Hola, mi nombre es Miriam, soy una mujer casada con 2 hijas, físicamente soy chaparrita, bonita, lindos ojos, pechos grandes y redondos, buena pierna aún que no me gusta mucho lucirlas, nalgas normales y un poco llenita; mi esposo es Carlos, tengo 12 años de casados, pero la historia que les contaré empieza cuando teníamos 4 años de casados y yo 24 años de edad.
Éramos una pareja normal con altas y bajas, pero mi esposo empezó a cambiar repentinamente, era muy discreto con su celular y cada vez llegaba más tarde del trabajo, así que me dispuse a investigar, una noche lo espere afuera de su trabajo y al salir observé cómo se besaba con su compañera, yo estaba destrozada le reclame mucho y el me rogó que le perdonará, seguimos juntos pero mi sed de venganza era muy grande, aunque lo disimulaba.
Días después llegaron vecinos nuevos a vivir justo a un lado de nosotros, una pareja joven de 18 años, la chica embarazada y el chico de nombre Jesús con un cuerpo atlético delgado y muy coqueto, siempre que me encontraba a solas me decía piropos, su esposa lo deje unos días solo ya que por su embarazo decidió ir con su mama para que la cuidara, por ese motivo el chico se me lanzó con todo, me decía que le encantaría un beso mío y me contaba que tenía tres meses sin sexo por el embarazo de su esposa, y poco a poco me fue convenciendo.
Nunca fui de vestirme provocativa pero quería sentir la mirada de este chico así que una mañana cuando mi esposo salía a trabajar de inmediato me cambiaba con una blusa de tirantes escotada y shorts cortito y delgado, Jesús se me acercó de repente me tomo de la cintura me empezó a besar el cuello y los hombros y me arrimo su verga que la tenía durísima me gustaba lo que estaba haciendo pero me separé de el, aún que me gustaba no me sentía lista para más, me dejó tan caliente que toda esa lujuria la desquite con mi esposo lo monte como nunca mientras imaginaba que era Jesús quien me tocaba y penetraba.
La noche siguiente mi esposo dormía mientras Jesús y yo conversábamos por mensajes, me pidió que nos viéramos en el pasillo y yo accedí, salí descalza para no hacer ruido mi shorts cortitos y una blusa delgadita sin bra para que mis pechos se frotaran contra él, al salir de inmediato nos abrazamos y besamos, el me acariciaba cómo loco, levanto mi blusa y empezó a besar mis pechos eso lo disfruté como nunca, me bajo mis shorts con todo y ropa interior se puso de rodillas y realizó el mejor oral de toda mi vida, se levantó y me llevo a su cuarto y me puso a mamársela después de un par de minutos me puso de perrita y me penetraba tan delicioso quería gritar pero solo una pared de 15 cm me separaban de mi esposo.
Después me subí en él, mis movimientos eran tan frenéticos que en 2 minutos llegamos al orgasmo, fue un sexo cortito pero tan placentero, salí de su cuarto cogida desnuda y con la vagina llena de su leche, me recosté a un lado de mi esposo sin sentir culpa, al contrario creo que en ese momento lo perdone.
Unos minutos después siento las manos de mi esposo acariciándome y su boca en mis pechos, y cada vez más abajo hasta llegar a mi vagina, no sabía si reír o detenerlo, pero solo lo disfruté, sentir como se tragaba la leche de mi amante m calentó de nuevo, estaba cansada y satisfecha, pero pude complacer a mi esposo en la cama.
Esta es la historia de mi primera infidelidad seguiré escribiendo las demás gracias por llegar al final.