Hola, después de ese par de noches con mi madre y nuestra última charla, empecé a ver las cosas de un modo distinto, incluso había tomado las riendas de mi vida sexual mucho más abiertas, y sobre todo tenía la necesidad de incursionar en cosas que eran nuevas para mí, si bien muchas veces las había tenido en mente, nunca las había intentado, así que decidí ir por todo y con todos.
Con quién arranque está nueva etapa de mi vida fue con mi compañera, con la que estaba arrancando una relación, si bien llevábamos un tiempo teniendo sexo, no era una relación formal, en una de las tantas noches de sexo que teníamos, le pregunté qué pensaba ella de los tríos, y si le atraía poder hacerlo alguna vez, su respuesta fue más dudas que otra cosa, me dijo que le atraía y calentaba la idea, pero no estaba convencida de animarse, y que si alguna vez lo hacía, debía ser con una pareja duradera con la cual esté todo los días con ella, así que sabía que sería difícil que acepte hacerlo en el corto plazo, pero igual su respuesta no me desanimó, y en otro momento les contaré lo ocurrido con ella.
En una de las noches que pasábamos juntos con mi ex, le hice la misma pregunta y su respuesta fue diferente, que le gustaría, pero no quería que yo juegue con ella, que no quería que la vea cómo a una puta que le puedo hacer lo que quiera, obviamente mi respuesta fue para hacerla sentir bien y que acepte, le dije que no tenía nada que ver el amor con el sexo, que la quería mucho y que tener más variantes en la cama seguramente nos haría estar mejor en lo cotidiano, y que es solo un condimento más a nuestra intimidad para poder estar mejor, no quedo muy convencida, pero empezó a hacer preguntas de como sería, con quién, que haríamos y demás cosas, ahí supe que no tendríamos problema en hacerlo, y le propuse que busquemos en alguna página de contactos al hombre o mujer que a ella le gustará y veríamos que pasa, así que acepto y en la siguiente semana nos pusimos a ver de todo, realmente dedo decir que en esas páginas hay de todo y para todos, pero hubo algunos perfiles que le llamaron mucho la atención, pero sobre todo uno de un muchacho de treinta y pico de años que tenía una pija enorme, y que contactamos para conocerlo, pero eso se los contaré en otro momento.
Mientras pasaba eso con mi compañera y mi ex, yo tenía sexo con mi madre en forma seguida, como ella lo quería, lo pasábamos de maravilla, pero yo también quería que hagamos otras cosas con ella, pero el morbo que había despertado en mí me superaba, así que arme un plan que haría que se dé lo que deseaba, y en una de nuestras noches le propuse hacer un trío y me dijo:
Madre: ya estoy grande para eso, con vos me siento bien y me das la satisfacción que necesito
Yo: sabes, me dejaste muy caliente con lo que me contaste que hacía papá para complacer tu calentura y me encantaría hacerlo yo también
Madre: eso fue hace tiempo, además quién va a querer estar con una vieja como yo, antes era todo más reservado, ahora todo el mundo se entera de todo, y es muy complicado
Yo: y como hacía papá, como conseguía con quién hacerlo, en ese momento no había redes, de seguro eran conocidos de él
Madre: a veces si, algunos compañeros de trabajo, o amigos suyos a los cuales yo no conocía, había uno que era con el que mejor la pasábamos y realmente me llenaba en todos los sentidos
Yo: la tenía grande? O duraba más que el resto?
Madre: ambas, no la tenía tan larga, pero si bien gruesa, me encantaba, el me volvió casi adicta al sexo anal, y cuando me lo hacían juntos moría de placer
Yo: bueno, quédate tranquila, yo voy a hacer que vuelvas a sentir eso, y no solo te vas a sentir cómoda, sino vas a revivir viejos momentos
Todo quedó ahí, pero yo tenía en mente algo que no se lo esperaba, al pasar los días no toque más el tema con ella, pero llame a mi hermano para que nos juntamos a charlar en un bar por una asunto de unos papeles de la casa, pero en realidad mis intenciones eran otras, cuando llegamos nos pusimos a hablar de los papeles y llegamos a que teníamos que estar los tres para tomar una decisión, pero antes de irnos, yo me decidí y le dije:
Yo: estuve hablando con mamá y me contó lo de ustedes (note que se puso nervioso y no sabía que decirme).
El: no sé de qué me hablas, a qué te referis
Yo: dale, no te hagas el boludo, ya me dijo de lo que pasa entre ustedes, pero yo no estoy acá para juzgarlos, vos te cojes a mamá y está todo bien, ella se siente bien así,
El: mira no sé que decirte,
Yo: no tenés que decir nada, yo no estoy acá para cuestionarlos, pero no le hagas mal, solo quiero que sepas que estoy al tanto, y es tema de ustedes, ahora primero resolvamos lo de los papeles y después vemos qué pasa, así que juntémonos y solucionemos esto, tiene que ser después de que yo venga de trabajar así estamos los tres tranquilos y charlamos
El: ok, en la semana nos juntamos
Y así quedamos, ya había encaminado todo, estaba saliendo las cosas como yo quería, y mi morboso plan, ya casi era un hecho, unos días antes le digo a mi madre que nos íbamos a juntar los tres a cenar en familia, que prepare algo rico y que se ponga linda, sabía que mi hermano no le diría nada de nuestra charla, así que ella cocino y se puso elegante.
Cuando él llega estaba bastante nervioso y casi ni me miraba, en la cena hablamos de todo y tocamos muy por arriba el tema por el que él había venido, ya más distendidos cambio el clima y aproveché para servirles unas copas de vino extras a mi madre y mi hermano, así que estábamos todos súper relajados, cuando mi madre va a buscar el postre le hice un comentario a mi hermano diciéndole que ella estaba muy bella, a lo que me contesta que es la mujer más hermosa que conoce a su edad.
Sabía que su mirada sobre mi madre ya había cambiado, así que mientras comíamos el postre sentado en el sillón, les hago el comentario de que le hacía falta más leche, ella me contesta ¿te parece? A lo que digo "si si" y así sin más, le saque una teta del vestido y se la empecé a chupar, los dos quedaron petrificados, ella me decía "que haces, está loco" aunque sin mucho esfuerzo para sacarme, a lo que le digo a mi hermano "dale, vos también toma leche de acá como cuando yo estoy en el trabajo".
Se hizo un silencio total, y agarrándolo del brazo lo traigo y le hago señas de que chupe la otra, y así lo hizo, mi madre no emitía ni un sonido, seguramente por la sorpresa de lo que estaba pasando, pero de a poco empezó a acariciarnos la cabeza a los dos, éramos dos bebés que con locura chupaba cada uno una teta de su madre, en medio del silencio se escuchan los primeros suspiros de mi madre y ahí supe que mi morboso plan ya era un hecho.
De reojo pude ver a mi hermano que chupaba muy a gusto, sin importarle mi presencia, y salieron las primeras palabras de mi madre "chupen bebés, chupen las tetas de mamá" esas fueron prácticamente órdenes que ambos cumplíamos, ninguno dejábamos de saborear sus exquisitas tetas, yo me encontraba súper excitadísimo, así metí mi mano por debajo de la pollera de mi madre y empecé a acariciar su húmeda concha por sobre su tanga, se notaba muy húmeda y caliente.
Luego de estar así un buen rato, me levanté, me puse frente a mi madre y saque mi pija que estaba dura como una roca, ella la agarra entre sus manos y empezó a chupar con la suavidad que me tenía acostumbrado, mi hermano no para de chupar sus tetas, pero esta vez las dos juntas, realmente él lo estaba disfrutando, unos minutos después le toque la cabeza y le hice señas para que también le dé de chupar la pija a nuestra madre.
Cuando la saco también la tenía bien dura y más grande de lo que pensaba, ella la tomo con una de sus manos y la empezó a chupar, para de a ratos saborear una y otra, era un espectáculo digno de ver a nuestra madre chupando las pijas de sus hijos, pero fue mucha más la excitación cuando nos juntó con sus brazos y metió nuestras pijas en la boca al mismo tiempo, era una verdadera experta chupando dos pijas a la vez, podíamos ver su lengua jugando en medio de las dos y disfrutarlo como nunca.
Mientras ella chupaba yo me salgo y voy directamente a sacar su tanga, la acomodo un poco en el sillón y sin que dejara de chupar la pija de mi hermano, comienzo al chupar su concha, estaba deliciosamente mojada y caliente, y al tacto de mi lengua se notaba que estaba bien depilada, seguramente sabía que esa noche alguno de nosotros la iba a coger, pero no habrá pensado que seríamos los dos juntos.
Pasados varios minutos mi madre me saca y agarrándonos de la mano a ambos nos dice "vamos a la cama que es mejor" y ahí fuimos, al llegar a la habitación nos desvestimos los tres y ella empieza nuevamente a chuparnos las pijas, y al cabo de un rato le dice a mi hermano que se acueste, y ella lentamente se empieza a meter la pija en su interior, daba varios suspiros de placer y una vez ya toda adentro empieza a moverse lentamente, para poder seguir chupando mi pija, era hermoso ver cómo mi hermano la cogía mientras tragaba mi pija con mucha suavidad, yo me encontraba alucinado.
Luego de un tiempo se baja de mi hermano y se inclina a chupar su pija, ofreciéndole su mojada y abierta concha, sabía muy bien como darnos placer a ambos al mismo tiempo, obviamente de una sola estocada mi pija se abrió camino hasta lo más profundo de su ser, la suavidad de su concha mojada cada vez que metía y sacaba la pija era indescriptible, así estuvimos un buen rato, hasta que seguramente se le cansaron las piernas, subió otra vez sobre mi hermano y girando la cabeza, me mira y y me dice "ahora quiero a mis dos bebés dentro mío".
Casi acabo ahí mismo al escucharla, yo también subo sobre las piernas de mi hermano, y acomodo mi pija en la entrada de su enorme culo, empiezo a entrar muy lentamente, ya que tenía que hacer presión por la pija de mi hermano que estaba en su concha, cuando por fin pude meterla toda, empezamos a movernos muy lentamente, para luego hacerlo con más velocidad, solo podíamos escuchar a mi madre dar grandes gemidos de placer, cada tanto estiraba su mano hacia atrás indicándome que le diera más fuerte.
Yo me encontraba en la gloria, podía sentir el pronto orgasmo de mamá, así que apure mis movimientos y pude escuchar como acababa con un gran alarido y la presión que hizo con su ano en mi pija, segundos después yo estaba descargando toda mi leche en su hermoso culo y continúe hasta que ya no me quedara ni una gota, al igual que mi hermano en su concha, como la vez anterior me salí y abrí sus nalgas para ver ese hermoso espectáculo de salir mi leche de su culo, pero esta vez con la pija de mi hermano clavada en su concha.
Fue maravilloso, quedamos los tres tendidos y extenuados sobre la cama, uno de cada lado de mi madre y ella abrazándonos, nos da un beso a cada uno y le dice a mi hermano "ahora ya no vas a tener que venir a escondidas con tu compañero, ya tengo a mis dos bebés que me dan lo que necesito, o no sé, podríamos ser más de tres jajaja" yo me quedé sorprendido y a la vez muy caliente, parece que mi hermano ya hacía tríos con mi madre, pero eso se los contaré en otro momento, nos quedamos así un rato, hasta que mi hermano llama a su esposa diciendo que se quedaría a dormir, y así fue como mi madre tendría todo el sexo que desee, cuando ella quiera, a raíz de esto la familia se unió mucho más, y yo veía más seguido a mi hermano.
Espero les haya gustado y comenten.