Conocí a una hermosa mujer por medio redes sociales, una mujer muy atractiva, con personalidad fuerte, ojos grades con un brillo especial, una piel tersa, suave que hacía juego perfecto con el color de su cabello y el rojo de sus labios.
Después de conocernos un poco, generar confianza, saber un poco de ambos se dieron las condiciones para poder vernos, finalmente llegó el día esperado, ella lucía espectacular, como siempre una hermosa sonrisa que dejaba ver sus dientes blancos, llevaba puesto un vestido largo color negro sin mangas con escote en pecho y espalda, abierto de un lado hasta el muslo que dejaba ver su torneada y firme pierna, zapatos con tacón mediano, yo ansioso no veía la hora de recorrer su hermoso cuerpo, en ésta o en otra ocasión.
Durante la cena pregunté si estaba segura, me contestó con seguridad que sí, me preguntó si yo lo estaba, besé su mano tersa, suave, le dije que estaba más que seguro, que le tenía un par de obsequios, en el transcurso de nuestra cena, los acercamientos aumentaron al igual que las caricias, cuando besé sus labios nuestras lenguas se entregaron por completo a un sensual juego, mi mano bajaba ocasionalmente a su desnudo, muslo, ella correspondía sobre mis piernas y un poco más arriba de vez en cuando.
Al terminar los cuatro tiempos de la cena con su respectivo maridaje la música cambió, nos levantamos a bailar, gracias a la poca iluminación las caricias, los besos, los acercamientos continuaron, la tomaba por la cintura para acercarla a mi cuerpo, sentía sus curvas firmes pegadas a mi pene que empezaba a crecer, ella lo notó, no pareció molestarle, se pegaba aún más, bailamos algunas piezas más, bebimos otras copas más, el vino, la música, la plática, todo en conjunto favoreció a que incrementaran las caricias, la temperatura y la excitación, así que decidimos ir a un lugar más íntimo.
Nos dirigimos a un hotel de la ciudad, durante el trayecto reímos, nos besamos y acariciamos en cada semáforo en rojo, me preguntó sobre la sorpresa que le tenía, contesté que esperara un poco, intercambiamos algunos besos y caricias más, sentía la calidez de su piel, nuestras manos se aventuraron más, mis dedos sintieron la humedad de su vagina, sus pezones estaban duros, ella acarició mi pene erecto, lo frotaba con delicadeza.
Llegando al hotel me pidió que no bajará del auto aún, deslizó el cierre de mi pantalón, para mi sorpresa sacó mi falo erecto, lo empezó a besar, a lamer, lo metió todo dentro de su boca, ufff subía y bajaba de una forma deliciosa, mis manos pasaban de su espalda a sus nalgas, antes de que terminara logré moverme, bajamos nos seguimos besando, nos dirigimos a la cama, casi arrancamos nuestra ropa, pero me detuve, ella me miró con ese brillo especial de sus ojos mezcla inocencia y perversidad, le dijo que le entregaría las sorpresas, así lo hice, al verlas sonrió, se dirigió al baño, entretanto yo esperaba ansioso, puse un poco de música, bebí un poco de vino.
Cuando salió del baño en verdad me sorprendió, se había puesto el bodystocking negro con aperturas vaginal y anal, así como el plug con cola que le había regalado, se veía muy sensual, excitante, su tersa piel resaltaba entre los encajes negros, la cola en medio de sus nalgas le daba un toque especial y muy perverso.
Caminaba hacia mi moviendo todo su delicioso cuerpo de una manera sensual y excitante, se detuvo bailando rítmica y sensualmente frente a mí, abrió sus piernas mostrándome los rosados labios de su vagina, en seguida subió una de sus esculturales y curvilíneas piernas a la cama, después la otra, jaló mi cabeza hacia su vagina, la tomé de las duras nalgas, la atraje aún más, empecé a recorrer sus carnosos labios con mi lengua, a lamer toda su hermosa vulva mojada y caliente, ella gemía al tiempo que se acariciaba sus tetas, mi boca se detuvo en su clítoris, ese hermoso botón rosado, empecé a succionarlo, a morderlo, los gemidos aumentaron con sus manos jalaba mi cabeza hacia ella, su cuerpo entero se tensó, de su vagina salió ese néctar caliente que mojó mi cara, mi barba.
Con sus piernas aun temblando, se giró dándome la espalda, se agachó, separó con sus manos esas duras y redondas nalgas para mostrarme su apretado culo adornado con la colita del plug, ufff era sensacional, así de espaldas abrió sus sensuales piernas, separó con una mano sus nalgas, con la otra metía y sacaba el plug de su apretado ano, era muuuy excitante, se agachó, colocó sus rodillas sobre la cama, su vagina que tenían todavía gotas calientes quedó nuevamente frente a mí, también podía ver la colita de zorra, sentí como su boca devoraba mi verga, su lengua y labios la recorrían lento, suave, delicioso, por mi parte recorría nuevamente toda su húmeda vagina con mi lengua, recogiendo las gotas que aún quedaban, dando especial atención a su crecido clítoris succionando y estimulando con mi lengua, con un mano separé sus nalgas, con mi otra mano sacaba y metía el plug en su dilatado culo, de pronto apretó mis dos cabezas, una entre sus piernas mojando toda mi cara, otra dentro de su boca, sacando toda mi leche acumulada.
Después de un respiro bajó de la cama, se hincó frente a mí, tomó mi flácido pene, lo empezó a estimular con la mano primero y después con su boca y con sus redondas tetas, no tardó mucho en ponerlo duro nuevamente, me dijo "quiero tenerlo dentro, cógeme", la subí a la cama, la puse en cuatro sus nalgas con la colita en medio saliendo por la apertura del bodystocking lucía muy excitante, besé y mordí sus nalgas encima de la tela, pasé mi lengua por los pliegues que rodean su ano, limpié también las gotas que escurrían de su vagina a sus muslos, acerqué mi falo duro hacia su vagina para sentir como era devorado por esa cavidad caliente y mojada, se escuchaban entre sus gemidos el choque de nuestros cuerpos, sus nalgas rebotaban en mis muslos cada vez más rápido, ella pedía que no parara, yo apretaba sus nalgas y la jalaba hacia mí, de nuevo sus nalgas y piernas se tensaron, su vagina apretó mi polla, sentir ese delicioso y caliente líquido en mi verga, me hizo explotar de nuevo dentro de ella, con un esfuerzo me incorporé para voltearla, podía ver como su vagina se contraía aún, me agaché, con una mano tomé el plug para meterlo y sacarlo de su culo, con otra mano daba masaje a su vagina, ella acariciaba sus tetas, me gritaba que continuara, mis dedos apretaban y jalaban su clítoris, el plug entraba y salía, logrando que se viniera una vez más, sus piernas se contraían cada vez que salía ese rico néctar, su espalda formaba un arco, finalmente dejó caer todo su peso sobre la cama, las piernas aún le temblaban, con el plug insertado en el culo, y su vagina goteando, la abracé para quedar tendidos y exhaustos!!!
Feliz fin de año y mejor año 2022 a todas mis lectoras!!!