Anteriormente: Mi madre se divorcia de mi padre por una infidelidad, luego de separar bienes comienza un cambio en toda su vida, se libera.
Me cuenta de esos cambios y comienzo a notarlos un domingo en el cual voy a comer sus pastas, allí la noto con calzas, un nuevo color de pelo, una remera escotada deportiva y planes de nuevos negocios.
Por primera vez en mi vida veo a mi madre con calzas que le marcan su figura, y también descubro que mi madre tenía pechos desnudos, al menos por lo que se vio por su escote, algo que siempre estuvo oculto a mi vista.
Mi madre tiene 50 años, comenzó gym con sus amigas, en un mes fue casi todos los días y se nota el cambio en su físico.
No se si es el uso de ropa elastizada o fajas, pero ahora se le puede notar una cintura, sus pechos están más erguidos y su cola que siempre estuvo cubierta por la holgura de un jean o pantalón de vestir hace su presentación cuando camina de acá para allá.
Al despedirme del almuerzo me pide que nos saquemos una foto.
Cambió su celular astillado de 5 años de antigüedad por un iphone, se ríe porque aún le cuesta entenderlo.
Nos sacamos una selfie, cachete con cachete y ella tirando un beso a la cámara.
Es la primera vez que tomamos una foto así.
Nos despedimos hasta otro momento.
Pasan los días y sigo atareado con mi trabajo, cada vez hay que hacer más cosas por la misma paga. Además debo renovar el alquiler dentro de poco tiempo con un incremento sin sentido.
Llego a casa, cocino algo simple y me acuesto a mirar una serie por una plataforma de estas de moda.
Me aburren las historias trilladas que dan ahora, me distraigo y tomo el celular y comienzo a rastrear a la "novia" de mi padre.
Era una chica de 20 años, cuerpo de modelo, sacando cola y tetas en todas las fotos, en ninguna foto aparece mi padre, pero ella sí aparece en restaurantes, boliches, piletas, playas, etc.
Tenía la boca con botox, como muchas de hoy en día, tal vez los pómulos también, se notaba que no era su cara original.
No parecía estudiar ni trabajar, evidentemente mi padre era financista de su estilo de vida. Me agarra un poco de bronca, tanto por mi madre que sufrió el divorcio, como mi padre que por un poco de calentura tira el dinero que era de la familia.
Reviso como siempre el perfil de mi ex, parecía estar con un nuevo novio desde hace un tiempo, se la veía feliz.
Veo el de la chica con la que engañe a mi ex novia y la veo también con un compañero de trabajo, evidentemente yo no era el único que estuvo con ella de la planta.
Estaba por cerrar la aplicación y veo una sugerencia, era mi madre. Se había hecho un perfil de Instagram y estaba subiendo fotos.
Jamás creí que usaría tales aplicaciones, pero ahí estaba, me puse a ver cada una de sus fotos. La mostraba alegre, fuerte, empoderada.
Tenía fotos en el gym, videos donde un profesor joven y musculoso la guiaba a hacer sentadillas, tambíen fotos tomando sol.
¿Mi madre con una bikini? ¿desde cuándo? Ahora parecía haber descubierto esas prendas, desde que era pequeño la recuerdo ir a Mar del Plata con una maya enteriza y un short, donde solo quedaba al descubierto su cuello, sus hombros, brazos y piernas, por debajo del short.
Aún se le nota flacidez en su cuerpo, recién va poco más de un mes en el gym, se notan cambios pero aún le falta bastante, pero lo más importante es que se siente segura de sí misma, segura de su cuerpo, de ninguna otra manera se mostraría así en redes sociales.
Pasan más semanas, en ese tiempo no he podido visitar a mi madre, pero si me mantuve al día con sus actualizaciones en Instagram.
Ha salido con sus amigas de noche, por primera vez desde que se casó con mi padre. Se la veía feliz posando con tragos, un vestido de noche y música de fondo. Se la ve en historias bailando, evidentemente está disfrutando su nueva soltería.
Para dormir hago zapping en el cable, paso por las mismas películas de siempre que pasan cada dos semanas en todos los canales, terminó en un canal donde pasan cine argentino.
Aburrido me pongo a ver una película que no le encontraba mucho sentido, mas que el de agotarme y prepararme para dormir hasta el siguiente día.
De la nada en la película (el bonaerense) los protagonistas comienzan a tener relaciones. Son dos policías, uno joven y ella más madura.
No esperaba encontrarme con una escena sexual en la película pero ahí estaba, no la cambie, la seguí viendo. Escenas donde no se ve mucho, solo algunas nalgas, algún pezón, mucho juego con la oscuridad y la luz tenue. Gemidos, transpiración y la idea de que ella dice que no quiere hacerlo pero termina haciéndolo todo.
No me importó cómo seguía la película, solo me dispuse a meter mi mano en mi bóxer y comenzar a tocar mis bolas y mi pene que ya estaba en crecimiento.
Lo había sacado de mi bóxer, lo tenía en mi mano y comencé a masturbarme recordando lo que acababa de ver en tal escena.
En ese momento que estoy en plena tarea masturbatoria me llama por teléfono mi madre.
En otro momento no la atendería, pero me resultaba extraño que a esa hora de la noche estuviera llamando.
La atiendo, mi mano sigue en mi miembro. Me cuenta de que se le quedó el automóvil, no sabe porque no arranca, que salió con sus amigas y que ahora está en Palermo, zona de bares de Buenos Aires, sin saber cómo volver.
Me visto rápidamente y le digo que salgo para allá a buscarla.
Al llegar al lugar, la encuentro dentro del auto con el asiento reclinado descansando.
Me abre, le hago preguntas de rigor, pruebo encender el auto y no arranca.
Ella está usando un vestido relativamente corto, medias color piel de nylon,
Cuando se agacha para señalarme donde está la llave del capot su falda se sube considerablemente quedando como una mini.
Sus piernas grandes ya se notan mas torneadas por el gym. El frente está más escotado que nunca, mucho más que la remera con la que la vi ese domingo de pastas.
Tras unos ensayos me doy cuenta que parece haberse agotado la batería, parece que se había olvidado las luces encendidas.
Mientras intento hacerlo arrancar, llega una de sus amigas también al rescate, se ve que había llamado a todo el mundo.
"qué lindo chongo te vino a ayudar Sandrita" le dice la amiga a mi madre
Ella se enoja y le dice que soy su hijo, y nos presenta.
"Disculpame, pasa que tome un poquito, no digas nada porque así tengo que llegar a casa" me confiesa graciosa su amiga que estaba muy linda, un jean apretado que marcaba su culo y una blusa escotada.
Tras confirmarle a su amiga de que estaba todo bien ella se despide diciéndole "después pasame el número de tu hijo por si se me rompe el auto…"
A lo que mi madre le grita que nunca y que no sea irrespetuosa mientras se ríen a la vez.
Arranca el vehículo luego de hacer el puente, Nos despedimos organizando algún encuentro pronto, Cada uno se vuelve a su casa.
Llego de madrugada a mi departamento, cansado, me acuesto y me duermo inmediatamente.
Duermo profundamente, en un momento siento un sonido molesto, no le presto atención y sigo durmiendo, pero el sonido sigue. Me despabilo un poco y es mi celular sonando.
Es mi madre nuevamente, aun con los ojos tratando de enfocar y de acomodarse a la luz, atiendo. Me dice que se le volvió a quedar el auto.
Pero no entiendo porqué si solo debía ir a su casa, qué habrá pasado que se le volvió a quedar. Estaría fallando la batería o el alternador que la carga.
Me levanto nuevamente rápido, vistiéndome con lo que tengo a mano y me voy hacia donde está mi madre.
Llego a una calle desierta con árboles y alguna luz de calle amarilla que no ilumina demasiado. Allí encuentro al auto de mi madre.
Le pregunto y le cuestiono de porque dejo apagar el auto y no fue directo a su casa. Intento hacer arrancar el vehículo en una zona que está linda para que nos roben porque no hay nadie circulando.
Me saco la remera para no ensuciarla porque intento sacar la batería y cambiarla por la mía, yo vendría a buscar mi auto al siguiente día.
Tampoco sirve la idea, termino con el cuerpo manchado con aceite y grasa.
Agotado nos sentamos dentro del auto llamando a una grúa que vendría en 2 horas.
Sentados en el auto con la luz tenue, veo el vestido de mi madre más arriba de lo normal por la posición, casi se puede ver su ropa interior. Su escote se ve claro con la luz de la calle.
De repente me dice que no aguanta más y se sube a horcajadas arriba mío, una pierna a cada lado y me pone su escote a la altura de mis ojos.
Se sienta sobre mi y siento el calor de sus piernas, ella siente mi bulto creciendo rápidamente. Sus manos recorren mi cuello y bajan por mi pecho.
"te gusta lo que ves?" me pregunta ronroneando
Asiento con mi cabeza sin decir nada, solo disfrutando ver esos pechos y ese crucifijo que hipnotiza al ir de uno a otro seno.
Su mano baja hasta el cierre de mi pantalón y con esa sola mano saca de mi bóxer mi miembro caliente y duro, lo masajea con suavidad, solo me mira, no nos besamos.
Mis manos recorren sus piernas maduras torneadas, llego hasta tocar ese culo de nalgas generosas.
"rompe la media" me susurra al oído.
Obedezco y se escucha el ruido de la media rota tan fuerte que parece que toda la cuadra escucharía lo que estábamos por hacer.
Ella se levanta un poco, se está corriendo la ropa interior y ubicando mi pija en la dirección precisa a su interior.
Siento la cabeza de mi pija hacer contacto con sus maduros labios vaginales.
Estoy por entrar dentro de mi madre.
Ella me mira y abre su boca y deja escapar un gemido audible que retumba dentro del auto.
Suena el despertador.
Había soñado, mi bóxer está húmedo, tuve sueño húmedo y terminé enchastrando mi ropa interior.
Anoche sí había ayudado a mi madre, si ocurrió lo de la batería, pero el segundo rescate ocurrió solo en mi mente dormida.
Me bañe con culpa, ni siquiera me animé a masturbarme, aunque estaba muy caliente.
No quería ni pensar en la perversión que había soñado.
Pero era solo un sueño, no tiene un sentido literal según la psicología, así que con ese consuelo me dispuse a vivir mi rutina.
[Que les va pareciendo la historia hasta ahora?, que les gustaría que ocurra? Sigan comentando]