back to top
InicioAmor filalInstinto primitivo

Instinto primitivo
I

el

|

visitas

y

comentarios

Apoya a los autores/as con likes y comentarios. No cuestan nada.
Tiempo de lectura: 2 minutos

Soy una mujer casada de 45 años con un marido estupendo y un hijo de 20 años el cual es mi orgullo, pero también despertó un deseo primitivo en mi que me asustaba diariamente. Hacía dos años que no vivía con nosotros desde el día que lo vi chingando con su novia despertó ese instinto. A partir de ese día consulte con mi marido enviarlo con sus abuelos tenía que deshacerme de la tentación. Obviamente lo visitamos y cada vez me preguntaba si podía dar una vuelta le buscaba un sin número de excusas. Lo que no pensé es que mi hijo regresaría a nuestro hogar.

Una tarde después de salir de trabajar llegué a mi casa y ahí estaba mi hijo me sorprendió y hasta me asusté no esperaba encontrarlo en casa. Mi hijo era guapo y desde aquel día me daba nervio estar a solas con él.

Me di un baño para refrescar todo mi ser y estar en la cocina metida y no dejar que esa lujuria me hiciera pecar. Mientras estoy cocinando mi hijo entra y cuando sale me da una nalgada la cual me sorprendió y le grité:

— ¿Se puede saber que carajos te pasa? — él solo me mira y esas pupilas dicen más que la sonrisa perversa que me da. Me preparo una copa de vino. Suena mi celular es mi esposo le comento que Adrián está en la casa y él súper contento porque no lo veía hace tiempo, pero lamentaba no llegar temprano tenía una reunión importante y después saldría a celebrar. Joder toda una noche a solas con él suspiré y le dije— No hay problema suerte. —que ironía.

Ya había terminado en la cocina cuando Adrián me acorraló en el pasillo y me susurro al oído — ¿Por qué huyes de mi y sí me vuelves loco mami? — metiendo su mano debajo de mi vestido; ¡qué demonios me dijo el cabroncito esté. La respiración se me entrecorto y mi corazón latía como un caballo galopando.

No sabía que hacer y solo le dije —hazme tuya— me miro como un lobo hambriento y se pegó a mi. Yo solo le respondí acomodándome mejor en su bicho. Me tocaba con suma firmeza y deseo hasta me hizo una confesión — ¡mmmm! Siempre te veía chichar con papi y me imaginaba que era yo quien te hacía venir.— esa confesión me hizo decirle la mía — Desde que te vi cogiéndote a tu novia siempre chicho a tu papá pensándote.— nos miramos y nos fundimos en jodió puto beso lleno de lujuria.

Mientras nos besábamos me iba desvistiendo no contuvo su deseo me volteo se arrodilló y comenzó a comerme el culo y mi chocha que ricura sentir esa boca. Me hacía mojarme deliciosamente en su lengua. No sabía contener mis gemidos y gritos. Luego de hacerme venir me llevo a la sala. Ahora me tocaba darle placer a mi hijo. Adrián se sentó en el sofá. Me arrodille frente de él; su bicho era otra cosa lo metí a mi boca y comencé a mamárselo y a jugar con sus bolas. Era sublime es con Adrián y más el saber que estaba rompiendo todas las reglas impuestas y disfrutar del acto más primitivo con él lo hice venirse en mi boca.

Me levanté lo besé me agarró por las nalgas duro dejando sus manos marcadas en mi piel. Él me acomodo para cabalgaron cuando sentí como su bicho abría mi interior empecé a jadear moverme poco a poco hasta sentirlo completo en mi interior. Ambos nos movíamos en un vaivén exquisito no sabíamos dónde estábamos sus clavadas eran pura delicia estábamos a listo para venirnos en ese instante me dio la última embestida dónde sentí como su leche mojaba mi interior y fue tan gloriosa que eche la cabeza para atrás para encontrarme con la cara de mi esposo el padre de mi hijo

©C.Dee.L.C

Compartir relato
Relato anterior
Relato siguiente
Autor

Comparte y síguenos en redes

Populares

Novedades

Comentarios

DEJA UN COMENTARIO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Los comentarios que contengan palabras que puedan ofender a otros, serán eliminados automáticamente.
También serán eliminados los comentarios con datos personales: enlaces a páginas o sitios web, correos electrónicos, números de teléfono, WhatsApp, direcciones, etc. Este tipo de datos puede ser utilizado para perjudicar a terceros.