Comienzo una nueva historia, en este caso se llama Marta y tiene 23 años. La primera impresión después de cruzarnos el primer mail fue que no podría pasar nada entre nosotros.
‘Te agradezco que me hayas sacado de dudas, en ningún momento me parece molesto u ofensivo lo que me comentas, aunque yo no esté dispuesta a entrar en ese rol.
No obstante sí que es una fantasía que puede llegar a darme morbo, te lo reconozco. Pero también reconozco que dudo que me pudiera entregar de esa forma a un desconocido.’
Rápidamente le respondí de nuevo:
No tienes que agradecerme nada, tu preguntaste por el anuncio y yo solo me he limitado a contarte lo que busco.
Entiendo perfectamente tu reacción, es normal, y comprensible que no te entregues de este modo a un desconocido.
Comentarte que yo tampoco te pediría jamás quedar conmigo ya, pues este juego no es llegar "me gustas" y… vas más allá del "tener sexo"
Primero debería descubrirte, a ti como mujer primero y a tus fantasías, a tus posibles anhelos, tus gustos, tus preferencias y tus posibles límites, y a partir de ese momento si ambos así lo decidimos se podría avanzar a conocernos en persona y probar.
Si se diera esa opción comentarte que al menos la primera vez sería bastante light, y que siempre tendrás tu la posibilidad de parar en cualquier momento o instante, por muy atada que estuvieses.
Esto es un juego sexual, pero para disfrutarlo ambos, no solo el que tenga el rol de dominante, sino la otra parte también, por ese motivo es importante confiar en la persona que puedas tener delante.
“Hola
La verdad, jaja eres un poco malo… casi me estás tentando.
Bueno, sigo con reservas y muchas dudas.
Pero bueno tengo que reflexionar, tampoco quiero hacerte perder el tiempo”
Después de este email quedó claro que todo quedaría ahí, ya no esperaba saber nada mas de ella.
“Bien…
Tengo 23 años, vivo en Barcelona, tengo pareja estable desde hace 2 años.
Físicamente… soy bajita mido 1´50, peso aprox. 50 kg., llevo el pelo largo y es de color castaño claro o rubio oscuro (como prefieras jaja) Ojos de color verde oscuro y dicen que soy guapa, aunque yo me considero más bien atractiva, pero con chispa jaja.
La verdad es que tampoco sé porque te sigo el juego, se de entrada que el dolor físico no lo aguanto… que me ataran uff no sé, adorando a nadie tampoco me veo… vamos que como sumisa creo que sería un desastre.”
“Estaba pensando y creo que no me equivoco mucho.
Tu fantasía realmente no es la realización de esta práctica, ya que si me dices que tienes experiencia ya sabes lo que es…
Si no más bien, o al menos es lo que intuyo, convencer o introducir a una mujer que sea ajena a estas vivencias y poder someterla.
Por eso no te vale una profesional, porque no sabrías si la sometes realmente o es ficción por su parte.
Y tampoco una sumisa, porque ya está predispuesta a la sumisión.
Jajaja si es así eres retorcido jaja, es broma!!”
“Si suelo masturbarme, la frecuencia es variable hay épocas en que estoy muy activa y otras en las que no me apetece tanto.
El promedio habitual es de 2, 3 a la semana.
Actualmente estoy en una época bastante activa.”
“Francamente si estoy excitada, sobre todo al sentirme totalmente a "salvo"
Me gusta sentir placer, y me lo proporciono de todas las formas que me son posibles, si estoy en la ducha y me apetece, lo aprovechó, igual que con juguetes o dedos, todo depende del momento y de lo que tenga más a mano.
Yo, ahora que lo preguntas no suelo acariciarme el pecho, pero si me gusta que lo hagan.”
A partir de ese momento empecé a proponerle una serie de juegos, para ver como reaccionaba mentalmente y físicamente ante ellos.
“Jugaré encantada, pero esta tarde poco puedo hacer ya que he quedado a las 16 y no sé a qué hora volveré a casa.
Decirte, que el hecho de leerlo ya me excita.”
“Hola
Bueno en la cafetería no ha podido ser… pero si te reconozco que he estado todo el rato más concentrada en encontrar el momento de hacerlo que en la conversación que tenía.
Cuando he llegado a casa te he hecho caso, me he estado acariciando suavemente los pezones, hasta que se han endurecido y he empezado a dar suaves pellizcos en ellos… la sensación no se describirla de otra forma que eléctrica…
Estoy excitada, mojada… pero ya iba así de camino.”
“Si te digo una cosa ¿no te sabrá mal ?
De momento, más que por complacerte a ti… lo hago para experimentar yo.
Espero que no te sepa mal, pero aún no me siento nada complaciente contigo.
Te haré caso eso si.”
“Si, te he hecho caso y me entretenido con mis pezones antes de jugar con el chorro de la ducha…
Es cierto lo que dices, ayer era muy, consciente de mi cuerpo y hoy ha sido bastante más intenso de lo habitual.”
“He hecho, lo que me has pedido, me he masturbado de pie con las bolas puestas y he tenido otra vez un orgasmo, la verdad muy rápido apenas me he tenido que tocar.
También he lamido mis dedos, mi sabor también me gusta a mi y ver que mis dedos estaban tan mojados aparte de sorprenderme me ha excitado más si cabe…
Cuando he regresado, jajaja bueno yo siguiendo órdenes claro!! No he tenido más remedio que masturbarme de nuevo…
La palabra… Fantástico!! Me he corrido otra vez, me he quitado las bolas antes… estaban tan calientes, me refiero a su temperatura. Nunca las había llevado tanto rato dentro.”
“Me preguntas si quiero más diabluras, te respondo que sí, que me interesa conocerme más.
Es posible que llegue a hacerlo para complacerte, no digo que no, eso también me favorece a mi y de alguna manera entiendo que es algo esencial que llegue a tener ese sentimiento por ti, para poder redescubrirme.
No pretendo ser pedante, pero te dije que tengo un muy buen ego, me siento guapa, atractiva, joven y muy sexual siempre. Sin ser nada del otro mundo eh! también tengo los pies en la tierra.
Pero si que hoy me siento más excitada y con los sentidos avivados, no tan solo a nivel sexual.”
“Salvado el primer impacto sensorial de la pared helada, la experiencia me ha recordado algo que te explico después.
Para empezar, tengo los pezones extra sensibles casi tanto como mi clítoris.
A penas he necesitado tocarme para poder llegar a otro orgasmo, aun así estando satisfecha como lo estoy, siento mi cuerpo aún excitado y tengo una sensación desconocida de deseo… de alguna forma es como si estuviera insatisfecha, aunque no es así.
Es posible a que se deba a que noto mis pezones rozar la ropa (ahora ya me he vestido claro) y antes nunca o en contadas ocasiones lo percibía.
Por otro lado mi sexo también está sensibilizado… no se explicarlo mejor pero diría que necesita más…
Noto la braga pegada a él, digamos que también hoy soy más consciente de que la llevo.
Creo que me explico fatal. Bueno la esencia se podría decir es que sigo caliente aunque me parece increíble porque físicamente estoy satisfecha.”
“Me pellizque los pezones, como tú me dijiste y la verdad es que están demasiado sensibles y tuve que parar pronto, aún hoy voy notando el roce con el sujetador, ya no todo el rato porque he tenido cosas que hacer, pero ahora mismo que te escribo soy más consciente de ellos.
También te doy la razón en una cosa, nunca he estado durante tantas horas tan mojada y por descontado hoy aún no me he tocado, pienso que si juego lo hago bien o no tiene mucho sentido.
Aunque tengo ganas de hacerlo no creas, es una gran tentación (controlarla forma parte lo sé)
De alguna forma, ya estás presente puesto que me obligas a ir mirando el correo… eso hace que piense en ti, aunque no te conozca de nada.
No te niego que me alegra y hace sentir bien recibirlos y el esperarlos con cierta impaciencia también tiene su morbo, no creas (también sé que eso forma parte de tu digamos "dominio" sobre mi). Bueno en realidad todo se basa en eso, soy consciente de que toda la información que te dé, te da poder a ti sobre mi.”
“Creo o al menos no recuerdo haber tenido tanta tensión sexual nunca.
Puedo sustituir a mi chico por un vibrador? a parte de disfrutar más, es una cuestión de orgullo no contar con él.
Mmm jaja qué juguetes?
Bueno dime si puedo sustituir o no.”
“Uff ha sido una de las mejores sensaciones que he tenido sola… Ya hace un rato que me he corrido, pero aún puedo notar el alivio en mi sexo y en todo mi cuerpo, aún percibo una especie de cosquilleo interno posterior a mi corrida.
Pinzas: Jolín duelen al principio, después ya no, apenas las noto pero cuando pasado un rato me las he quitado tal como de decías… aún ardían más los pezones es como si me los estuvieran mordiendo con bastante fuerza, por cierto aún están sensibles y duros y rojos.
Pero no me siento muy atractiva mirándome con las pinzas en los pezones, de momento esa visión no la comparto.
Claro que le restó importancia a ese detalle… por que me interesa más fijarme en el placer.
Peineta: Interesante poder imaginar que son tus dientes en mis muslos, la sensación es de lo más agradable y estimulante, la verdad nunca me he prestado tantas atenciones yo sola y el resultado es el esperado, más abundancia en flujo… más excitación, más deseo.
Cepillo: No ha estado mal la sensación de azotarme y sentir una pequeña mezcla de dolor y ardor, mientras por mis muslos iba notando como resbalaba mi flujo, que la verdad era muy abundante y que ha aumentado cuando estaba con el mango del cepillo dentro, unido a tener las manos en la nuca e intentar que no se saliera, me hacía ser mucho más consciente de mi cuerpo.
La boca abierta y babear… bueno, me sigue pareciendo algo extraño y poco erótico la verdad.
Orgasmo: Mmmm genial! me he pegado a la pared, que ya no me parecía tan fría, quizá porque yo estaba bastante caliente jaja, tenía mi cuerpo lo más pegado a ella que podía, las piernas abiertas, mi mano izquierda estaba quieta, solo movía mi pelvis y tenía un dedo dentro atrás en mi ano… solo a mitad, el resto solo era movimiento, si lo hacía hacia delante me rozaba el clítoris, y hacia atrás introducía más mi dedo, era como si me follaras tu…”
“Efectivamente, me he levantado muy mojada de nuevo (aunque está dejando de ser una novedad levantarme así, y usted sabe bien el porqué).
Me costó dormir claro… entre la excitación de mi cuerpo por no poder llegar y mis pensamientos por otro lado..
También te doy la razón, me mantienes en un estado que me gusta, aunque se me había ocurrido que quizá podría resultar demasiada tensión en algún momento.
La verdad, desde ayer solo tengo una idea en la cabeza y es la de conocerte en persona con carácter de urgencia, jajaja.
No te lo quería comentar, porque pensé que me dirías que no… pero yo también tengo muchas ganas de estar en tus manos.”
A partir de ese momento elegimos día y hora para conocernos, la tensión sexual había crecido constantemente y ya era el momento de ponernos cara y voz.
“He llevado las bolas puestas, y cuando he llegado a casa me he masturbado como me has dicho, por cuarta vez…
No sé, estoy excitada, motivada, caliente (mucho), frustrada, porque no me he corrido en todo el día y en cambio no he parado de tocarme, nerviosa por mañana, ansiosa… y por ahora no se me ocurren más palabras que acaben en "ada" o "siosa".
Continuará…