A continuación, me daré a conocer contestando algunas preguntas generales y otras que seguramente todos los hombres se formulan acerca de las mujeres.
Presentación: Mi nombre es Lorena Padilla, para servirte. Nací un 9 de enero de 1997 en mi bello Tequisquiapan, Querétaro, México. Al día de hoy tengo 23 años y 7 meses. Soy hija única de un matrimonio promedio, donde mi padre es un macho preponderante y mi madre es una ama de casa casi sirvienta, pero con altas aspiraciones. Soy soltera, en un noviazgo a distancia, abierta a cualquier posibilidad con o sin mi novio. Mi nivel máximo de estudios es bachillerato concluido y quisiera ingresar a la carrera de psicología.
Descripción física: Soy una joven de piel levemente apiñonada. Soy chaparrita, mido 1.55 metros. Los hombres que me conocen dicen que soy delgada, pero yo me considero llenita, mis medidas son 97-65-95. Mis ojos son color café oscuro, mi cabeza, frente, ojos, nariz y labios son medianos y mis mejillas son prominentes. Mi cabello es negro, lacio, aunque me gusta rizarlo de las puntas y que me llegue a la cintura. La parte favorita de mi cuerpo son mis pechos, pues son los que me dan la facilidad de conquistar al hombre que se me antoje, aunque mis glúteos también tienen lo suyo. Mis piernas son largas y firmes, mis muslos y mis chamorros son gorditos.
Descripción de personalidad: Supongamos que es la primera vez que convives conmigo. Hay dos posibles escenarios: Comúnmente me mostraré fría, seria, callada, pero amable, aunque si eres molesto conocerás mi lado grosero. Por otra parte, si en ese momento tengo elevada la libido y me pareces física y/o intelectualmente atractivo, seré alegre, cálida y sutilmente coqueta. A la hora de follar me considero muy fogosa, creativa, golosa, insaciable, imparable y maliciosa. Me comparo con un río feroz dispuesto a arrastrar muy lejos a quien se sumerja en mí.
Hobbies: Adoro leer y plasmar mis ideas en el papel, escribir relatos, poesía y mezclar mis versos con la música que radica en mí. Amo coger, no importa si es con alguien que no lo haga bien, siempre es un placer para mí enseñar lo que sé del tema. Me encanta escuchar música, ver películas, sobre todo las porno; ir de compras o comprar ropa y accesorios en línea; viajar en mi hermoso país y pasar ratos agradables con mis amistades. Me gusta ver y jugar fútbol, gracias a que en mi adolescencia me juntaba mucho con hombres; mi posición es guardameta.
Preferencia sexual: Soy bisexual, pero me inclino más por los hombres.
Práctica y posición sexual favorita: Vaginal y dar oral, obviamente también me gusta lo demás. Amo el 69, la vaquera, la misionera y de perrito.
Parejas sexuales hasta el momento y actuales: En toda mi vida fácilmente han sido más de cien; actualmente podría decirse que son tres.
Fantasías sexuales: Muchas ya se me han cumplido, como los colectivos, diferentes tamaños de miembros, lésbicos, hacerlo en lugares públicos y demás. Actualmente, sueño con encontrar a un sabio historiador con quien adaptar temáticas sexuales a distintos contextos históricos / sociales / literarios y redactar las inventivas para publicarlas; por ejemplo: la antigua Grecia, Julio César y Cleopatra, los samuráis, los alquimistas, la edad media, el viejo oeste, las obras de Marqués de Sade, safaris, viaje al espacio, entre otros y así recrearlos con el vestuario adecuado, sin faltar la escena erótica. Puede que sea bastante raro y mucho pedir, pero así son algunas fantasías sexuales de todas las mujeres, están destinadas a permanecer solo en la imaginación, como también lo son para mí follar con Cristiano Ronaldo, Chris Hemsworth, Chris Evans, Drake Bell, Gianluca Vacchi, el actor porno Johnny Sins, etcétera.
Edad de mi primera vez: Dejaré a la intuición del lector saberlo. Fue con un novio tres años mayor que yo.
Inicio de mi vida sexual: Esto ocurrió antes de mi primera vez. Lo que prendió la chispa fue encontrar entre las cosas de mi padre unas revistas con mujeres desnudas en la portada y unas historietas populares tituladas "El libro vaquero", las cuales pasaron a ser mis obras favoritas. Después, los compañeros del salón se reunían para ver videos pornográficos a escondidas y yo era invitada a verlos. Mi primera impresión fue de asombro y espanto. Eso me dejó tantas dudas, las cuales me quité al masturbarme por primera vez. La mezcla de la lectura de anécdotas eróticas más la auto-manipulación era mi pasatiempo preferido cuando me encerraba en mi habitación cada noche. Esto me llevó a comportarme muy coqueta, pero los chicos aún eran muy tontos en ese entonces y únicamente atraía a profesores. Tuve algunos novios con el fin de llegar al punto de experimentar mi primera vez, pero ese momento llegó después…