Partí con la idea de ver a mi mujer con otro hombre.
Yo se lo había planteado, pero ella no quería, cada vez que salíamos algún bar le decía “mira ese chico como te mira” y ella no hacía caso y me decía que cortara el tema ese.
Un día salimos de compras al mall y en el patio de comidas había un chico de cómo 25 años, alto, marcado y era de piel oscura. Miraba mucho hacia nuestra mesa hasta que le dije a mi mujer “mira ese muchacho de color como te mira con deseo”. Ella se rio y me dijo que yo estaba loco.
Al salir del mall caminamos a una tienda en la cual mi mujer fue a compra lencería se probaba la ropa y yo la miraba para ver si me gustaba para así llevarla. Al salir del probador me di cuenta que el muchacho negro nos estaba siguiendo.
Me devolví donde mi mujer y se lo dije, obviamente ella no me creyó y dijo “deja de inventar cosas”, “en serio” le dije y ella salió en lencería a mirar a fuera del probador y lo vio parado al final mirándola.
Se puso roja y no sabía que decir, “te lo dije ves” ella se visto rápido y salimos de la tienda obviamente con la lencería que se había probado. Al salir nos dimos cuenta que el muchacho nos seguía, mi mujer muy nerviosa me dijo “dile algo y pregúntale porque nos está siguiendo”.
Ella entró a una cafetería mientras yo salí a hablar con aquel chico. Pero cuando llegué donde el me di cuenta que él no estaba solo sino que con dos chicos más, todos de color.
Obviamente no le dije nada y volví al café por mi mujer para irnos del mall. Le conté a ella lo que había visto al ir hablar con el chico y ella me preguntó “en serio…”, “si” le respondí yo.
-Los puedo ir a ver yo? -Me preguntó.
-Sí, obvio -le dije yo.
Fuimos y los vio, eran tres chicos negros muy guapos y marcados su mirada y actitud cambió me dijo:
-Te animas invitar a los chicos esos a casa?
Yo no podía creer lo que me decía.
-¿Estás segura? -le dije yo.
-Si -me respondió.
-Bueno los iré a invitar.
Llegué donde ellos y les conté que mi mujer quería invitarles a nuestra casa a ellos.
Obviamente dijeron: “vamos de una vez”.
Llegamos al auto, ellos tres atrás, mi mujer no decía ni una palabra en todo el camino.
Llegamos a casa, les serví cervezas a ellos y charlamos en el Iiving, de pronto apareció mi mujer solo con su lencería nueva. Me dijo:
-No te muevas del sillón y solo mira.
Llamó a los chicos ellos la rodearon, los besaba y ellos la tocaban de pies a cabeza, 6 manos negras tocaban a mi mujer delante de mis ojos. Ella les pidió que se desnudaran, ellos de una lo hicieron y ahí sus ojos se abrieron al ver las 3 enormes vergas de esos muchachos.
Se arrodilló y empezó a mamar uno a uno esas enormes vergas negras.
Hasta que pidió a gritos que uno de ellos entrara en ella, se ganó en cuatro y uno de ellos el más vergón unos 26 cm grueso, entró en ella mientras mamaba a los otros dos.
Estuvimos como 2 horas ahí, le hicieron de todo hasta que el final la bañaron en semen esos 3 muchachos y obviamente yo también.
Esa fue la primera vez que hicimos algo así esperando que les guste, me despido.