Hay algo que me ronda hace tiempo y quiero transmitir.
Lo que ocurre en mis escritos es pura fantasía y cualquier intento de tratar de plasmar en la vida real lo que en ellos ocurre, seguramente ocasionara grandes trastornos en su vida a esa persona.
La fantasía es una cosa y lo que se hace en la vida real… ¡una vez hecho, hecho está! No hay marcha atrás. Y luego hay que vivir el resto de nuestra vida con ello.
Las probabilidades de que dos personas deseen exactamente ese tipo de cosas y que además sean familia es de un índice de probabilidad escasísimo, porque además, nunca estaréis completamente seguros de que la persona objeto de vuestras atenciones, no esté fingiendo y en realidad esté sufriendo con la situación.
Solo desearos sabiduría en vuestras decisiones y que la felicidad os alcance.
Un saludo.