back to top
InicioSexo con maduras

Sexo con maduras
S

RELATO DESTACADO

Sexo con maduras - Pág. 4

El destino estuvo de mi lado: Mi primera madura

Llegué a su casa cerca de las 9 am, ella tardó un poco en abrir, llevaba un vestido floreado, suelto y casi a la altura de las rodillas, un escote muy ligero, la recorrí con mi vista de pies a cabeza, me jaló del brazo haciéndome entrar rápidamente y cerró la puerta

El destino estuvo de mi lado: Mi primera madura (Parte 2)

Lógicamente acepté en una, ella me llevó de la mano, apenas entramos mi verga ya se estaba poniendo dura de nuevo, ella la vio y sonrió, me empezó a besar mientras me hacía una paja poniéndola más dura

Del sexo virtual al sexo real con una mujer casada

Como comprenderán se hizo evidente el deseo de hacer algo más, es decir, conocernos y llevar a cabo todo lo que fantaseábamos... pero los tiempos eran difíciles, su esposo se sentía culpable por su infidelidad y la iba a buscar a su trabajo a diario

El hijo de mi vecina Sandra

Finalmente, él me dijo que no podía más y que se iba a correr. Yo antes me había corrido varias veces, pero él me expresó una fantasía muy especial, quería correrse entre mis tetas, si me cuesta negarles algo a los jóvenes a los que follo y después de lo que estaba disfrutando aún más. Así que él se puso

Las casadas son honradas hasta que las desatienden

Salí de la cama, me echó los brazos alrededor del cuello, yo la atraje hacia mí echándole las manos al culo. Nuestras bocas se juntaron. Mi polla se metió entre sus piernas y comenzamos a bailar. Ella bailaba moviendo las caderas hacia los lados y su pelvis hacia delante y hacia atrás

Con la madura del trabajo

Nos corrimos juntos de una manera deliciosa. Después de eso, la ayudé a jabonarse, sin desaprovechar la oportunidad de masajear sus tetas, mientras frotaba mi pene, a media erección, entre sus nalgas. Se dio la vuelta, nos besamos como dos enamorados. Cuando terminamos de bañarnos, salimos de la ducha, nos vestimos y salimos, yo hacia mi casa, ella al trabajo

Regalito de Navidad

Ya era casi mitad de Diciembre y Fernando había comprado un tanga de algodón rosa, era bastante simple, pero al tacto era muy suave. Él se imaginaba rosando sus yemas de los dedos por el suave algodón que copia los labios de la vulva de Pinky

Me cogí a una milf

Acaricié el cuerpo de la milf y me acerqué a su vagina. Me puse entre sus piernas, comencé a besar el interior de sus muslos, llegando con cuidado al lugar apreciado. Victoria gimió, ya sentía los olores que emite su vagina. Desde sus caderas, me moví suavemente hacia su cueva y la besé a través de sus bragas. Luego se

Rosa Delia, estrella fugaz

Ella cada vez se mojaba más y metía mis dedos en su culo, le pregunte si su esposo le había dado por el culo, diciéndome que no que de hecho jamás se lo había tocado, sacando mi verga de su conchita, y con su ayuda abriéndose las nalgas le bese el culo

El amigo de mi hijo

Yo cogí una de sus manos y la llevé hasta mis tetas, mientras seguía besándole, poco a poco su mano se fue agarrando a mi tetas y comenzó a acariciármelas por encima del vestido, yo con mi mano libre, la llevé hasta su polla, que en esos momentos sobresalía dentro de su pantalón y comencé a acariciársela, desde luego no

Comparte y síguenos en redes

Populares

Loading