No sabemos mucho del porque nos vamos metiendo en este rollo del sexo con rol de mujer que es fascinante para muchas niñas nacidas como niños y que por una rara atracción hacia las mujeres anhelamos ser como ellas, nos encantan sus senos, su breve cintura y ese culo formidable que incita a ser puesto en posición de verga, o esas piernas suaves y torneadas que se dirigen hacia la parte femenina que atesora enormes placeres por su suavidad y humedad parecidas al paraíso. Tal vez será que ciertas nenas nacidas como nenes nos percatamos que la madre naturaleza nos hizo una broma y poco a poco vamos buscando la manera desde pequeñitas de hallar nuestro lugar femenino en este mundo, primero es con unas bragas de la hermana o la tía, prima o la misma madre, luego un brasier y acabamos vistiéndonos de mujeres con aretes y maquillaje y toda la cosa, el resultado cuando lo miras frente al espejo es que ¡Tú eres una mujer y actúas como tal! Luego a través de la masturbación hallas que necesitas una penetración por la boca o por el ano, así que empiezas a meterte cosas de forma fálica para satisfacerte en esa necesidad, un día descubres que necesitas salir, buscar un macho que te penetre sin control, que te posea, obvio que tu familia, compañeros de la escuela y amigos se dan cuenta de que has ido cambiando y te cuestionan o se burlan cruelmente de ti, la madre y el padre intentan reprimirte para que seas “machito” cosa inútil pues n puedes luchar contra tu naturaleza de nena que te impulsa desesperadamente a convertirte en una mujercita.
Sufres, a veces lloras porque no entiendes que diantres te pasa, por qué no eres como los demás y te dejas de chorradas, sin embargo lentamente la mujer que eres sale a flote como toda mujer, con más sufrimiento que gloria, pasas las de Caín intentando esconderte para alcanzar en la intimidad tus anhelos más secretos, a veces te llegan a encontrar en vestida y la ira se prende en los que no son como tú y no te van a entender jamás, sin embargo en mi caso, mi única hermana mujer menor que yo dos años si se dio cuenta desde que éramos chicas que su hermanito era más hermanita que nada, jugábamos cosas de niñas, me prestaba sus vestiditos, zapatillas, diademas y todo para apoyarme aunque lo hacíamos cuando mamá no estaba que gracias a Dios era muy frecuente porque tenía que trabajar y Lora y yo teníamos muchas veces la casa para nosotras solas, mis hermanitos más pequeños y a los que Lora les lleva 7 y 9 años de edad los cuidaba la abuela en su casa, cerca de la nuestra pero como ella era una mujer independiente no iba cuando Lora y yo estábamos solas.
El temperamento audaz y erótico de Lora nació muy precoz, ella sabía más de la vida que yo, le encantaban mucho los hombres y sabía jugar con ellos con mucha habilidad, además de su belleza e innata feminidad se convirtió en mi maestra en el mundo femenino. Si bien tuvimos juegos eróticos no pasaron en la niñez y adolescencia de frotamientos encima de la ropa, fue después de que ella tuvo a su bebé que lo hicimos por primera vez, algunas otras y después dejamos de hacerlo cuando conoció al que fue después su marido. Aun me apena un poco reconocer que fue la primera mujer biológica con la que estuve. Como narré en la entrega anterior fue con un chico del barrio con quien me inicié en el sexo con varón, después con tíos mayores a cambio de dinero y así hasta que me junté con una mujer vecina mía con quien procreamos un hijito, ahora ya adulto y muy buen hijo que es mi adoración y me ha dado un nieto hermosísimo.
Soy una mujer de 59 años, me cuido un poco y aún tengo mi cuerpo hermoso, aunque debo reconocer que el paso del tiempo nos vuelve menos hermosos y poco a poco las canas y lo demás se viene abajo, sin embargo eso no me quita que aun a mi edad sigo follando con mujeres y hombres. Los años me han hecho perdonarme de muchas cosas que me dan algo de pena haber llevado a cabo, aunque nunca por maldad o mala fe, solo por un poco de sexo. Yo les aseguro a los padres con hijos que van a cambiar de sexo o a transgenerizarse que no intenten impedirles su desarrollo como mujeres o en su caso como hombres, al contrario apóyenlos que solo ustedes pueden darles una vida plena si comprenden que desde pequeños darán muestras de haber nacido en el cuerpo equivocado. Si de verdad los aman ayúdenlos. No es mi intención extenderme más solo diré que una nace… no se hace.