back to top
InicioHeteroMi primer novio (2): De princesa de papá a pequeña puta

Mi primer novio (2): De princesa de papá a pequeña puta
M

el

|

visitas

y

comentarios

Apoya a los autores/as con likes y comentarios. No cuestan nada.
Tiempo de lectura: 4 minutos

Durante toda la semana Oscar y yo estuvimos mensajeándonos vía SMS por la noche, entre semana no nos veíamos mucho, ya que la universidad consumía nuestro tiempo, pero recuerdo que el día miércoles tuvimos una conversación. Algo así…

El -hola chica guapa y sexi como estas?

Yo: bien chico loco y tú??

El: llegando de la uni, quiero verte y quisiera invitarte a salir el sábado

Yo: claro que si, me encantaría y que tienes en mente hacer?

El: pues tengo dos propuestas.

Yo: ok, y cuáles son, a dónde me llevarás o que haremos?

El: pues ir al cine o ir a un hotel para continuar con lo del fin de semana pasado.

Yo: mmm ok, pero en un cine no podríamos continuar con lo del pasado fin… Pero como que vas muy rápido no crees?

El: pues piénsalo y el sábado me dices ok?

Yo: ok pues ya nos vemos el sábado…

Eso entre lo que recuerdo y pues llegaría el viernes, y me mando mensaje donde quiso adelantar la cita, pero… yo tenía cita con Alonso, Alonso casi siempre me utilizaba los días domingo, miércoles y viernes, así que le dije que no podía… Por lo regular los viernes siempre llegaba al departamento de Alonso con vestido, minifalda o abrigo sin nada abajo.

Por fin llegó el fin de semana y la verdad ya estaba ansiosa de ver a Óscar, y pues obvio la respuesta sería ir al hotel, así que decidí ponerme una minifalda negra ajustada al cuerpo, blusa azul y unos botines con tacón muy sexis.

Dieron las 3 de la tarde, hora que ya habíamos acordado, y él llegó puntual, al salir y verme se quedó pasmado, subí al auto le di un beso y yo estaba muy alegre de verlo, me hizo la pregunta del millón.

El: entonces si pensaste a dónde iremos??

Yo: cuáles eran las opciones??

El: hotel o cine

Yo: mmmmm la primera opción…

Su expresión era de sorpresa, así que arrancamos el auto y fuimos camino al hotel, le dije que teníamos hasta media noche para encerrarnos, fuimos a un lugar al sur de la ciudad, a un hotel muy coqueto, esa noche por primera vez estaría con alguien al cual yo elegiría y me sentiría con ganas de estar.

Llegamos al hotel y en la recepción todos nos miraban dos jóvenes apuestas, pero yo todo un mujerón, un hombre en la recepción del hotel me miró muy fijamente, literalmente me desnudo con la vista, y yo lo mire de reojo y sonreí, me encantaba que me miraran…

Entramos a la habitación, y al cerrar la puerta empezamos a besarnos muy apasionadamente hasta llegar a la cama se recostó y yo me subí en él, y así estuvimos besándonos durante muchos minutos, comencé a despojarlo de toda su ropa, le quite la camisa, y baje besando su abdomen hasta llegar al cinturón y desabrochar su pantalón, hasta que ahí estaba ese pene que tanto quería disfrutar con tranquilidad, metérmelo a la boca y a mi cuerpo, porque tenía tanta ansia de él desde el primer día que lo vi, de pronto se sentó en la orilla de la cama y yo de pie empezó a meter su mano bajo mi falda.

Estábamos muy excitados empezó a besarme las piernas y a meterme los dedos, me quite toda la ropa, me hinqué y empecé a chupársela, eran rico y delicioso comerme ese miembro con, ganas, con amor, era diferente, me levanté y el acostado sobre la cama me subí en su mimbro, y empecé a moverme de arriba para abajo y de adelante hacia atrás, mientras él tocaba mis pechos y yo ponía mis manos sobre mis nalgas, así estuvimos un rato, se levantó y me colocó de a perrita en cuatro patas, subiéndose sobre mis nalgas y montándome cuál perra en celo, él tocaba y acariciaba mis nalgas, eso me ponía muy cachonda, exponiendo mi culo hacia él, pidiendo que me introdujera su verga, entraba y salía y yo disfrutaba al 100, hasta que hice que se viniera en mi espalda, pero yo no había terminado, así que quería más y más, dejé que se recuperara.

Así que volví a bajar a comerme su rico pene para motivarlo, de repente volvió a despertar pero en esta ocasión estuvimos en posición de misionero el me penetraba muy fuerte hasta que optó por poner mis piernas sobre sus hombros para que entrara, y yo preguntando que si se había hecho más grande, para motivarlo más y más que me hiciera gritar de placer me estuvo bombeando mucho tiempo hasta que por fin grite de placer culminando mi orgasmo.

Durante esa tarde estuvimos mucho tiempo juntos cominos y cenamos ahí, de pronto surgió una pregunta que jamás en mi vida había escuchado…

El: quieres ser mi novia??

Yo me quedé totalmente sin palabras, y callada durante un momento

Yo: muy bonita forma de decirle a una chica que si quiere ser tu novia, después de que ya te la cogiste y la tienes desnuda en la cama y sonreí…

Él se quedó totalmente callado, y mi respuesta fue un si!! Qué inmediatamente después se convirtió en una sonrisa en su rostro…

Ya de noche nos metimos a un jacuzzi, estábamos abrazados y sentía como su pene estaba excitado, le dice que sí quería de nuevo hacerlo a lo que respondió que si!! Así que nos fuimos directo a la regadera, nos bañamos y ahí me arrodillé metiéndome nuevamente su verga a mi boca, me levanta y apoyando mis manos sobre la pared el me penetraba, tomando mis nalgas, le dije que no terminará dentro de mi, le dije que terminara en mi cara, él se éxito mucho y su cara fue de sorpresa, le dije que quería ver qué se sentía, así me arrodillé y vacío toda su leche en mi cara, moría por comérmela, pero me contuve…

Al terminar nos fuimos a recostar, y me quedé pensando que ese día me pedía ser su novia y no había dejado nada a la imaginación, luego me entregué a él, tal vez llegue a pensar que no me pediría ser su novia y que solo tendríamos placer ocasional, pero a mí me gustaba y lo hacía con agrado…

De camino a casa me dijo que la próxima semana era su cumpleaños y que tendría una reunión con familia y posteriormente con sus amigos en su casa de provincia, que irían sus papás que quería que yo estuviera ahí y que pidiera permiso para quedarme a lo que respondí que si… y en el camino platicábamos sobre sus amigos, su familia.

Al llegar a mi casa a eso de la medianoche le dije que pensará lo que quería de regalo, porque la siguiente semana me dejaría hacer lo que él quisiera… Sonrió y le dije que solo por ser su cumpleaños haría lo que fuera por mantenerlo contento…

El: lo que sea??

Yo: lo que ssea… –respondí- así que para empezar me dices como quieres que vaya vestida y que color de ropa interior quieres que me ponga… "Linda noche papi" y entre a mi casa.

Compartir relato
Autor

Comparte y síguenos en redes

Populares

Novedades

Comentarios

DEJA UN COMENTARIO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Los comentarios que contengan palabras que puedan ofender a otros, serán eliminados automáticamente.
También serán eliminados los comentarios con datos personales: enlaces a páginas o sitios web, correos electrónicos, números de teléfono, WhatsApp, direcciones, etc. Este tipo de datos puede ser utilizado para perjudicar a terceros.