100 veraz.
Al día siguiente, ni idea de que podía ocurrir tan temprano, a las 9 Carla me llama a la oficina… “me llamó Ju y me dijo que iba al apartamento del Golf, le dije que lo devolvimos anoche y le di mi dirección. Podes venir?“. “Sí, salgo para ahí, dejá la puerta del apartamento sin llave” (los dos empleados de la oficina saben que soy de salir de improviso y que si me necesitan siempre los atiendo al celular, pero tenía otra llamada pendiente y me demoré un poco).
Evidentemente ya Ju estaba en camino desde mas cerca, y yo arrancaba desde Ciudad vieja, él llegaba antes seguro, pero no me parecía que fuera un problema si se había enterado del tema.
El relato que sigue, mezcla cosas en tiempo real (lo que estaba pasando) y cosas que después me contó Carla de la llegada de Ju y otras cosas mas.
Cuando llegué al apartamento de Carla y entré, pues como acordamos me dejó la puerta sin llave para que no se enteraran de mi ingreso al abrir con la mía, el espectáculo fue increíble e inesperado.
Carla había colocado un sofá para una persona justo frente a la puerta a unos tres metros o algo así.
Sentado en el sofá, desnudo, su hermano, Ju, Carla con el babydoll blanco con que lo había recibido, aún puesto, ensartada en la verga de Ju, de frente también a mí, subía y bajaba, sonriente. Y lo sorprendente, a quien no esperaba, el padre, desde atrás del sofá le sobaba las tetas a Carla a veces por encima del babydoll, a veces directamente sobre la piel.
Por cierto no me esperaba la presencia del padre, ya que lo convenido era la visita de Ju, “pero aparecieron juntos y papá quería explicarme todo lo que sintió al leer mi nota de ayer y quiso venir, y claro ya que estaba…”
Simplemente arrimé una silla, ni dije nada y me puse a mirar, desvistiéndome. Carla subía y bajaba en la pija del hermano, ya no lo llamaremos medio hermano para simplificar, y su padre le bajó el babydoll a la cintura y le seguía manoseando las tetas. Ahí me di cuenta… quedaba libre la boca de Carla! Y su sonrisa era una invitación, me acerqué y comencé a besarla con desesperación, entrelazando nuestras lenguas.
Un par de minutos y el cuerpo de Carla empezó a estremecerse, señal inequívoca de uno de sus pocos orgasmos. Al momento, me incliné a mirar de cerca como seguía subiendo y bajando sobre la verga de su hermano, y empezó a deslizarse flujo de su orgasmo, que me di el lujo de lamer. Al poco tiempo Ju acabó y un poquito después se salió de ella con el el consiguiente derrame.
El padre y yo erectos, deseosos, la escoltamos al dormitorio, donde en un segundo ya Jo se la estaba metiendo con fuerza en la conchita super lubricada, y ella gemía a cada embestida de aquella cabeza. Cuando tuvo todo adentro, me dediqué a chupar sus pezones mientras el padre la bombeaba con toda la calentura que previamente había acumulado hasta acabarle lo poco que le iba quedando después de cogerla varias veces sin saber y sabiendo quien era.
Por lógica era mi turno y cumplí con todo placer, en cuatro, para que pudiera chupar cómodamente a Ju, acabé siguió chupando al hermano hasta que le terminó en la boca. Nos miró, sacó la lengua cubierta de semen, y tragó todo. Luego los besó, primero a Ju y luego al padre.
“Ves Sergio? Todo bien entre nosotros, sin reproches, en confianza, lo pasado, pasado”
Por supuesto se ducharon Carla y Ju, luego el padre y por último yo, antes de salir a almorzar y ellos a atender su estudio, aunque avisaron a la secretaria que llegarían un poco tarde.
Entre duchas y almuerzo me fui enterando de la reacción de desesperación del padre al leer la nota en la calle, estacionado, pues lo carcomía la intriga de que diría la nota mencionada en el relato anterior.
Lo desesperaba el regreso de un tema largamente olvidado, lo intrigaba la posible reclamación de algo de Carla y finalmente lo tranquilizó su tono conciliador, ella realmente piensa así, que a él no le debe nada, debe todo a su madre y a sus tíos a quienes realmente ama (al esposo de la tía digamos que le da total acceso, pero eso ya lo saben).
Por otro lado, es evidente como goza con su padre y hermano, el orgasmo con Ju lo demuestra.
Y está encantada con la soltería de Ju, que evita cualquier problema.
Por otro lado, nunca ha pensado Carla en complicar la vida de su padre, la esposa no tiene nada que ver en el tema.
Para Carla, simplemente cerró el círculo de su vida, conoce todo lo necesario. Y comprende que pudo haber circunstancias que ocasionaran lo que pasó.
Finalmente… al terminar el almuerzo… la gran pregunta… Y ahora? Dijo el padre…
-Ahora… si alguna vez quieren, nos juntamos… para ya saben qué, los sentí muy especiales adentro, me encanta el sexo y eso no cambiará, tampoco mi relación con Sergio. Sépanlo, prefiero que no sea en mi casa… Sergio les dirá como alquilar apartamento frente al golf.
Si alguna vez precisaran un favor muy muy especial a la orden, y les reitero para coger cuando quieran pero sin exagerar! Ja ja.
—Hija, quiero decirte algo; mencionaste que a fines de 2024 terminas tus estudios de Derecho que retomaste. Quedan tres trimestres. Hemos hablado con tu hermano que nos haremos cargo de eso. Un agradecimiento a tu acto generoso de no reclamar filiación ni nada mas allá de lo que corresponde y lo que no.
-Gracias papi beso de lengua
-Gracias hermanito , beso de lengua.
El resultado de todo esto es que al fin del día siguiente el hermano se la volvió a coger, a la tardecita, conmigo presente entregándosela, me encargué de sacarle toda la ropa, desde el abrigo hasta el corpiño y la tanga, pero no el portaligas ni las medias, que quedaron manchados como para tirar, pero que Carla insistió en llevar al lavadero, pues le encanta la cara que pone el dueño cuando recibe prendas así ja ja.