Tenía 18 años, tenía algunos años sin ver a mi primo, mayor 3 años y compartimos los mismos deseos de explorar un nuevo mundo la sexualidad.
Nunca me gustó ir de paseo con mi familia ya que es muy numerosa y tienen que alquilar un bus completo, pero ese verano fue diferente mi primo Joselito iba en el paseo, él era del norte del país, alto chele e iba al gym por lo que su cuerpo estaba muy bien formado.
Todos nos montamos al bus y empezaron las pláticas y yo que me senté atrás podía ver a mi Joselito alto y algo callado en el primer asiento casi copiloto ya que su papa conducía.
Desde el espejo retrovisor nos veíamos a los ojos de vez en cuando, de pequeños era el niño que me molestaba demasiado me llenaba de arena, mojaba con agua mis muñecas o tomaba un cangrejo y me lo ponía en el pelo por lo que no nos llevamos bien.
Ese año fue distinto se veía más maduro e interesante, bastante serio e interesado en que el viaje sea lo más placentero para toda la familia.
Al llegar a la playa todos se organizaban en hacer las casas de campaña, poner el fuego, barrer regar yo ordenada la cocina y él se apareció por atrás de mí ya se había quitado la camisa por lo que podía ver su abdomen muy bien marcado, y sus brazos fuertes y varoniles a pesar que era delgado sus brazos era como el grosor de mis piernas.
Me dijo si necesitaba ayuda y yo al verlo tan guapo y tan cerca me sonrojé y le dije que no que tenía todo controlado con una vocecita toda chillona, mmmm me sentía trágame tierra porque me atraía así.
En esos momentos yo era virgen solo había tenido novios de manita sudada y mi actual novio mis padres no permitieron que viajara con nosotros ya que mi papá era un hombre muy conservador.
Se hizo el almuerzo y todos felices a las 2 pm los niños y mis tías me dijeron vamos a bañarnos entonces me aliste para zambullirme en el agua, me puse un short y debajo un pequeño biquini bastante revelador y que no podía usar por respeto a mis tíos y papá, arriba un traje de baño color negro y muy bonito pero sobre este una camisa verde para cubrir mis pechos que eran un poco grandes.
Así me bañé en el mar por unas 2 horas jugamos, nadamos y todo muy felices, yo salí a secarme un poco y me senté en la arena, a los 5 minutos llegó mi primo y se sentó a mi lado, me empezó a sacar platica y fue muy amable como si fuéramos los mejores amigos
Dieron las 5 de la tarde y ya me llevaba bien con el me conto de que ya trabajaba y que ganaba bastante, que era soltero y que tenía un apartamento en Managua la capital, yo era de Masaya y estudiaba en Managua por lo que podía visitarlo cuando él quisiera.
En el camino hacia nuestro campamento había un motel con restaurante y café, entonces me invito a tomar un café, al entra al café nos dimos cuenta que no habían mesas libres por lo que el pidió una habitación para así echarnos agua y quitarnos la arena del cuerpo compramos unos chocolates calientes y entramos a la habitación todo era muy bonito la cama era grande y tenía un televisor con cable nunca había entrado a un Motel no era como me lo imaginaba.
Él se dispuso a bañarse primero, yo lo espere sentada en la cama, al salir el solo llevaba la toalla, yo entre y abrí la regadera así estuve unos 5 minutos con agua caliente pero de repente me di cuenta que había dejado la puerta abierta del baño y Joselito aprovecho para entrar y desnudo se metió conmigo a la regadera.
Yo me sentía nerviosa grite y le reclame que hacía, y el tomo mi mano y me hizo tocar su pecho, duro y húmedo por el agua que caía y con los ojos muy abierto pude ver su cuerpo magnifico, esos brazos tan fuertes su abdomen plano y bien formado como su fuera un adonis o un dios griego.
El con sus manos me tomo del cuello acomodo mi cabello y me bezo su cuerpo se juntó al mío, de reojo podía ver su pene cada vez más duro y con una curva hacia arriba.
Ya casi eran las 6 de la tarde me preocupara que mi familia se diera cuenta, a él no le importo siguió besándome por varios minutos mientras con sus manos toqueteaba mis pechos, mi cintura y mi espalda, luego se separó me tomo de la mano y me llevo a la cama del cuarto me acostó y me siguió besando, yo me deje llevar y por instinto abrí las piernas a lo que el acerco su pene duro como mármol, balbucee soy virgen y eso lo encendió más.
Guio su pene por abajo y lentamente empezó a penetrarme, yo sentía la presión pero estaba muy húmeda y caliente por lo que al primer empujón entro toda de una, sentía como si me había partido en 2, cuando ya estaba adentro empezó a moverse lentamente y yo me sentía sonrojaba lo que empezó con un pequeño malestar y dolor lo estaba disfrutando se sentía tan bien sus movimientos, sus brazos tomando los míos , sus labios en mi cuello besándome toda, mis pechos duros por el frio del aire acondicionado del cuarto,
Ya habiéndome acostumbrado empezó a meterla más al fondo oh, yo gemía con cada centímetro que entraba ufff mi mente volaba ante estas nuevas sensaciones que me marcarían de por vida , hasta que llego toda hasta el fondo se movía mucho sacándola toda y volviendo a entrar yo sentía contracciones cada vez más fuertes no sabía que era pero mi pelvis se movía sola al ritmo que Josué ponía, primero lo hacía lento luego subía la intensidad el intenso placer que me daba se elevaba cuando se movía rápido y decaía al bajar el ritmo y velocidad y volvía a empezar cuando empezaba a moverse.
Definitivamente era la sensación más placentera que había tenido en la vida, hasta que el empezó a subir el ritmo con mayor intensidad hasta que acabo podía sentir lo caliente que era el semen dentro de mí me sentía en el cielo mientras daba sus últimos movimientos hasta que salió definitivamente, podía ver un pequeño rastro de sangre en su pene flácido mientras yo me acomodaba en su pecho él se acostó a mi lado y me abrazo y beso por unos momentos estábamos en el cielo, hasta que un pensamiento llego a nuestras mentes,
No habíamos usado condón y yo no usaba anticonceptivos… Pero esa será historia para otro día.
Continuará…