En los encuentros posteriores a aquella visita al bar swinger, seguían los comentarios y las ganas de seguir experimentando, Daniela había quedado fascinada de ser ensartada por todos lados al mismo tiempo pero tenía ese sentimiento donde yo pudiera molestarme o incomodarme ante tal situación, ella dejo claro que si se repetía tendría que estar yo presente de lo contrario no sucedería, acto que agradecí y le reitere que mi objetivo es que disfrutara su sexualidad y más siendo una mujer tan bella, aun tenia conflicto por el cigarro de marihuana y mi edad, principalmente por sus hijas.
De todo lo anterior no tenía problema con eso y mucho menos con ella, hasta que un buen día me dijo que estaba empezando a hablar de nuestra relación con una de sus excompañeras, la que había servido de ayuda para podernos escapar aquel día del bar, su nombre es Erika, lo cual me llamo mucho la atención ya que yo era un secreto para todos, soltando una carcajada le pregunte… ¿y que sabe?… respondiendo con pena… todo… a lo cual seguí cuestionando… ¿Qué es todo?… a lo que muy seria dijo… TODO… ya sin tono de burla le comenté que por que había decidido contarle a ella y con qué cantidad de detalles estaba cagada la información que le daba.
La curiosidad por parte de Erika empezó por esa salida, por el favor que le había pedido, de que si se comunicaban con ella dijera que estaban juntas y conociéndose por años era la primera vez que se lo pedía, le comento que tenía una relación conmigo, alguien más joven que ella, de cómo había crecido su sexualidad, de no existir limites en la misma, de mostrarle otro tipo de ángulos sin prejuicios, los cigarros que si bien no eran necesarios en cada encuentro Daniela había decidido fumar uno de cuando en cuando, que quería volver a experimentar el Gang Bang pero en sus planes a corto plazo no estaba contemplado que las veces que se veían para tomar el café veía la curiosidad y el morbo de nuestros encuentros, a Daniela le servía contarlos como un modo de desahogo ya que hasta ese momento mi nombre no aparecía por ningún lado.
Seguíamos en nuestra búsqueda de placer, Daniela buscaba en la red posiciones, tácticas, ejercicios toda herramienta que sirviera para poder aumentar el placer de ambos, pocas veces salía Erika a la plática pero yo no preguntaba por ella, hasta que un día Daniela me dijo que en el próximo café que tuviera con ella quería que la acompañara, me había mostrado una foto de ellas juntas de cuando eran jóvenes y Erika se veía muy bien y Daniela decía que se veía conservada como ella para estar a la mitad de sus 60s.
Accedí a acompañarla y estar un rato ya que vi una pequeña oportunidad para salir de las sombras y me vieran como parte activa de la vida de Daniela y no solo como un amante o algo por el estilo. Llegamos al café señalado y al poco rato llego Erika, una mujer igual de pequeña que Daniela, de tez blanca, cabello debajo de los hombros chinos, cejas tatuadas, un poco llenita, senos pequeños, caderas muy grandes, usaba lentes, zapatillas, medias naturales, blusa negra, voz suave y dulce, al llegar a la mesa me puse de pie y me presentaron con ella a lo que con una sonrisa en los labios dijo… por fin te conozco, he escuchado muchas cosas de ti… respondiendo… espero que todas de ellas sean buenas… Daniela estaba apenada la abrase para que se relajara y tomamos asiento.
Erika como Daniela venían de un divorcio tenía un hijo y una hija, su vida sexual no había sido mala pero la sentía muy plana y al escuchar a Daniela contar nuestros encuentros confeso que se excitaba cosa no me causó sorpresa pero a Daniela abriendo grande sus ojos y lógico moviendo mucho sus dedos, estaba contenta como su amiga de años estaba liberada, entre tatuajes, sexo, cigarros y juguetes, que ella tenía su propio juguete pero que necesitaba dar un paso, tanto Daniela como yo pensamos que quería que yo tuviera sexo con ella pero la sorpresa es que quería tener sexo con Daniela lo cual nos tomó por sorpresa a los dos y la idea es que yo le diera “permiso” a Daniela de hacerlo con ella a lo que sin dudar dije que SI y que si fuera por mi seria en ese momento cosa que no le causo mucha gracias a Daniela, Erika comento que no podría creer que su amiga hiciera poses circenses (el 69 de pie), lluvias doradas, de meteoritos, squirt, que fumara y quería experimentar eso y la parte lésbica cosa que no le estaba causando mucha gracia a Daniela, comentamos que era algo que se tenía que pensar bien y que no afectara la relación que tenían entre ellas por los años, una vez más Daniela trato de ver el lado positivo y dijo que lo pensaría en casa, nos retiramos, nos despedimos cordiales pero Daniela iba pensativa, sin moverle mucho no toque ese tema por algún tiempo, se seguían viendo Erika y Daniela le contaba Daniela nuestros encuentros pero no tan detallados y al parecer no se tocaba el tema de estar juntas y como es su característica un día me dijo… ya lo pensé y si quiero estar con Erika, pero quiero que estés tú, te lo debo por la vez del bar… le dije que esa vez del bar no tenía nada que ver con esto, que no es una por otra sino el hecho de estar cómodos nosotros sin importar quien sea. En ese mismo instante le marco a Erika y le dijo que había accedido a estar con ella siempre y cuando yo estuviera presente a lo que dijo un sonoro SI que se escuchó más allá del celular pero que también quería que lleváramos todo con lo que nos divertíamos y ella llevaría los suyos, Daniela frunció el ceño extrañada, pero le dije que se relajara que saldríamos bien de esta.
La cita era el siguiente fin de semana Erika paso directo por Daniela a su casa donde hablo con las hijas de ella y le hicieron el comentario que le daba gusto que retomaran su relación y salieran como antes lo hacían, pasaron por mí a un punto medio y nos dirigimos a un hotel con más aparatos y espacio (Daniela y yo hemos recorrido todos los hoteles de la capital) así que regresamos a uno el cual cumplía con lo que teníamos planeado, pagamos por los tres, entramos a esta gran habitación y en lo que sacaba las botellas de vino y algo de comer, sin decir nada Erika se fue sobre Daniela besándola, lo cual hizo q abriera los ojos de plato, ambas iban de pantalón de mezclilla, botas, blusa y chamarra con sus respectivas bolsas de trucos, mientras Erika la besaba yo seguía llenando las copas y Daniela me veía y una vez más el comentario de… relájate.. y cerrando los ojos se dejó besar, Erika paso sus manos por las nalgas de Daniela, le abrió el pantalón y metió su mano por atrás pasando por su culo hasta la conchita que empezaba a humedecerse más con esos dedos dentro de ella, Daniela le acariciaba las tetas a Erika. Les dije… las copas están listas y se acercaron a mí, tomaron cada una su respectiva copa de vino y brindamos por estar juntos y pasarla bien abrace a las dos metiendo mis manos por las nalgas de cada una de ellas, Erika se desabrocho el pantalón ya que Daniela ya lo traía abierto y abrió sus piernas, ya estaba húmeda y se volvieron a besar pero ahora Daniela era quien empezó, le saque la blusa a Erika y el bra y tomado a Daniela de la cabeza la lleve a las tetas de Erika las cuales lamia y daba pequeños mordiscos, le baje el pantalón a Daniela a lo cual ya estaba más que húmeda y tomando a Erika de la mano la baje y tomando su cabeza la pegue en la concha de Daniela diciéndole… prueba este manjar… pero antes de acercarse veía como goteaba, ponía sus dedos que se enjugaran y los llevaba a su boca y los chupaba y le dije…¡¡¡no!!! Pruébalo directo de ella… y acercándola empezó a lamer y mamar, yo detrás le lamia el culo a Daniela y en esas bajadas y subidas me encontraba con la boca de Erika y con el sabor de Daniela en ella y nos besábamos, Daniela se hizo a un lado y se desnudó completamente cosa que replico Erika.
Erika fue a la cama acostándose y tomando a Daniela del cabello la lleva a su concha y le dije… ahora pruébala tu… al principio la observaba, pasaba sus dedos y deje que disfrutara el momento, digo, era la primera vez de Daniela y Erika no solo entre ellas sino los primeros flujos vaginales, las primeras tetas, el culo y concha que no fueran de ellas.
Erika con sus piernas acerco la cara de Daniela a su concha y yo detrás de Daniel lamiéndole su culo. Podía ver como Erika jugaba con sus tetas con pezones apiñonados, vagina depilada y con unos labios pequeños, se escuchaba como se agitaba su respiración lo cual excitaba a Daniela que gemía con su boca y lengua bien metida en la concha de Erika y yo tomando el hilo de flujo q salía de Daniela, Erika se volteó para hacer un 69, Erika pasaba su lengua por el clítoris hasta el culo de Daniela lo cual la hacía chorrera más cosa que sorprendía a Erika que sacando su mano de entre las piernas de Daniela tomo mi verga y la llevo a la concha de Daniela y cuando iba a empezar a moverme para cogerla duro, metió mis huevos en su boca de un mordisco que si bien me dolió y tomo por sorpresa me calentaba más, ya que no le quedaba a otra a Daniela de mover sus caderas en círculos estando dentro de ella.
Por fin Erika dijo… pásame mi bolsa por favor… y al abrirla saco un “strap-on” el cual se puso ágilmente y dejando en cuatro a Daniela le metió el juguete poco a poco, yo me puse enfrente de ella para q mamara mi verga Daniela y después de un rato Erika me dice… ¿y si cambiamos? Poniéndome yo detrás y ella de frente… al meterle el juguete por la boca a Daniela Erika le dijo… jamás pensé verte así, con razón estas con él, que rico lo haces y como lo disfrutan… Daniela con los ojos cerrados sin decir nada seguía mamando y yo cogiéndola por detrás.
Erika fue al “potro del amor” donde se sentó e invito a Daniela que se sentara sobre ella, obedeciendo sin poner objeción y ahora Erika le mamaba las tetas, le apretaba las nalgas y movía sus caderas. Daniela no para de moverse, su columna se contorsionaba de placer, agarrando sus tetas y las de Erika, algo que hace Daniela conmigo es que mientras la penetro ella se masturba, algo q replico con Erika, siguiendo en el mismo potro Erika la puso en cuatro y se la metió por el culo, lo cual hizo q Daniela diera un grito sordo, mientras yo seguía sentado en la mesa tomando vino. Y para terminar Erika se puso de frente a Daniela hincándola y ella se empezó a masturbar con los dedos orinando la cara de Daniela que abrió grande la boca tomando lo más que podía y la termino bañando de todos sus líquidos, Daniela quedo hincada en el piso, Erika se sentó sobre el sillón, con la respiración entre cortada, me pare a acercarles las copas las cual tomaron y se besaron delicadamente, no dejaban de tocarse a lo que Daniela voltea a verme y me dice… pásame mi bolsa por favor…