Continuemos con la última parte de la primera vez que me cogí a mi prima.
Y: Bueno primita, te voy a dar bien duro putita (Mientras le metía más rápido mis dedos).
A: ¡Cógeme!
Y: ¿Ya quieres que te la meta perrita? (Mientras le metía dos dedos rápidamente)
A: ¡Siii! Por favor primito ya méteme tu verga.
En eso que acomodo la punta de mi verga en su estrecha y virginal vagina toda mojada, donde comienzo por frotarla, para dejarme toda la verga con sus juguitos.
La acomodo en su entradita y comienzo poco a poco a meterla dentro de mi primita, sentía como apretaba mi verga de lo estrecha que estaba.
A: ¡Ah! ¡Despacito primo que me duele!
Y: ¿No querías verga primita? (Le tapé la boca y se la metí hasta el fondo, sentí con mi verga rompía algo).
A: Mmmm (Con una mezcla de excitación y dolor)
Y: Tranquila primita ya paso lo peor, ahora toca disfrutar.
Empecé a mover despacio mi verga dentro de mi primita, ella daba aún pequeños quejidos en eso se la saqué por completo y se la metí hasta el fondo.
A: ¡Ahhh primito!
Y: ¿Te gusta putita? (Mientras le daba unas ricas nalgadas)
A: ¡Siiii! Esta vagina ya necesitaba verga, ¡cógeme soy tu puta!
Esas palabras fueron música para mis oídos porque empecé a bombearla muy duro mientras le daba de nalgadas.
A: ¡Que rico me coges, soy una putita, soy tu putita!
Y: Toma verga puta
A: Métemela toda, ¡soy tuyaaa!
Agarré su cabello de un fuerte tirón hice su cabeza para atrás y nos dinos un rico de beso, le metí la lengua hasta las anginas, ya en este punto no me importaba si nos escuchaban está disfrutando de esa vagina que me ordeñaba de lo apretada que se sentía.
Cambiamos de posición al clásico misionero, donde pude disfrutar más de su boquita y de lamer esos ricos pezones mientras le seguía dando duro, tome sus piernas y las coloque sobre mis hombros para cogérmela más fuerte, mi prima solo podía taparse la boca para no sacar esos gemidos.
A: Primito, quiero montarte.
Y: Súbete a mi verga perra.
Me acosté sobre la cama y mi prima se subió arriba de mí, acomodo mi verga en su entradita y fue bajando poco a poco con unos suspiros, podía sentir como le temblaban las piernas.
Honestamente que escena tenia a mi prima montándome, ella empezó a subir y a bajar primero lentamente mientras le chupaba y mordía esos pezones que rebotaban.
Y: Toma putita, bien que te gusta la verga.
A: Me encanta tu verga primito, se siente muy rico.
Tomé sus nalgas en mis manos y empecé a tomar el ritmo de la cogida.
A: ¡Ay! Primito que rico se siente así sigue (Ya era el segundo orgasmo de la noche)
Y: Muévete zorra, amo tus nalgas.
A: ¡Son tuyas!
Y: Que putita me saliste primita
A: ¡Siii! pero soy todita tuya
La agarre de la cintura y le daba círculos a mi verga, que rico se sentía y más como estaba apretadita, estaba en el cielo.
Los movimientos comenzaron a hacerse más rápidos y ya no podía más estaba que reventaba a chorros.
Y: Primita me voy a venir ¡Ah!
A: ¡Ni se te ocurra sacarla, quiero tu semen dentro de mí!
Y: ¡Pídemelo zorrita!
A: ¡Lléname de tu lechita primito!
Ya no aguanté más y comencé a lazar chorros dentro la vagina de mi prima Andrea, solo pude agarrarme de sus pechos y apretaros mientras veía como se ponían sus ojos en blanco.
MI prima se levantó y escurría todo mi semen de su vagina, tomo de rápido su ropa y se fue al baño, yo me puse mi ropa y me acosté.
Paso media hora y todos mis familiares se empezaron a ir, mi prima se despidió de mi rápidamente con una sonrisa de putita satisfecha.
Como a los cinco minutos me llego un mensaje de mi prima.
A: Que rico todo lo de hoy primito, la próxima vez quiero que me ropas mi culito.
Fin de la historia de la primera vez que me cogí a mi prima, espero que les haya gustado.
Como les mencione tengo más relatos, con otra prima, mi novia o amigas de universidad, si quieren saber esas historias, dejen un comentario o escríbanme a mi correo:
[email protected] para saber qué próximo relato hacer.