Hola, somos una pequeña familia con un pequeño secreto, no soy buena escribiendo, pero trataré de contar lo que pasa en nuestra casa.
Somos una familia común y corriente, una más del montón, una pareja de casados emprendedores con un joven universitario, nada fuera de lo normal… ¿O no?
Nuestro matrimonio es uno muy liberal, desde siempre hemos disfrutado del sexo sin prejuicio y sobre todo muy cachondo, hemos cumplido muchas fantasías y estuvimos participando en encuentros swinger.
Todo normal hasta que en el 2018 comenzó lo que cambiaría nuestro placer, como pareja swinger teníamos una vida secreta o mejor dicho discreción, teníamos una cuenta en Facebook totalmente anónima donde conocíamos singles y otras parejas, siempre cuidando nuestra imagen.
Hasta que un día empezamos a hablar con un single, un single de nuestra zona y joven, nos cayó bien pero como éramos anónimos ninguno tenía una imagen de su cara y las nudes pues eran bastantes básicas que no sabríamos adivinar quien era la otra persona, cuadramos una cita y para eso teníamos que hacer una videollamada conociéndonos, y la sorpresa llegó…
El single amable era nuestro hijo, vaya sorpresa nos llevamos todos, quedamos helados, callados y sorprendidos, no dijimos nada hasta que el diablito dijo, ¿y entonces seguiremos con el encuentro?
Yo como mujer me animé, pero como madre lo pensé, mi esposo aún no reaccionaba y dijo que lo pensaría, terminó aceptando y es así como comenzamos nuestra aventura.
Hemos hecho varios tríos, pero mi esposo no está muy convencido, él me da permiso de estar con mi hijo, pero él no participaba mucho.
Salimos con otras parejas sin que ellos sepan que somos madre e hijo, en casa teníamos un calendario para saber con qué macho me tocaría, pero todo cambió porque por motivos del negocio que tenemos mi esposo tuvo que irse a Estados Unidos y ahora solo somos madre e hijo, para más dudas les contesto en mensaje.