Hoy mi mujer me estuvo intentando contactar, para invitarme a escuchar como se la folla su amante. ¡¡Que guebon!! estaba reunido. Toda la puta mañana.
Ahora tengo ganas de comerle el coño, vendrá apestando a polla. Este es su amante fijo, vive cerca de nuestra casa, como a unos 20 minutos. Es buen tío, se conocieron en el trabajo, el buenorro de la oficina. Ya ha tenido unos 4 o 5 encuentros con él. Ella es también su puta. Viene siempre rellenita de su corrida. La muy puta le encanta, y se lo pide en exclusiva.
Bueno, voy a contarles la historia que vivimos en Ámsterdam, mi mujer y yo nos montamos un viajito de unos 4 días. Se nos ocurrió invitar a J a acompañarnos, un amigo cibernético, que conocimos en Tenerife. El vino de vacaciones y aprovechamos para encontrarnos. Ya hablé de este encuentro en mi anterior relato. Para nuestra sorpresa, accedió sin dudarlo.
El día llegó, y estábamos muy nerviosos por encontrarnos después de casi un año Nos encontramos en el aeropuerto, fue muy cordial todo. Una vez pasamos el control de seguridad, nos relajamos y empezamos a hablar. El viaje fue bien y en un par de horas estábamos aterrizando.
Para llegar a Ámsterdam hay que coger un tren de cercanías, así hicimos y en 15 minutos llegamos.
Como es normal nos dirigimos a nuestro hotel, muy bien situado en el centro, habíamos reservado dos habitaciones dobles una para J y otra para nosotros. Descargamos y quedamos en vernos en un rato.
Decidimos ir a un coffee shop que conocíamos del viaje anterior con mi mujer. Un sitio pequeño, como familiar, con ambiente genial, tanto por la gente como por la música, clásico rock.
Allí pudimos hablar de nuestras cosas y romper el hielo, las caricias y los abrazos se acentuaron. Todo esto ayudado por un par de porros y unos juguitos naturales. Decidimos pues, ir de vuelta al hotel.
Nos dirigimos a nuestra habitación y con la excusa de tener que pasar al baño, los dejé solos a mi mujer y a J. Tarde mucho en salir, trataba de escuchar lo que estaban hablando, pensando que ya estarían montándoselo, empecé a escuchar sonidos de besos y morreos, y algún leve gemido, sabía que ya estaban dándole al tema. Estaba poniéndome como una moto. Al fin decidí salir de mi escondite, cuál fue mi sorpresa, la puta de mi mujer estaba de rodillas chupándosela a J, que estaba completamente desnudo. Mi mujer no se había quitado nada.
La estampa me encantó, me desaté en pasión, y no aguante un asalto. Inmediatamente la cogí de la pintura y empecé a tocarla por todos lados, la hice levantar mientras seguía chupándosela a J. La muy puta sabía lo que le tocaba. Le baje los pantalones y las bragas, y le empecé a pasar la polla por su coño. En un instante empecé a follarmela por detrás mientras seguía con la chupada a J. Estuve un buen rato hasta que tuve que descargar toda mi corrida en su coño, me encantó verla como una auténtica zorra. Después J siguió dándole caña durante un buen rato. Me quedé tan a gusto que caí rendido. J se cachondea conmigo recordándome esa situación, yo sobando a pierna suelta y el con mi mujer haciendo lo que le apetecía.
Pasamos unas vacaciones de película. Sexo, drogas y rock & roll. De todas las historias que nos pasaron me gustaría destacar un rato que pasamos, por la noche, en la zona del barrio rojo.
Después de tomar unos porritos y unas copas, salimos a pasear, lo estábamos pasando tan bien, que mi mujer dejó salir lo increíble que tiene, y nos cogió a los dos de la mano. Intercambiaba conversaciones con los dos, nos reíamos. Nos besaba a los dos a ratos, nadie nos conocía, así que ella fardaba de andar con dos tíos para ella sola. Era muy excitante la situación.
Fue un viaje inolvidable, pude grabar a mi esposita follando con nuestro amigo J. Todavía me pajeo de vez en cuando viendo a la puta de mi esposa follando. Les recomiendo que lo hagan, son recuerdos que dejan huella, y tener un video es genial.
Espero que les haya gustado. Si alguien le interesa puedo profundizar en los detalles, pero el relato se alargaría mucho. Espero comentarios.
Sawg73.