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Arrimones en el transporte público
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Tiempo de lectura: 4 minutos

Bastantes años atrás cuando salí del colegio empecé a trabajar y a estudiar la universidad, debido a esto usaba mucho el transporte público en mi día a día, esto sucedió aproximadamente entre mis 19 a 25 años de edad, después de los primeros meses de acostumbrarme a la rutina empecé a darme cuenta de que tipo de mujeres usaban los buses de transporte público en cada diferente horario, desde madres que iban siempre apuradas hasta trabajadoras de bancos o tiendas departamentales, cada una con su estilo único de vestir el cual llegue a tener ciertas preferencias.

Tanto en la mañana antes de entrar al trabajo como al salir de él con dirección a la universidad eran horas pico de tráfico y también en los servicios de buses iban completamente saturados, con espacio para apenas moverse empecé a pegarme a chicas que se me hacían atractivas, al principio me les pegaba con disimulo desde atrás para sobarme contra ellas, con el tiempo mi perversión fue aumentando y cada vez me animaba a más cosas, hasta que llego uno de mis días más placenteros en un bus, era un miércoles, recuerdo que el día era bastante lluvioso y el tráfico estaba peor de lo normal.

En una estación se subió una chica que iba saliendo de su jornada de trabajo, esta era morena clara, delgada, poco pecho y poca nalga, pelo liso, una cola en el pelo y su uniforme de tienda departamental, intento moverse a un lugar donde no tuviera que moverse mucho cuando otras personas tuvieras que bajar y de inmediato puse mi mirada en ella, a como pude muy lento por la cantidad de personas me logre colocar justo detrás de ella, me llegaba un olor agradable de su loción y escuchaba música con un dispositivo MP3 muy famoso en esa época, ya que el tránsito estaba parcialmente paralizado me empecé a pegar a ella, en esa entonces una técnica bastante usada que tenía era meter la mano en la bolsa de mi pantalón y desde ahí tocarla, esto me ayudaba a que no fuera tan obvio para otras personas que pudieran ver y si ella se daba la vuelta que no viera mi mano directamente tocándola, a lo que empecé dando pequeños topes, eran unas nalgas pequeñas, piel suave y no se sentía aún muy usado ese cuerpo, casi de inmediato tuve una erección al sentir su cuerpo, con la respiración agitada seguí haciéndolo a lo que ella no volteaba a ver, parecía estar más concentrada en la música que en lo que pasaba dentro del bus.

Cada vez antes de tocarla volteaba a ver para asegurarme o tratar de evitar que alguien más se diera cuenta de lo que hacía, todos estaban desesperados por la lentitud en la que se movía el bus, a lo que aproveche a pegarme completamente a ella, oliendo su pelo y colocando mi mano directamente sobre su nalga izquierda y dándole un leve agarrón de nalga, a lo cual ella volteó a ver un poco asustada, ese agarrón de nalga si lo había sentido, pero de a poco regreso su vista hacia el frente, estando muy excitado se me hacía difícil el poder dejar de tocarla, mi mano hacía movimientos circulares sobre su nalga izquierda, a lo cual ella intentaba moverse para evitar el contacto, pero era casi imposible moverse dentro de ese autobús.

Las personas estaban estresadas y con un empujón ponían una mala cara así que no tenía opción a menos que decidiera gritarme ahí y hacer un show lo cual imagino que por vergüenza no lo hizo, al ver que no haría algo de lo que me pudiera arrepentir saque mi mano de la bolsa del pantalón para ponérsela directamente sobre su nalga siendo únicamente la tela de su pantalón y calzón lo que separaba mi mano de su desnuda nalga, con mis dedos empecé a recorrer los bordes de su calzón que se marcaban de manera perfecta en ese pantalón de tela tallado, mi respiración se hacía agitada y tenía mi cabeza casi sobre su hombro donde ella podía sentir perfectamente mi erección contra ella, mi mano que recorría su cuerpo y lo agitado que me tenía ya en ese punto.

Importándome poco su reacción ya en esos momentos empecé a llevar mis dedos al centro de sus nalgas, con mis dedos pellizcaba su calzón y lo jalaba junto con su pantalón, cada vez que lo hacía sentía como me palpitaba el miembro de lo caliente que estaba, ella solo pegaba un pequeño brinco cada vez que lo hacía, ella no dejaba de voltear a ver con la intención de que en algún momento parara, pero al ver que nadie se daba cuenta y aun así si lo hacía dudosamente harían algo para defenderla, así que continúe hasta llevar mi mano izquierda entre sus piernas, que con dificultad logre abrir, con mi mano empecé a acariciar entre sus piernas, sintiendo perfectamente su vagina, tenía unos labios vaginales gruesísimos que se sentían perfectamente, los empecé acariciar con movimientos hacia adelante y sobando con fuerza hacia atrás, vi como ella se quedó quieta y agacho su vista hacia abajo, veía como se agarraba del pasamanos con fuerza, había llegado a su punto débil, esa vagina se empezó a mojar de a poco hasta que llego un punto donde ella separó sus piernas para que le pudiera acariciar de mejor forma, sentía mojado mi bóxer por dentro del pantalón y moría de ganas de penetrarla ahí mismo, delante de todos sin importarme que dijeran, sin perder la oportunidad empecé a acariciarla más y sentía como más y más ese pantalón se humedecía.

Con mi mano en una manera reducida intentaba rasgar su pantalón para poder meter mis dedos en su vagina, pero no tenía éxito alguno, después de un rato y de sentir su pantalón completamente mojado me asusté un poco, ya que vi que ella se movió y empezó a buscar entre su bolsa, no me di cuenta de que fue lo que saco, pero si vi perfectamente que llevo su mano a su entre pierna, después de unos instantes volvió a colocar lo que fuera que sacara de su bolsa de regreso, volví a pegarme a ella para seguir acariciándola y que sorpresa la que me lleve ella con algo de su bolsa había rasgado su pantalón, tenía expuesto su calzón que estaba empapado al cual rápidamente hice a un lado y empecé a masturbarla con mis dedos en esa deliciosa vagina.

Estaba completamente húmeda y muy caliente por dentro, tenía dos dedos dentro de ella y sentía como la mano se llenaba de sus fluidos, ella movía su cabeza de un lado a otro, tratando de contenerse y se le veía agitada ya, yo solo deseaba depositar mi semen dentro de ella, pero no dejaba de masturbarla, rápido y duro dentro de su vagina con mis dedos, hasta que sentí como con su mano derecha la puso detrás de ella y me sobaba como podía el pene dentro del pantalón, nos estábamos masturbando de una manera extraña en un bus, 2 desconocidos entre muchos más desconocidos, sentía como esa pequeña mano con uñas largas me acariciaba sobre el pantalón, a como pudo me bajo la bragueta del pantalón y metió su mano buscando mi pene el cual encontró de manera muy fácil, nos masturbamos hasta que cada uno llego a su clímax y yo eyacule sobre su mano, ella sacó despacio su mano de mi pantalón y se limpió mi semen en su pantalón, ya habiendo pasado el clímax me sentía nervioso, ya que no sabía si las demás personas se habían dado cuenta oh no, mientras cerraba la bragueta de mi pantalón me di cuenta de que hacía unos 10 minutos había pasado la estación donde debía bajarme a lo cual me empecé a mover para poder bajarme y tomar un taxi a la universidad, dando por concluida mi experiencia más deliciosa en un bus de servicio público en mi país.

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