Mi amigo se acomodó con su amiga, el traía unas botellas de licor y ella, tenía la blusa abierta ya con el sostén a la vista. Les sonreí sin decir nada, estaba sudando y concentrado en no correrme todavía, se sentaron a ver el show, mientras comenzaba el de ellos.
Los vi de reojo, siendo que ella ya se inclinaba a manosearle la entrepierna y mi amigo metía mano bajo su pantalón sobándole una nalga, luego ella se la saco y se levantó quitándose el pantalón y quedando solo con una tanguita azul, se puso a gatas y dándome a ver su culo se fue encima de la verga de mi amigo y comenzó a chuparla… ahí no aguante más y me corrí dentro de Jorlena, ella soltó un pujido largo, mientras nos estremecíamos juntos.
Fue cuando ella se percató de nuestros vecinos, cuando empezaron los vítores al ritmo de mi corrida dentro de ella. Tapo su cara de susto apenas se dio cuenta que no estábamos solos, pero no pudo evitar seguir gimiendo por los embistes de mi corrida; la verdad es que me excito más el que nos vieran y la pena que Jorlena trataba de controlar al tiempo que seguía estremeciéndose con el orgasmo.
-Bravo! bravo! -gritaba mi amigo y su acompañante, que si bien no reconocí al principio me di cuenta que era una compañera de algunas clases del semestre.
Mi amigo se recostaba disfrutando como la mano de la chica le ponía dura la verga con su constante subir y bajar, mientras ella miraba como tenía a Jorlena, piernas abiertas y con el constante mete y saca en su sexo.
Cuando ya no tuve más que bombearle, me separe de ella, que rápidamente se acomodó con la cara vuelta hacia la pared, buscando algo con que cubrirse las nalgas desnudas, alcanzo una camiseta de por ahí para ponerse sobre el rostro, pero en el otro lado ya la fiesta era otra, la chica estaba haciendo una magistral chupada de verga. Le frote las nalgas a Jorlena, besándole la cintura y masajeándole las piernas, luego le agarre un pezón y se lo apreté, ella me araño el brazo y levanto la camisa sobre su cara y me lanzo una mirada de enojo.
-Pásame mi ropa! -me dijo con una voz grave, su cara estaba casi tan roja como su pelo y me apartaba la mano con la que seguía frotando sus nalgas descubiertas.
-tranquila nena, aquí todos estamos para divertirnos -dijo la chica de al lado, cuando había levantado su cabeza de entre las piernas de su chico, tomando aire y con el rostro húmedo de sudor y escurriendo liquido por la comisura de sus labios.
Me quede viendo su melena corta cabello negro y seguí las líneas de su cuerpo con la mirada, bajando por su cuello hacia su pecho aun escondido bajo la prenda, su piel bronceada y pechos redondos y se notaban los pezones duros, eso me excito, ella lo noto y me pareció que se acomodó para que pudiera ver bien sus pechos, su vientre y como al bajar más debajo de su ombligo, la curva se escondía bajo su pantaleta húmeda.
Estaba absorto cuando Jorlena se levantó buscando su vestido, se lo alcance, lo agarro y busco la chaqueta y sus zapatos. Quería irse desnuda.
-Me voy! -dijo sin más y se fue hacia la puerta, tirándome la camiseta a la cara.
-Se te va! -Alcanzo a decir entre jadeos mi amigo, intentando no correrse con la mamada que le estaban dando.
Apenas agarre de la muñeca a Jorlena y trate de detenerla y ella se giró enojada y estaba a punto de gritar algo cuando la mano de la chica le jalo del brazo para que la volteara a ver
-si te vas pierdes, yo me lo quedo! -dijo con la voz agitada, viéndome de forma muy intensa, con sus pechos de frente a mí y con la mano sobre las piernas desnudas del chico.
Eso hizo que Jorlena se paralizara, se quedó muda, con la escena de la chica levantándose de entre las piernas del chico, con la cara llena de secreciones y el cuerpo sudoroso, se puso frente a ella, cuerpo con cuerpo era más voluptuosa que Jorlena, tenía más vello entre las piernas y unos pezones grandes y parados.
-Toma un sorbo -le dijo, ofreciéndole un trago, que casi se lo empino en la boca.
Se lo puso frente a los labios y aunque trato de rechazarlo, no le permitió hacerlo, pego su cuerpo con el de ella y Jorlena no tuvo opción más que poner las manos en el cuerpo de ella para tratar de apartarla, eso me excito porque vi el roce de cuerpos, creo que ella también se excito y se olvidó de la pena y el enojo.
Aproveche y tome de la cintura a Jorlena, que quedo entre los dos, además mi verga estaba nuevamente dura, ella giró hacia mí al sentirla detrás de sus nalgas, la chica la abrazo por la cintura, pegándose con sus pechos a su espalda y deslizando sus manos hasta su bajo vientre, con lo que rozo mi verga.
-mira, tu chico sigue con energía, no lo desperdicies -le dijo al oído y rozo mejilla con mejilla, mientras sus manos seguían recorriéndole las caderas desnudas.
Jale a Jorlena nuevamente a la cama y nos quedamos viendo a la chica sentarse sobre mi amigo moviendo las caderas y los pechos frente a nosotros, antes de voltearse y poner su trasero a la vista y volver a chuparle la verga al otro. Me pudo más el morbo y con Jorlena sentada frente a mí, comencé a jalármela nuevamente viendo hacia las nalgas de la chica.
-Oye! -dijo Jorlena al notar hacia donde miraba.
Acércate le dije acariciándole la cintura e invitándola a que me tocara la verga con las manos, que se inclinara con su boca en posición para chuparme. Pero ella aun tímida solo alcanzo a tocarla.
-Dale, tómala -le dije, jalando su mano para que sintiera el tallo duro y húmedo.
Su mano se deslizaba y poco a poco agarraba con más confianza y yo seguía acariciándole su nalga, pasando la mano hacia adentro, entre sus piernas, rozando su coño húmedo, cuando de repente al otro lado el chico dio un alarido, se estremeció y se corrió, la chica lo atrapo todo en su boca, su cuerpo también vibro cuando levanto la cabeza tomando aire y agarrándole la verga empapada con la mano, con la otra lanzo su cabello hacia atrás y se relamió los labios, nos quedó viendo con la cara empapada en jugos, me hizo una mueca sonriente mientras se relamía los labios y bajaba la mirada hacia mi verga.
Se hizo una cola con el cabello, se acercó a la cama y se puso al lado de Jorlena, hombro con hombro y se le quedo viendo, poco a poco acerco su mano a la de ella y también tomo mi verga…
-Te ayudo amor? -le dijo a Jorlena, quien del asombro solo alcanzo a asentir.
Entonces dos manos me estaban manoseando la verga, también tocándome las bolas
-aquí también los pone calientes amor… -le dijo cuándo llevo sus dedos a deslizarse también entre los de ella y mis bolas.
-eyy! -se quejó el chico, al ver que su chica se entretenía en otras bolas.
Ella volteo a verlo y le hizo señas que el rápidamente entendió y se quitó el pantalón del todo y se fue detrás de las nalgas de la chica, comenzó a comérselas, esto hizo que diera un largo suspiro y apretara la mano sobre mi verga y la mano de Jorlena.
La chica me lanzo una mirada de complicidad, cuando se fue pegando a Jorlena y le acercaba la cara a mi verga, cuando ella dudo, se fue a darle besos en la mejilla y yo seguía manoseando su concha que estaba húmeda y caliente, cuando Jorlena comenzó a correrse con mi mano en su coño, la chica la besaba sin pudor, metiéndole la lengua entre los labios.
El chico tenía bien agarradas las nalgas de la chica, pero viendo la situación trato de alcanzar el cuerpo de Jorlena, pero esta no se dejó tocar así que siguió agarrando y palmoteando las nalgas de la chica. Ella hizo que Jorlena pusiera sus labios sobre mi verga, al principio con mucha pena, pero cuando empezó a pasar su lengua por mi verga, se decidió a hacerlo también, ahora dos bocas se deslizaban por mi verga, una mano de Jorlena agarrándome el vello en el pecho y la otra chica, tanteando mis nalgas. Ahora estaba besándola y acariciándole un pecho, metiéndole la lengua entre los labios. Me puse a mil y no aguante más, me empecé a correr y Jorlena se apartó cuando un poco fue a caer a su cara, inmediatamente la chica se apresuró a jalármela con más ganas y a que no se desperdiciara nada, se la trago toda, mi semen estaba en su boca. Me estremecí.
-que rico me lo chupas! -casi lo digo gritando.
Eso enojo a Jorlena, que se puso de pie y agarro otra vez sus cosas, el chico le palmeo una nalga cuando se inclinó a recoger el vestido, ella se movió rápido hacia la puerta, apenas con el vestido puesto y los zapatos y la chaqueta en mano salió aventando la puerta.
-espera! -le grite a Jorlena, pero ella salió apenas pudo ponerse el vestido
-siéntate -volvió a hablar ella y obedecí sin decir nada.
Ella se quitó la blusa dejando a la vista sus pechos, él se los agarro y froto con fuerza, tenía unos pezones duros y oscuros, su piel morena no tenía marcas de traje de baño, lo que me gustó mucho, también podía ver cierto vello corporal, pero que resultaba muy sensual. Se volvió a inclinar sobre mí y sin más me agarro de nuevo de la verga con la mano, se acomodó otra vez el cabello corto, era de un negro intenso, dejaba ver su cuello y espalda y como se arqueaba levantando las nalgas, que seguían bien agarradas siendo perforadas por el chico.
Volvió a chupármela al tiempo que la seguían bombeando por detrás, eso la hizo lanzar un largo gemido y contonear el cuerpo, levantando la cara mostrándome sus pechos balancearse por el movimiento, en un movimiento rápido se lanzó otra vez sobre mi verga, se apoyó sobre mí, así que sentí sus manos arañarme los muslos mientras alcance a poner mi mano sobre su cabeza.
Le estaban dando duro por detrás, dándole fuertes palmadas en las nalgas y agarrándole los pechos, por su parte la chica lo hacía como profesional, pensé que me costaría ponerme nuevamente duro, pero ella me lo estaba chupando maravillosamente, me la puso tan dura como cuando Jorlena puso sus labios sobre la punta y sentí igual de placentero, ella lamia, chupaba, acariciaba mis bolas y lo hacía al tiempo de las embestidas que le estaban dando.
No aguante más y me corrí, ella sintió mi arcada y se sacó el miembro de la boca, toda mi leche fue a parar a su rostro; en ojos, frente, nariz y boca. Siguió jalándomela con la mano, sacando todo lo que me quedaba, lo hizo al tiempo que se corrían por detrás de ella, lanzo un gemido largo de satisfacción. Me acomode para relajarme, mientras ella me limpio de semen el miembro y su chico se recostaba en la cama, con la verga flácida y jalándosela. ella se puso en pie relamiéndose los labios y pasándose la mano entre las piernas que ahora le escurrían de semen, me dio un vistazo completo a su cuerpo moreno, a su pubis recortado y su coño enrojecido por la acción, sus pechos altivos, redondos y de pezones hipnóticos. Se recogió el pelo y me hizo un guiño con la mirada, me quede ido un rato viéndola.
De pronto el chico de al lado tosió y lo voltee a ver, entendí de inmediato que quería que me fuera, que ya había disfrutado lo suficiente. Tome mi ropa y me fui apenas subiéndome los pantalones, en lo que ella se lanzaba a chuparle la verga flácida al chico, que seguro con la habilidad de ella se pondría duro nuevamente.
Pasaron varias semanas en que no vi a Jorlena por ningún lado, ni me contestaba llamadas o mensajes, pero no lo pensaba dejar así nada más.