Quienes me conocen saben que me gusta contar las cosas en caliente, es decir cuando me pasan, no cosas de hace mil años atrás, por eso les cuento lo que me paso hoy (le pasó hace tres años y lo escribió en caliente, y ahora se publica aquí), aprovechando este rato que tengo antes de que me llamen a cenar.
La cosa fue con Pili, les cuento un poco quien es. Pili era mi mejor amiga, la conozco desde que empezamos el jardín de infantes, estábamos siempre juntas, pero en 4º año del cole se puso de novia y nos distanciamos, hasta que nos dejamos de ver, pero sin estar peleadas.
Hasta que nos dejamos de ver, siempre fue como era yo, re santa, nada de cosas raras y el sexo era cosa de putas (jajajajaja, cuánto tiempo perdí). Hasta que hace unos meses la encontré en un cumpleaños. Nos pusimos hablar y era como que el tiempo no hubiera pasado. La encontré re cambiada, estaba con una mini y re zafada, hacía unos meses se había peleado con su novio, y me confeso, que desde que se peleó con su novio se había comido unas cuantas pijas (bah, se había vuelto media putita jaja).
Después del cumple, nos fuimos con dos chicos (Pili estaba medio, bah, bastante en pedo) y nos terminaron cogiendo estos dos chicos, pero juntas, con lo cual no perdí la oportunidad para probarla, la empecé a toquetear un poco, unos besos, y nada más, pero nos sentíamos, más allá, de que lo mejor fue la cogida que nos dieron acabamos varias veces, verla coger a ella, y que ella me viera coger a mí, bueno, me re calentó.
Al día siguiente, viene a casa, me dice que se había arrepentido, que le daba vergüenza, que nunca había hecho eso, que nunca había tocado a una mujer, y nada, le dije que por eso no se tenía que considerar lesbiana y todo eso, hasta que terminamos las dos desnudas, no hicimos mucho, pero lo suficiente para que las dos acabemos un par de veces.
Después de eso habremos estado juntas una sola vez.
Bueno, voy a lo de hoy, desde hace unos días, estamos hablando para ver cuando nos vemos, le dije que venga a casa, la note con un poco de dudas, hasta que la convencí y vino.
Pili es chiquita, pero tiene un lindo cuerpito, estaba con un jean y zapatillas, re sencilla, yo, como estaba en casa estaba con una mini y una blusa. Tomamos algo en el living, y le digo de ir a mi cuarto que le quería mostrar unas fotos de cuando éramos chicas, subimos, nos ponemos a ver las fotos.
Yo la veía medio nerviosa, porque en el fondo sabía lo que podía pasar. Pili con la única mujer que estuvo fue conmigo, le gusto, pero es algo que ella misma se reprime en hacer, piensa que si lo hace es lesbiana, yo ya le dije que no es así, yo al menos mientras tenga un orgasmo, no me importa que sea con un hombre o mujer.
La cosa es que estábamos sentadas en la cama viendo las fotos, yo re pega a ella y siempre aprovechando para tocarle las manos, los brazos algo, y cada vez estábamos más cerca.
En un momento le agarro la carita y le doy un pico y me dice algo así:
Pili: caro, no por favor.
Yo: que tiene de malo Pili, pasémosla bien.
Pili: pero sabes como yo soy con esto.
Yo: si, ya sé como sos, te encanta.
Pili: no, yo no soy lesbi.
Yo: yo tampoco, pero mientras tengamos un orgasmo y la pasemos bien que tiene de malo.
Mientras hablábamos, cada vez los besos eran más fuertes, más intensos, hasta que bastó para que le agarrara su mano y la pusiera sobre mi pierna. Siempre digo lo mismo, a mi me gustan más los hombres, pero nosotras somos más dulces, tenemos una piel más suave. Bastó que apoyara su mano en mi pierna, para que sola la vaya subiendo casi llegando a mi conchita y yo inconscientemente, abría mis piernas como entregándole mi conchita a ella.
Nos seguimos besando, le saco la remera que tenía, su corpiño, yo mi blusa (yo no tenía corpiño) y ya estábamos casi en bolas. Pili ahí se re calentó (menos mal que le daba cosa hacer esto jaja), se abalanzo, sobre mis tetas, me acostó, si ella, me acostó en la cama y me las empezó a comer mientras ya tenía su mano acariciándome la conchita y yo toda mojada. Su boca comiéndome mis tetas, su mano ya en mi conchita, hasta que le pedí que me haga acabar, no daba más, me mete un dedo dos, los saca los mete, los saca los mete, yo me retorcía hasta que me robo mi primer orgasmo.
Después le saco el jean a Pili, la bombacha ya estábamos las dos desnudas en la cama, nos abrazamos, nuestras piernas, nuestras tetas, no paraban de tratar de sentir la piel de la otra, estábamos a mil, empiezo abajar y le empiezo a besar su conchita, le gustaba, gemía, se retorcía, le metí un solo dedo y bastó para que también acabara.
Después empezamos a rozarnos las conchas, mientras nos besábamos, que calentura que teníamos, como nos frotamos, ver su cara de placer me hacía calentar más, hasta que acabamos de nuevo.
Ahí hice algo que ella no se lo esperaba, le dio cosita, pero lo hizo, yo saco un consolador que tengo, se lo doy, me pongo en cuatro y le pido que juegue con mi cola, me di cuenta que no sabía mucho que hacer, me la empieza a besar, le digo que agarre un gel que tengo y me lo ponga en la cola, me hace caso me pone el gel y me empieza a poner el consolador despacio, yo me retorcía de placer, le digo “métemelo todo, puta, cógeme bien por el culo, rómpemelo Pili, ¡cógeme!”
No sé pero eso la hizo calentar, me lo empieza a meter y yo me tocaba la conchita, así en cuatro hasta que me lo mete todo me lo saca, me lo mete, ya estaba jugando con mi conchita, y me hizo acabar de nuevo.
Ahora viene lo mejor, le digo a Pili ”te toca a vos” y saben lo que me dice, “no, Caro, nunca me hicieron la cola” jajajaja, me entre a cagar de risa, hasta que le creí, nunca se la habían hecho, le digo que se quede tranquila, que le va a gustar, que no tenga miedo.
Se pone en cuatro, empiezo a besarle la cola, se la acaricio, con sus jugos (estaba re caliente) empiezo a meterle un dedo, otro, ya empezaba a gemir, le gusta a la puta lo que le estaba haciendo, ya cuando mis dos deditos entraban sin problema, de a poco le empecé a poner el consolador, y nada, se retorcía de placer, hasta que se lo metí todo y sus gemidos eran gritos de placer y estallo en el mejor orgasmo que le pude escuchar.
Para esto le cuento, que esto fue la primera vez que lo hice, siempre soy yo la pasiva, pero me calentó verla a Pili gozando tanto el consolador en el culo, como grito ¡como gimió!
Ya destruidas, nos quedamos un rato en la cama abrazadas, desnudas, hasta que llegó la hora que se tenía que ir.
No sé, me gusto y lo quería compartir.