverso que tienes y encima cobramos jejeje.
Yo: joderrr Rubén, la verdad es que me pone la situación, pero que tendría que hacer?
Rubén: ir a su camión, golpeas la puerta y déjate llevar, es un poco cabrón, pero de fiar, caliente y cerdo.
Yo: Diosss… lo voy a hacer, pero 200€ son míos ok?
Rubén: ok.
Terminamos de cenar, fui al baño me lave la cara y las manos, y cuando salí pregunté a Rubén por el camión, me dijo que la cabina era roja y me dio la matrícula, allí que fui yo a buscar por el aparcamiento a aquel camionero, cuando encontré el camión casi muerto de frío, llame a la puerta y enseguida me abrió aquel hombre, subeee anda me dijo, yo subí y me senté en la cabina, lo mire y me miro con cara de lujuria perversa, estaba con la calefacción puesta, andaba con unos boxers ajustados que marcaban un gran paquete sus pechos grandes y su barriga cervecera peluda, me puso cachondo el sentirme su puta, me excito y tenía una erección tremenda, aquel hombre me agarró por la cabeza con su gran mano y dirigió a la fuerza mi boca sobre su paquete, solo pude que lamer sus calzones y comer su polla gorda a través del calzoncillo, me restregó mi cara sobre su polla, diciéndome, ummm putita vas a comer polla hasta que me cansé y después voy a darte por el culo, hasta que te desmayes, yo me ponía muy cerdo oír esas palabras de aquel tipo.
Le baje el calzoncillo y su polla salió disparada, menudo pollón tenía el camionero, huevos peludos y olor fuerte a sudados, cogí con una mano su tranca y empecé a meneársela, arrime mi boca a su prepucio que babeaba presenten, lamí su capullo y relamí, haciendo que soltara grandes gemidos, pero aquel tipo no se iba con remilgos, apretó mi cabeza fuertemente para que me tragara aquel pollón y empezará a mamársela por completo, chupa hijo de puta, chupa, que Rubén dice que lo haces muy bien, mi boca no daba a tragarse tremendo pollón y tuve que hacer un gran esfuerzo para no ahogarme, hasta que el placer que le estaba dando lo relajó por completo y me dejó chupársela a mi ritmo, se la mamaba apretando mis labios y succionando de abajo a arriba, hasta los huevos, baboseaba su tremendo pijo para que se deslizara por mis labios y con mi lengua acariciaba su cipote, lo besaba y volvía a tragármela, el solo gemía y me lanzaba tremendos improperios, ummm guarrilla que bien la chupas, sigue cerdo, ummm, ahhh no pares, sigueee trágatela entera maricona, yo no paraba quería aquel tipo disfrutará de mi mamada, y así estuve durante más de media hora.
Después de ese tiempo aquel tipo me apartó de su polla de un tirón, diciéndome, ummm quieto cabrón, que me corro y quiero guardar mi leche para ese lindo culito. Me dijo que pasará al catre me desnudo a tirones, me puso a cuatro patas, abrió mis nalgas con sus duras manos y pego dos escupitajos sobre mi ano las volvió a cerrar y empezó a azotar fuertemente mis nalgas con las palmas de sus manos abiertas, cada golpe me hacía más daño, pero me ponía súper cerdo y el morbo de ese dolor era intenso, tenía ya mis cachetes ardiendo, con cada nalgada me insultaba, toma cabrón, hijo puta, te voy a reventar con mi polla, te la vas a tragar enterita, te voy a preñar de leche caliente, así hasta que se decidió a meter dos de sus dedos en mi culo, pegue un grito y el empezó a follarme con ellos, escupía en mi ano y continuaba, así hasta que se decidió que ya era hora de follarme, posicionó su polla note como presionaba y mi culo se resistía, era más grande que la de Rubén, yo intentaba relajarme, volvió a presionar y un dolor punzante llegó hasta mis sienes, volvió a pegar dos empujones que me hicieron casi desmayar y su polla hizo tope en mi culo, ya la tenía toda dentro, unas lágrimas salieron de mis ojos, y entonces empezó a bombear sobre mi cuerpo, su polla entraba y salía de mi culo, y cada vez era más el placer que el dolor, tanto que solo le rogaba que siguiera follandome, su barriga y sus tetas pegaban contra mi espalda y su boca besaba y lamía mi cuello, podía notar el aliento sucio de su boca sobre mi, y su sudor fuerte pegado a mi cuerpo , seguía dándome polla fuertemente y yo gemía como una zorrita, ahhh, ummm, sigue, sigue follame fuerte, aquello debía poner cachondo al camionero que hacía que sus embestidas fueran más fuertes, me seguía azotando mi culo con cada penetración y de vez en cuando me la sacaba del todo y la volvía a meter de golpe bruscamente, ahhh, gritaba yo, ummm follame tío, follame, si cabron que culo tienes, me decía, ha valido la pena mis 300€, pero los vas a pagar, ummm que culo, así siguió más de veinte minutos dándome polla.
Después decidió sentarse en el catre y que me pusiera sobre él, para que fuera yo el que lo cabalgara, y así empecé a mover mi culo sobre su polla, podía ver su cara de perversión, como gemía, me ponía cachondo ver cómo lo estaba haciendo disfrutar, así que me movía más rápido sobre su polla que ya entraba y salía de mi culo deslizándose y dándome un placer inmenso golpeando mi próstata, decidí acelerar mi ritmo para que aquel hombre pudiera inundar mi culo de su leche, no tardó mucho en suceder, empezó a gemir y a respirar mucho más rápido , yo seguí votando mi culo sobre mi polla y el soltó un gran gemido, ahhhh, aggg y note su semen caliente recorriendo mis entrañas, cogí mi polla empecé a pajearme mientras él se corría y en nada estaba soltando toda mi lechita sobre el pecho del camionero, me quedé recostado sobre su pecho y nuestras respiraciones empezaron a disminuir de fuerza, la polla del camionero perdió fuerza y se salió de mi culo, y con ello su semen fue saliendo, me levanté cogí su polla ya flácida, relamí aquel semen, me lo trague, limpie bien su capullo con mi lengua, me tiro de los pelos hacia él, ven cabrón, y me morreo fuertemente durante un buen rato, su lengua buscaba la mía, su barba se metía en mi boca y sus jugos los dejaba fluir en mi boca.
Al rato decidió dejarlo, nos quedamos un rato callados tumbados, saco papel, para limpiarnos y me dijo que había sido una putita muy buena, que le diría a Rubén que quería estar algún otro día conmigo, y que haríamos cosas más verdad, yo me vestí y me despedí de él diciéndole que cuando quisiera, baje del camión y me dirigí a la pensión en busca de la habitación donde me esperaba Rubén.
Por el camino iba pensando que aquel hombre no era más que un maduro, cachondo, cerdaco, pero que yo había disfrutado haciéndolo con él, que me gustaba ser una putita y ser follado por extraños que me pusieran a cuatro patas y me violaran como a una perra, que había salido de casa como un tío casado, hetero, formalito, y sexualmente simplón y estaba viviendo el sexo de forma oscura, sucia y lujuriosa y que me estaba gustando de una forma tan morbosa, que creo que ya no podría desear más que eso.
Bueno y hasta aquí esta nueva entrega de mi viaje con el camionero amigo de mi padre, que todavía tiene cosas que contar, pero será en otro capítulo más morboso si cabe que este, espero hayas disfrutado como yo, que cada vez que escribo me pongo cachondo, podéis como siempre comentarme por aquí, y si sois de valencia España, me molaría tener algo con alguno de mis lectores. Jejeje besazos…