¡Hola! Una vez más por aquí paso a dejarles este pequeño relato: esto sucedió ya un tiempo en donde la parte trasera de nuestra casa necesitaba un par de remodelación empezando con el jardín, mis padres ya se habían dado la idea de hacer algo llamativo al patio con una pequeña terraza y algo para el sol así que en unos días se comunicó con un arquitecto y comenzó a realizarles el diseño.
Mi madre un poco emocionada comenzó a escoger el sitio en donde quería sus diseños y sus flores y sin más de inmediato comenzaron a dibujarla. A mi papá le gustó tanto que le pidió que el fin de semana iniciaran ya que en esos días eran épocas de mucho calor. Los preparativos y las cosas comenzaron a llegar el viernes por la tarde así que ese día llegó el arquitecto con 3 albañiles comentándoles a mis padres que eran muy buenos y en menos de 3 semanas quedaría el diseño minimalista del patio.
Mis padres los saludaron y le dieron la llave de la parte trasera porque al traer material no podrían pasar por la sala ya que podrían ensuciarla así que sin más terminaron despidiéndose. El sábado desperté tarde de lo habitual, baje por un vaso de agua y vi a mi mamá en la cocina y a lo lejos a esos 3 albañiles trabajando arduamente. Le pregunté a mi mamá si ya les había ofrecido algo de tomar y me dijo que ya incluso mi papá había salido y de regreso el traería el almuerzo para ellos. ¡Cool! Sole le dije.
Me fui directo a mi cuarto a encerrarme en el clima porque era temporada de calor y lo que menos quería era estar afuera. Al cabo de unos minutos escucho que mi mamá toca la puerta y me dice que saldrá con mi papá que ya les había dejado el almuerzo a los albañiles y que al cabo de las 4 pm ellos se irían. ¡Bueno! Estaba sola en mi cuarto así que mientras me quitaba mi pijama observé desde mi ventana cómo trabajaban con el detestable calor y aunque entre ratos se refrescaban con las bebidas que les habían dejado veía cómo se les marcaban sus gruesos brazos.
Los 3 estaban en playera tipo sports y había uno que más o menos estaba pasable aunque no sé si por calentura a ellos los veía muy bien. Mientras veía que ponerme se me prendió el foco de salir y estar en el patio un rato a ver cómo trabajaban total estaba en mi casa así que me puse un short de mezclilla y una blusa casual pero en mi afán por querer darle las gracias por trabajar en mi patio decidí subirme un poco el short para que vieran un poco de mis glúteos. Baje a la cocina y abrí la puerta hacia el jardín y los vi un poco lejos, me acerqué con el pretexto de preguntarles si no se les ofrecía algo y me respondieron cordialmente con un no gracias la verdad me parecieron lindos.
Volví a subir y ahora para intentar calentarlos un poco observé que había una canasta de ropa limpia y habían algunos calzones y tangas mías ahí así que las tomé y me dirigí de nuevo al patio para colgarlas en un tendedero y dejarla a la vista de ellos. Las extendí bien de manera que las vieran y de inmediato subí a mi cuarto. Una vez ahí me asomaba sin que se dieran cuenta y veía que entre ellos hablaban y señalaban en el lugar donde había colgado parte de mi ropa interior. Imaginaron que los había colgado porque ya las habían lavado y estaban por secarse con el sol así que uno de ellos se acercó y vi como lo tocaba y olía. Jajaja solo me reí.
Tomé mi teléfono y le llame a mi madre preguntando a qué hora llegarían y para hacerles hacer más tiempo le pedí que me trajeran el almuerzo en x lugar. Todo iba en marcha y tenía que volver a bajar y quitar mi ropa interior en señal que ya estaba limpia así que esperé una hora y al bajar salí con la canasta de ropa y una a una iba quitándolas del tendedero. Cuando iba por la última opté por tirarla al piso y agacharme para que no perdieran la vista de mi cuerpo y susurré: “Esta se quedará aquí se volvió a ensuciar” así que la volví a colgar y entre a mi casa, dejé la canasta en el suelo y subí rápido para ver qué más hacían.
Al volver a asomarme vi que el otro albañil se acercó y descolgó mi tanga y se lo metió en el pantalón mientras los otros se reían la verdad no me importó mucho así que dejé por un rato ese asunto. Llegaron mis padres y poco después se iban ellos. Baje y solo veía de afuera como se despedían. “Parece que hicieron un buen trabajo creo que a más tardar la próxima semana ya lo terminen…” mencionó mi padre. De ser así tenía que esperar y hacerles una sorpresa mucho mayor.
Pasaron los días y me emocionaba saber que ya se acercaba el sábado pero aún no sabía cómo coquetearlos y mi problema aumentaba cuando no sabía si mis padres saldrían ese día. Si quedaba sola perfecto para un rato pero si no ahí la dejaba. Llego el sábado y desde muy temprano mi madre llego a despertarme diciendo que acompañaría a mi padre a una parte lejana de la ciudad por unas macetas de diseño ya que el arquitecto no podría acompañar a mi padre y él le pidió que fuera y que lo más seguro es que llegarían un poco tarde ya que el tráfico hacia allá era algo recurrente. Apenas me lo dijo se me quitó el sueño pero tenía que disimularlo así que le dije que estaba bien y que solo pediría algo para el almuerzo y con la misma me hice la dormida.
Cuando escucho el cierre de la puerta me levanto para asegurarme que no estuvieran en la casa y al no ver el coche eso aseguró que ya se habían ido. Los albañiles aún no llegaban ya que la semana pasada habían llegado a las 10 am y al ser muy temprano tenía que alistarme al menos un poco. Mientras salía de bañarme escuché un mensaje de mi teléfono y era una nota de voz de mi padre mencionándome que los albañiles tenían llave trasera y que no me preocupara ya que al parecer ya iban a terminar por lo que no iban a tardar mucho, yo cortantemente le di el ok y me seque con la toalla y en mi cajón solo tomé un calzón rosa de esos ajustados y una pequeña blusa. Me puse mis calcetas de dibujo para parecer un poquito más sexy y como último toque un poco de loción.
La idea era esperarlos y que solo me vieran así que solo me acosté en mi cama y veía desde mi ventana por si llegaban. Mientras estaba boca abajo me veía en el espejo y solo notaba mis bonitos glúteos, comencé a tocarme un poquito y entre ratos lo dejaba ya que no quería pasarme esa mañana.
Cuando abrí los ojos vi a uno de ellos instalando sus cosas en el jardín y luego llego el otro, me pareció raro que solo dos hayan llegado así que decidí poner en marcha mi plan y bajé. Al estar en la cocina abrí la puerta para que notaran que había alguien y en un movimiento torpe por parte mía abrí demasiado rápido la puerta que se escuchó muy fuerte tanto que voltearon a verme. Solo les di los buenos días y les di la espalda solo para que vieran el lindo cuerpo que me cargaba.
Notaba que me veían mucho así que movía mi cuerpo de aquí y allá con el fin que pudieran observarlo. Me sentí un rato en la cocina viéndolos trabajar mientras uno le decía al otro que iba por un poco de material. Cuando vi que no había nadie más que el decidí acercarme y le pregunté si no quería algo de tomar y me dijo que ya tenían algo en sus mochilas, yo quería encenderlo un poco y le pedí que descansara en la cocina mientras llegaba su amigo aunque por un momento lo dudo pero termino yéndose detrás mío sabiendo que veía parte de mis redonditos glúteos.
Una vez adentro le comenté que eran muy rápido en el trabajo y lo más seguro es que pronto les volveríamos a llamar para algunos trabajos. Él sonrió un poco y en una indirecta me dijo “somos rápidos en algunas cosas al menos a mi me gusta hacerlo despacio y sin prisa para hacer bien el trabajo” Jajaja solo me reí y le dije “bueno de ser así quiero ver su rapidez” con una mirada algo coqueta. “¿Pero señorita a qué se refiere…?”
Y ahí mismo le mencioné que uno de ustedes habían robado al parecer una tanga mía, pero que la había dejado ahí como regalo a ustedes “pero pero ¿por qué señorita? Mi compañero que no pudo venir lo tomo y por miedo a que lo notaran por eso no se presentó hoy…” No se preocupen fue un regalo le contesté. “¿Y sus papás señorita?” Me dijo el albañil al parecer ya con un poco más de iniciativa, “salieron y llegaran muy tarde así que puede usted verme en calzón o robarme otra tanguita, usted diga” le dije mientras me acomodaba el calzón hacia arriba. “Hijole la verdad tiene tiempo no veo a una mujer como usted y lo máximo que he hecho es masturbarme con fotografías de chicas bonitas igual a usted” bueno de ser así y como estoy de generosa puede hacerlo frente a mi pero no me puede tocar ¿le parece? le dije y mientras lo veía ya notaba cómo desabrochaba su cinturón y dejaba caer su pantalón, me limité a verle su miembro así que solo me volteé y me incline para que viera un poco de cerca mis nalguitas.
Escuchaba el sonido de sus manos al momento de masturbarse así que para hacerlo terminar un poco rápido hacía movimientos leves con mi cuerpo y le decía “¿así?” “¿Sigo así?” Muy coqueta y solo escuchaba sus movimiento más rápidos en eso escuchamos cómo lo hablaban en el jardín. ¡Carajo! Este wey ya llego con la entrega dijo él. “Tranquilo, dile que venga ahorita lo arreglamos…” le dije. El albañil que estaba conmigo lo llamo y al verme a mi y a su compañero con el miembro afuera se quedó impresionado. “Pasa, siéntate…” le dije. Tuve que hacerlo sentar mientras estaba de pie y recargada de una parte de la cocina moviendo mis glúteos sabía que él tenía que hacer lo mismo que su compañero. “¿Puedo tocar?” Dijo este último. “Y con un no le respondí…” pueden venirse cada que quieran como sea tenemos la mañana libre les comenté.
Ahora escuchaba cómo ambos se masturbaban así que comencé a bailar demasiado sexy para ellos que a estas alturas ambos estaban por arrancar sus miembros del baile que hacía. Uno de ellos se levantó y se puso detrás mío y note un miembro grueso pero luego lo tomé del pecho y le dije que se sentara que así no. Me gustó sentirlo pero no quería hacerlo con ellos.
“Señorita si no podemos tocar necesito inspirarme un poco para venirme…” dijo el albañil que llego después. “¿Que hago para que terminen?” Me detuve a preguntarles. “¿Si nos podría presta a mi y a mi compañero alguna prenda?” ¡Claro! les dije, subí a mi cuarto a buscar algunas ropas intimas y noté que tenía unas medias rojas que nunca había usado así que me las puse y acomode un poco mi calzón y al regresar a cada uno les di una prenda distinta así que ambos se lo pusieron alrededor de sus miembros y continuaron frotándose un buen rato mientras yo seguía bailando.
En eso escucho que uno da como opción de terminar no en el suelo sino en mis nalguitas u otra parte a lo cual no me pareció mala idea siempre y cuando fuera demasiado esperma el que sacaran. Continuaron así un rato mientras hacía mis movimientos eróticos hasta que uno se levantó y rápido le di la espalda e incline mis nalguitas y justamente ahí termino acabando. Debo de reconocer que fue demasiado semen tanto que termino mojando una buena parte de mi calzón y mientras se venía yo sonreí por lo calientito que sentía en esa parte.
Le ofrecí un papel para limpiarse por mientras espera a su amigo cuando de pronto el otro se levanta y con un “voy” me vuelvo a inclinar y vuelvo a sentir más semen ahora un poco más arriba de la espalda.
Al terminar pasó parte de su glande por mis nalguitas y termino sentándose y muy amablemente le ofrecí papel para que igual se limpiara. Note que estaba muy húmeda en la espalda y mis glúteos y les pregunté “¿otra vez?” Ellos dijeron que si y comenzaron de nuevo a jalárselas. Me quité la blusa ya un poco húmeda así que para complacerlos me quité el bra y dejé que vieran mis pechos. “Hay que aprovechar la mañana aún es temprano…” les decía en forma de motivación hasta que uno me pidió que le diera la espalda para ver mis glúteos y al hacerlo me toma de la cintura y logre sentir su miembro aunque no me penetro si hacía ricos los movimientos así que se lo dejé pasar. “Ándale así” le dije sin saber que ya estaba por terminar, me hinca y termina en mis pechos, apenas y terminaba y siento como el otro termina en mi cabello y parte de los hombros. Literal estaba toda húmeda de semen.
Se sentaron y les pedí el favor de limpiar un poco la cocina mientras me bañaba y accedieron. Subí a cambiarme y darme un baño y al bajar todo estaba en orden ni algún olor ni nada y ya solo los veía trabajar.
Me acerqué a darle las gracias pero tenía que cerrar la puerta del jardín para que no sospecharan me dieron las gracias no sin antes el más atrevido me diera una nalgada y termine yéndome. Me acosté y volví a dormir y al despertar escuchaba que ya habían llegado mis padres.
Me asomo por la ventana y si, eran ellos despidiéndose de los albañiles y dándole las gracias por haber hecho un buen trabajo en el jardín. Sabía que ellos habían ganado ya que les había hecho tener una buena mañana, les habían pagado por el trabajo y haberse llevado mi ropa interior donde los tres habíamos disfrutado.