Me llamo Andrés, tengo 18 años y no he tenido novia ni nada parecido, me suelo masturbar frecuentemente con videos porno y con ropa femenina, hace un mes nos fuimos de viaje a la playa con mi tía y su hija, mi tía tiene unos 40 años pero aparenta unos 25, se viste con vestidos muy pequeños y escotados por lo que cuando se agacha se le ve la tanga que es la única ropa interior que le gusta usar.
Su hija tienen 19 y se llama Valeria tiene unas curvas muy sensuales y tiene bastante pecho y pues siguiendo los pasos de la putita de su madre le encanta usar ropa muy pequeña.
La historia empezaría al segundo día cuando decidimos que era el día de playa yo andaba muy caliente esa mañana, mi tía decidió salir un poco antes mientras Valeria se bañaba y yo alistaba mis cosas ahí decidí abrir un video porno y cuando iba a empezar a masturbarme fue cuando vi el traje de baño de Valeria en la cama, era de 2 piezas color rosa y la verdad era muy pequeñito yo no resistí y tomé la tanguita y me la envolví en la verga y me la empecé a jalar con esa tela abrazando mi pene cuando sentí que me iba a correr la puse al frente de mi glande y los chorros de leche se quedaron en la parte interna de la tanga, ahí escuché que la ducha había dejado de sonar hace un tiempo y supuse que ella estaba a punto de salir así que tomé la tanga y la dejé en el grupo de ropa sucia junto con el bra para que no la tocará y tuviera tiempo de lavarla.
Ya en mi cuarto escuché como se cambiaba y al rato me llamó para que saliéramos, yo tomé mis cosas y salí del cuarto para llevarme la sorpresa de que tenía puesto el bikini con la tanguita llena de leche, me miró sonriente y me dijo: que tal me queda primito? Me veo sexy?
Empezó a dar la vuelta y mire su gran culo, y después me fije en sus tetotas que apenas cabían en la prenda, me quedé callado unos segundos y le respondí sin pensar: te ves muy rica prima. Me di cuenta de lo que le había dicho y le pedí perdón, ella solo se río y dijo: salimos?
Ya en la playa estaba en la misma toalla rodeado de 2 bellezas, todos los hombres giraban la mirada hacia ellas disimuladamente y con deseo, me sentí afortunado de tenerlas al lado.
Ya cuando nos bañábamos noté que vale me sonreía mucho he incluso me pidió que la enseñara a nada bien, soy muy buen nadador y acepté, hubo mucho toque en lo que sentía su pecho contra mi y tenía que tomarla de la cintura, después de un rato ella salió del agua y se reunió con su madre, yo no salí con ella ya que tenía una gran erección, noté que hablaban mucho, con risas y me miraban muy seguido.
Cuando salí decidimos irnos al hotel de nuevo y en la entrada del hotel mi tia dijo que saldría de fiesta esa noche y nos dejó en la habitación, yo me duche primero y me senté a ver TV, unos minutos después llegó vale y llevaba un bikini igual que el anterior pero de otro color y nos pusimos a hablar de como me iba y como le iba a ella, de pronto vale se me acercó un poco y me preguntó: Tienes novia? Tenía una sonrisa, yo dije que no con un poco de timidez enseguida vale tocándome en brazo me dijo: con lo guapo que eres no tienes novia enserio?
Yo respondí que no y me dijo con una voz muy dulce: eres virgen? Yo respondí que si y ella se río para luego preguntar: y te masturbas? Yo muy nervioso respondí que a veces por lo que enseguida me pregunta si me prendían las prendas femeninas yo recordé enseguida lo de la mañana y empecé a tener una erección pero aun así respondí que no…
Vale con una mano saca algo de su costado y para mi sorpresa era la tanga rosa y dice: yo creí que te gustaban prendas así ya que te veías muy feliz llenando de leche mi tanguita. Lo había visto todo y no había duda, yo estaba en shock pero la tensión acabó cuando ella dirigió su mano a mi entrepierna mientras decía, me encantó tener la tanga llena de tu leche todo el día. Yo estaba totalmente caliente y dejé que me bajara la pantaloneta junto con el bóxer y quedó mi verga a su vista, me mide unos 14-15 centímetros de grosor promedio, yo ya estaba totalmente duro y ella con su delicada mano y un calor muy rico que desprendía me empezó a pajear, su mano y ritmo eran increíble. Inmediatamente llevo su cabeza hacia abajo y me la empezó a chupar, se sentía húmedo y cálido y los movimientos de su lengua eran increíbles, jugaba con mis bolas, mi glande, se la tragaba toda, era algo increíble y fue cuando sentí que me iba a correr, le dije que se detuviera pero ella solo respondió: córrete en mi cara primito.
Yo no iba a dejar ir esa oportunidad y me la jale un poco mientras tenía su bello rostro al frente con los ojos cerrados listo para ser bañado de leche, deje salir 4 chorros de semen que se quedaron en su cara y un poco en el cabello.
Ella abrió los ojos y me dijo: gracias por darme tu lechita caliente… Soy tu putita primo.
Inmediatamente se puso en 4 y su culo en tanga quedó frente a mí, eso hizo que mi verga se pusiera dura de nuevo ella la miro y sonrió mientras meneaba ese culazo y me dijo: métemela primito, quiero que me des bien duro. Yo le respondí: pero primita, no tengo ningún condón, ella se quedó callada un momento y respondió: tranquilo, te voy a entregar mi culito, serás el primer hombre que me parta el culo… Yo no podía creerlo, mis instintos se salieron de control y rápidamente le bajé la tanga para dejar esos dos agujeritos a la vista, era una imagen impresionante… Enseguida puse la punta de mi verga en la entrada de su culo e hice un poco de fuerza, ella empezó a gemir con sollozos y yo le pregunte si quería que parara, ella tajantemente respondió: Noo, quiero tu verga dentro de mí, párteme el culo, yo aceleré la penetración cada vez me apretaba más la verga pero era increíble, ella seguía gimiendo y pidiéndola hasta el fondo.
Cuando por fin entró toda ella apretó su culo y yo me sentí en el cielo. Ella preguntó: si está apretadito? Te gusta mi culo? Yo le respondí: tu culo es increíble, aprieta muy rico. Y empecé a meterla y sacarla ella gemía y decía: eso primito, párteme el culito, es todo tuyo al igual que todo mi cuerpo de putita, no te contengas y lléname de lechita. Yo no resistí más y me vine en su culo ella decía: me encanta tu leche caliente dentro de mi.
Yo quedé mirando como ella se separaba las nalgadas para dejar ver como le salía la leche sobrante del culo. Se levantó y me preguntó si me había gustado yo con mucha confianza le respondí: me encantó primita, estás muy rica. Ella sonrió con la leche en la cara y fue enseguida a lavársela, salió y dijo: mi mamá está en la entrada del hotel, vamos a recibirla, salió adelante y yo detrás noté que iba con la tanga y se le notaba la leche saliéndole por los costados, ese detalle me puso erecto de nuevo…