back to top
InicioSexo con madurasCuarentena y dándole a una señora de 71 años

Cuarentena y dándole a una señora de 71 años
C

el

|

visitas

y

comentarios

Apoya a los autores/as con likes y comentarios. No cuestan nada.
Tiempo de lectura: 3 minutos

Yo y mi mujer vivimos en Vallarta en unos departamentos, hemos pasado encerrados por esto de la cuarentena, solamente vamos al mandado y salimos a platicar al balcón con otros vecinos, mi vecina es una señora de 71 años conservada para su edad es de piel blanca, ojos verdes, cabello castaño con algo de cañas siempre usa batas no deja ver nada, por el otro lado es una pareja mayor que muy poco platican.

Mi vecina de 71 es algo coqueta siempre que estamos platicando con ella saca temas de sexo y cosas así. Mi mujer ya lo ha notado y me ha dicho que como que quiere que me la eche, pero yo le digo que no creo que ya está mayor y no creo que piense en eso. Una mañana mi mujer salió al súper eran las 9 cuando se fue yo me quede acostado, cuando tocan a la puerta, abro y era mi vecina, parada en la puerta toda inofensiva se me queda viendo ya que solo salgo en un short que uso para dormir.

V: buenos días vecino disculpe que lo moleste

Y: buenos días, no pasa nada dígame en qué le puedo ayudar

V: pues de ayudar en mucho. Comenzó a soltar una risa de pícara.

Y: pues usted dirá

V: pues venía a ver si me regalaba un poco de café ya que todavía no me toca ir al súper, y aparte del café algo más un poco de leche y bajo la mirada a mi short.

Y: pase deje le doy el café

Cuando ella pasa y yo me dirijo a la cocina ella me pega una nalgada y comienza a reírse.

Llegó con el bote de café y se lo doy y me dijo

V: ya sé cómo le voy a pagar

Y: no se preocupe no hace falta

Ella me planta un beso en la boca y yo me quedo quieto como si me hubiera quedado en pausa, ella sigue besándome y con una mano comienza a tocarme mi pene, yo le quitó el bote de café y lo pongo en el sillón y comienzo a besarla y a tocarla, me la llevo hasta la mesa del comedor para ahí levantarla y sentarla arriba de la mesa, le comienzo a subir la bata y le bajo el calzón que llevaba, le abro las piernas y veo su vagina algo peluda y después comienzo hacerle sexo oral, ella se retorcía de placer gemía y de su boca salía un ahh, ahh vecino sigue ella comenzó a tener un orgasmo la viejita se sentía como quinceañera, después la acosté en la mesa y comencé a darle duras embestidas mis huevos chocaban con sus nalgas.

V: dale vecino síguele asiii

Y: te voy a dar tu leche para el café

V: sii dámela toda, ahh, ahh me haces sentir como en mis mejores días daleee

Parecía como si la fuera a partir ella se agarraba las tetas que estaban un poco caídas pero su pezón estaba muy firme y con la otra mano se tocaba su clítoris mientras yo la penetraba.

Y: ya voy acabar

V: si acaba dentro de mi quiero sentir tu leche, ahh ahh dale sigue

Y: ya casi ya casi

Cuando empiezo a descargar gran cantidad de leche dentro de su vagina y ella comienza a tener su segundo orgasmo, ella se saca mi verga y me dice no hay que desperdiciar nada de leche y comenzó a mamarme la verga que estaba un poco flácida que después de unos minutos se volvió a poner dura.

V: ay este juguete quiere la revancha

Y: pues hay que darselaaa

La coloqué en el sillón de forma de perrito y comencé a penetrarla con fuerza sus tetas se notaban que colgaban pero eso no impidió que yo se las tocara y apretara el pezón, dure buen rato así dándole cuando ella tuvo su tercer orgasmo se paró y dejo de moverse, después se puso de frente de mí y comenzó a pegarme una mamada, levantaba mi pene y empezaba a succionar mis huevos, duro buen rato mamándomela hasta que le dije:

Y: ya voy a terminar

V: dámelos todos en la boca me los voy a tragar

No resistí más y le descargué mi leche en su boca, ella se los tragó todos, se paró y se puso la bata y el calzón que traía, tomo el bote de café y dijo:

V: me sentí como nueva, sentía que tenía 30 años de nuevo y estaba en mi mejor época.

Y: pues se movía y aguantaba como las de 30.

V: pues la vieja madera es mejor que la de hoy, voy a necesitar que más seguido, metas tu gusano en mi cueva, jajaja.

Y: pues es cuestión que nos pongamos de acuerdo y se den las cosas.

Se retiró dándome un beso, cerré la puerta y comencé a pensar lo acabo de hacer con una señora de 71 años, pero no me arrepiento.

Como a la hora llegó mi mujer y le dije “voy a bañarme, me quieres acompañar”, aproveché para lavarme mi pene y así mismo darle duro a mi mujer.

Compartir relato
Autor

Comparte y síguenos en redes

Populares

Novedades

Comentarios

DEJA UN COMENTARIO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Los comentarios que contengan palabras que puedan ofender a otros, serán eliminados automáticamente.
También serán eliminados los comentarios con datos personales: enlaces a páginas o sitios web, correos electrónicos, números de teléfono, WhatsApp, direcciones, etc. Este tipo de datos puede ser utilizado para perjudicar a terceros.