back to top
InicioPoesía EróticaUna semana muy romántica en un crucero

Una semana muy romántica en un crucero
U

el

|

visitas

y

comentarios

Apoya a los autores/as con likes y comentarios. No cuestan nada.
Tiempo de lectura: < 1 minuto

De Barcelona a Atenas de Crucero nos fuimos,

en biblioteca, piscina y salón de baile comparecimos.

En las veladas en cubierta observando el cielo estrellado,

estás muy hermosa con ese pareo y el pelo mojado.

 

Le echaste el ojo a una azafata mulata,

de sus pechos, cachas y muslos te empeñaste en hacer una cata.

Sus grandes ojos negros y sus labios carnosos te humedecen el higo,

le guiñas un ojo dándole a entender que quieres montar un trío conmigo.

 

De madrugada no hay nadie en la popa,

quedamos sobre las dos, por esa zona, para darle estopa.

Marga, la azafata, nos llega con un bikini blanco,

Sonia, mi mujer, la recibe con un piquito y abrazándola por un flanco.

 

Mientras de pie, Sonia, la magrea y le da un beso sincero,

yo me siento en el suelo y a Marga le lamo el trasero.

Le succiono bien la almeja color café con labios rosados,

y tres piercings en forma de aro en su clítoris y raja, bien adosados.

 

Sonia le trabaja orejas, cuello, pezones y ombligo,

yo me centro en pantorrillas, muslos, ojete y almeja; sus caldos mendigo.

Ya le llega la flojera, el cuerpo se le estremece, le tiembla,

apoya sus cachas sobre mi cara y de caldos viscosos la siembra.

 

Me recuesto sobre una hamaca y la invito a montarme,

Marga se coloca sobre mí, mirando hacia Sonia y comienza a follarme.

Mi esposa no pierde un segundo en lamer almeja y chorizo,

chupetea y succiona con furia, parece estar bajo un hechizo.

 

Me corro, zumbando fuerte el chumino de Marga,

llenando sus entrañas de una buena descarga.

Me desacoplo y al poco, va saliendo mi lechada,

aquel bollo de chocolate regado de nata, mi mujer se lo zampa y queda encantada.

 

En aquella semana de Crucero Marga, Sonia y un servidor,

repetimos la historia, en muchos lugares, hasta en un vestidor.

Nos hicimos tan íntimos que un día ya en tierra,

Marga nos presentó a su mulato, que a mi esposa puso muy perra.

Compartir relato
Autor
El Manso Embravecido
El Manso Embravecido
Soy un humilde discípulo del Marqués de Sade. Los relatos eróticos y pornográficos me gusta sazonarlos con crítica social, política y religiosa. El sexo muy guarro, el fetichismo y la dominación son algo que me activan la libido y encienden mis instintos más salvajes. Una imagen no siempre vale más que mil palabras. Soy un gran amante de la lectura. iiSaludos y buen sexo!!

Comparte y síguenos en redes

Populares

Novedades

Comentarios

DEJA UN COMENTARIO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Los comentarios que contengan palabras que puedan ofender a otros, serán eliminados automáticamente.
También serán eliminados los comentarios con datos personales: enlaces a páginas o sitios web, correos electrónicos, números de teléfono, WhatsApp, direcciones, etc. Este tipo de datos puede ser utilizado para perjudicar a terceros.